Título: Confabulación
Autor: Carlos
del Amor
Publicación:
Espasa, marzo de 2017
Páginas: 224
Un hombre joven, en un viaje de trabajo, mata a
una persona, pero extrañamente nadie se hace eco del suceso. Entre el
escepticismo y la incertidumbre, Andrés vadea como puede la situación. No es el
único acontecimiento anómalo al que se tiene que enfrentar. Una visita al
médico le confirma que sufre una enfermedad: confabulación. Cuando su cerebro
no guarda recuerdos, los fabrica. ¿Cómo se vive cuando desconoces qué te ha
ocurrido de verdad? ¿Hasta dónde puede llegar la vida inventada?
Mis impresiones
A Carlos del
Amor lo conocí con El año sin verano,
una novela en la que el autor nos hacía reflexionar sobre los secretos pueden
esconder nuestros vecinos. Las personas que viven a nuestro lado y de las que,
en muchas ocasiones, no sabemos nada. Un novela que me resultó muy agradable y
de la que aún hoy guardo un buen recuerdo.
“Tuve
tiempo de limpiar la sangre; tiempo suficiente para comprobar cómo el resplandeciente
suelo de azulejo blanco había teñido de un rojo oscuro y denso diez minutos
antes. Pero no lo hice. Recuerdo que pensé en que cuando éramos pequeños y
teníamos que dibujar una herida en algún monigote que garabateábamos en la
libreta siempre utilizábamos el rojo brillante, pero la sangre no es de ese
color rojo de la infancia”
La novela
comienza con un asesinato. Andrés Paraíso, el protagonista de esta historia,
acaba de matar a su amigo Juan de una forma brutal. Cuando todo termina coge el
avión que tenía previsto para viajar de Madrid a Barcelona, en donde tiene que
ocuparse de algunos asuntos laborales. Andrés espera que en algún momento la
policía vaya a buscarle (ha dejado suficientes rastros como para que se sepa
con certeza que es él) o por lo menos que la prensa se haga eco de la noticia.
Sin embargo nada de esto sucede y cuando regresa a Madrid se da cuenta de que
ese acontecimiento solo ha existido en su cabeza.
La insólita
situación, junto a algún que otro hecho preocupante, hace que Andrés visite al
médico quien le confirma que padece una extraña enfermedad llamada
confabulación. Cuando su cerebro no puede guardar recuerdos los crea. A partir
de ese momento su vida se convierte en una completa incertidumbre. De los
recuerdos que guarda en su mente es incapaz de discernir cuales son verdaderos
y cuales una mentira. Pero ¿cómo se puede vivir así?
Confabulación es una novela difícil de catalogar en un género. A
pesar de que inicialmente hay un asesinato no es una novela negra ni un thriller.
Quizás lo más adecuado sería decir de ella que es una novela de suspense
psicológico. Para mí ha sido una lectura en apariencia ligera y entretenida
pero que te va llevando de la mano sobre una serie de reflexiones que me han
gustado mucho. Carlos del Amor construye una historia que nos habla de los
recuerdos y de cómo estos afectan a nuestro presente. Sin memoria uno no puede
saber quién ha sido ni cuál ha sido la trayectoria de su vida. Es como perder
la propia identidad ¿Cómo se puede vivir con la duda de si lo vivido es real o
ficción? ¿Cómo puede uno fiarse de sí mismo cuando existe la certeza de una
mente enferma?
Planteado así
parece que el autor tira de imaginación para construir la que es su segunda
novela. Sin embargo la idea sobre la que gira, según dice el propio autor, se
basa en una enfermedad real de la mente que él tuvo conocimiento a través de un
artículo en un periódico. Se trata del síndrome de Korsakoff. Las personas que
lo padecen son incapaces de guardar ciertos recuerdos y para completar esa
ausencia tienden a fabricar otros imaginarios. Pero ellos no son conscientes de
que su mente está trabajado así por tanto no pueden distinguir que es real y
que es ficticio. Al contrario de lo que sucede a Andrés conoceremos otros
personajes que tienen diferentes problemas de memoria y lo manifiestan de otras
formas. A mí este tipo de temas que tratan sobre la mente siempre me han
fascinado. Es un mecanismo con un funcionamiento tan complejo que aún hoy la
ciencia no ha logrado desentrañarlo por completo. Al mismo tiempo no hay
evidenciás palpables como en una dolencia física lo que hace que se complique
su estudio.
El protagonista
es Andrés, un editor que está casado con Alejandra. Fue un niño con una
infancia no muy feliz. Su padre desapareció muy pronto de su vida y fue el
motivo por el que muchos de los niños se burlaran de el en el colegio. Así se
convirtió en una persona solitaria y reservada que se refugiaba en los libros.
Alejandra, su mujer, fue todo lo contrario. La chica más popular del instituto
y con la que Andrés no acaba de creerse que está casado. Él mismo se dice que
ella es demasiado para él. El personaje que está mejor dibujado es sin duda
Andrés ya que al estar narrado en primera persona lo comprendemos muy bien. También
hay una serie de secundarios que tienen diferentes pesos en la trama de la
novela y en general todos son más bien funcionales. Como el escritor y amigo de
Andrés Juan de las Heras o Laura, una mujer a quien conocerá y que ha perdido
la capacidad de recordar desde un día en concreto.
Confabulación está narrada en primera persona y desde mi punto
de vista es el enfoque más adecuado para la historia. Como el protagonista
vivimos la historia en primera persona y no sabemos más de lo que sabe él. Y
así Carlos del Amor nos transmite a la perfección la desorientación e inseguridad
que siente el personaje. Sus dudas, sus miedos y esa lucha que emprende contra
sí mismo y para conocer la verdad.
Como ya
sucedió en El año sin verano está
narrada de forma ligera y amena, con un lenguaje sencillo y directo que te hace
que la novela parezca muy liviana. A veces tiene incluso un punto de sentido
del humor. Y así nos lleva por otros temas tan dispares como las relaciones
familiares y de pareja, el mundo editorial, la amistad, la forma en que dos
personas viven el mismo acontecimiento o el rastro que vamos dejando de
nuestras vidas en las redes sociales. Pero ¿Que ocurre con todo eso cuando
dejamos de existir?
Conclusión