Título: El desorden que dejas
Autor: Carlos Montero
Publicación: Espasa, marzo de 2016
Páginas: 408
La
novela premiada es un intenso thriller psicológico protagonizado y relatado en
primera persona por Raquel, una joven profesora de literatura en horas bajas
que acepta una suplencia en un instituto de Novariz, el pueblo de donde,
casualmente, procede su marido.
En su primer día de trabajo, la joven se entera de que Elvira, su predecesora, se ha suicidado y al finalizar las clases encuentra en su bolso una nota que dice: «¿Y tú cuánto vas a tardar en matarte?”. Decidida, Raquel intentará averiguar quién está detrás de esa amenaza, e inevitablemente se empezará a obsesionar con la antigua profesora.
¿Qué
le ocurrió? ¿Qué la llevó a la depresión si los alumnos la adoraban?
¿Realmente se suicidó o alguien acabó con su vida? ¿Se está
repitiendo el mismo patrón con ella? Y sobre todo, ¿por qué de
repente algunos indicios apuntan al marido de Raquel?
Una novela que arranca como una historia de acoso a una profesora para convertirse enseguida en un thriller perverso y apasionante. Una disección de la debilidad humana. De la culpa. De la fragilidad de las relaciones. Y de las mentiras y secretos sobre las que montamos nuestras vidas sin calibrar ni ser conscientes de las consecuencias.
Una novela que arranca como una historia de acoso a una profesora para convertirse enseguida en un thriller perverso y apasionante. Una disección de la debilidad humana. De la culpa. De la fragilidad de las relaciones. Y de las mentiras y secretos sobre las que montamos nuestras vidas sin calibrar ni ser conscientes de las consecuencias.
Mis
impresiones
No soy amiga ni seguidora de premios. No
fue la razón por la que leí esta novela que ha resultado ganadora de la vigésima edición del Premio Primavera de
Novela aunque su argumento, reconozco,
que me decía: “Léeme”. Y yo, como siempre escucho a los libros, no me pude
resistir.
La novela comienza con el descubrimiento
de un cadáver flotando en las aguas del
pantano de As Conchas, en el rio Limia (Ourense). Se trata de Viruca,
una profesora de literatura de Novariz que llevaba una semana desparecida.
Poco tiempo después Raquel llega al
pueblo para cubrir la baja en el instituto de Viruca. Casualmente Novariz es el
lugar de donde procede su marido por lo que deciden mudarse allí durante los
meses que va a estar trabajando en el instituto ya que Germán está en paro
desde hace tiempo.
Sin embargo, el primer día de trabajo se
encuentra con la noticia de que Viruca se ha suicidado y que todo el mundo la
adoraba. Su nombre no para de repetirse en boca de alumnos y profesores y su
sombra siempre está ahí presente. La presión de los alumnos se hace patente
desde el primer momento y cuando termina la clase encuentra entre los trabajos
que han hecho los alumnos una nota que dice: « ¿Y tú, cuanto vas a tardar en
morir?». De esta forma la antigua profesora se convierte en una obsesión para
Raquel y las sospechas de que su muerte no fue un suicidio la llevan a
investigar qué fue lo que pasó realmente.
El
desorden que dejas es un intenso thriller psicológico
que profundiza en dos cuestiones que están muy de actualidad. Y Carlos Montero
lo aborda desde un punto bastante realista y creíble de forma que es una
historia que bien podría darse en cualquier instituto y suceder a cualquier
persona. Una de ellas es el acoso escolar al que se ven sometidos los profesores.
Con un sistema educativo que está orientado principalmente a proteger al alumno
los profesores han perdido autoridad y apenas existe la disciplina en las
aulas. La violencia contra ellos, las amenazas incluso por parte de los padres
les hacen desmotivarse e ir a sus puestos de trabajo con miedo.
Otro tema que destaca en la novela es la
falta de privacidad o la fácil vulneración de nuestra intimidad entorno a las
redes sociales o la nube, donde se almacena el rastro que vamos dejando en
internet. Porque aunque pensemos que hemos borrado archivos hay gente con altos
conocimientos en esta tecnología que en cualquier momento puede acceder a ello
y recuperar lo que damos por eliminado para siempre. Por otro lado los alumnos
de Raquel han nacido en la era de las nuevas tecnologías y saben los múltiples
usos que pueden darle.
Estos dos problemas los va a sufrir
Raquel en sus propias carnes. Una profesora de literatura interina que se pasa
los años de un lugar a otro sin tener ninguna estabilidad laboral. Quizás en
Novariz ha tenido más suerte porque se trata de una suplencia de siete meses,
algo que nunca le había ocurrido. Mudarse allí con su marido no le apetece
realmente pero lo toma como un sacrificio en su matrimonio ya que en algún
momento han pasado momentos complicados y sobre todo por darle algo de vida a
German, una oportunidad para sentirse mejor después de perder su trabajo hace
un par de años y no avanzar en el proyecto de la novela que tiene pensado
escribir. Un personaje con el que me ha resultado fácil conectar y ha sabido
meterme en su piel.
A su alrededor Germán, su marido, Mauro,
el exmarido de Viruca, sus cuñados y su suegra con quien tiene una relación
algo tensa, Iago, Roi Y Nerea, tres alumnos que la pondrán a prueba entre otros
y por supuesto la proyección de Viruca, más como un fantasma que como un personaje.
Figuras que no están mal construidas y que algunas de ellas nos sorprenderán.
El grueso de la novela está narrado en
primera persona por su protagonista lo que hace que sea un personaje muy
cercano. En cada momento sabemos cómo vive ella todo lo que está sucediendo,
sus razonamientos, sus miedos, sus obsesiones. Un personaje que me ha resultado
muy humano y creíble por su forma de actuar. No es ninguna heroína y se
comporta como tal, como una mujer que comienza a trabajar con toda la ilusión
del mundo pero que poco a poco se va hundiendo.
Este punto de vista si nos acerca al
personaje también nos ofrece una visión limitada de la historia por lo que
iremos descubriendo los secretos entorno a la muerte de Viruca al mismo tiempo
que su protagonista. Salvo por algunos capítulos que centrados en los
personajes nos ofrecen más información de forma que desde el principio tenemos
unos sospechosos.
La historia se desarrolla entre un
pequeño pueblo de Galicia y algunas escenas en Ourense que nos dejan la
sensación de opacidad en el ambiente. El frío, la humedad, el paisaje gris, las
casonas de piedra inspirados en el pueblo natal del autor. Un lugar pequeño
pero con encanto y donde las gentes han aprendido a callar.
El
desorden que dejas nos lleva por una historia
compleja, un thriller psicológico con muchísima tensión que el lector se lleva
consigo mismo y un desarrollo que nos irá revelando muchos secretos que se
ciernen sobre los habitantes de Novariz y nos descubre una historia de interese
económicos, de obsesiones y culpas, una historia donde nada es lo que parece y
en el que se nos da pie a la reflexión. ¿Hasta dónde llegarías por dinero? ¿Qué harías
para salvar tu matrimonio? ¿Cómo se sobrevive a que tu vida sea expuesta sin
pudor en internet?
Conclusión
El
desorden que dejas en un thriller muy entrenado que
nos revelará una historia oscura y compleja que en mi opinión está construida
con credibilidad y consistencia. Una lectura que atrapa desde el primer momento
hasta un final con muchas emociones y sorpresas.