Título: Las hijas del agua
Autora: Sandra Barneda
Publicación: Suma, marzo de 2018
Páginas: 554
«Detrás del miedo
está el mundo que deseas».
Venecia, 1793. Arabella Massari contempla desde su
palacio la llegada de los invitados. Ha organizado una gran fiesta de máscaras.
Entre los asistentes se encuentra Lucrezia Viviani, la hija del mercader
Giuseppe Viviani, que acude con su prometido Roberto Manin. Lucrezia no está
dispuesta a casarse con un hombre al que detesta y hará todo lo posible por
impedir la boda.
Arabella descubrirá
en el festejo que esa joven tímida es la elegida para mantener el
legado de las hijas
del agua, una hermandad secreta de mujeres que luchan
por ser libres.
Las hijas del agua rescata del olvido a
aquellas que lucharon para que fuéramos libres.
Mis impresiones
Las hijas del agua
es el último trabajo publicado por la periodista Sandra Barneda, que es la
tercera novela que formará parte de lo que en principio será una tetralogía. Aunque
cada uno de los volúmenes es de lectura independiente del resto, tienen una
temática común que aúna y revindica el papel de la mujer a través de los cuatro
elementos. Si fue el viento y la tierra anteriormente ahora es el agua.
“No hay milagros sin esperanza; al menos no
en aquel tiempo, no en aquella ciudad. Recostada en uno de los balcones de sus
aposentos, Arabella Massari contemplaba pensativa la llegada de sus invitados.
En la luz del crepúsculo, que teñía el cielo de rojos y naranjas, se alzaba
majestuosa la hilera de góndolas que se afanaban por llegar a Ca Massari antes
de que se marchara la última luz del día. Las embarcaciones se arremolinaban y
algunas se apresuraban a descargar los últimos víveres: buen vino y especias de
Oriente, lechones recién sacrificados y un sinfín de exóticas aves preparadas
para desplumar y hornear. A pesar del trajín de pequeños y distintos navíos por
el Canalazzo, todos se movían al compás de la batuta
de Arabella, la Gran Maestre.”
La historia comienza una noche en Venecia en el año 1793.
Arabella Massari es la Gran Maestre de una orden secreta formada exclusivamente
por mujeres para unirlas y que, desafiando a los hombres, pretenden obtener
poder, luchar por sus derechos y sobre todo conseguir la libertad. No se consideran
inferiores y el conocimiento y el estudio será la forma en que se preparen y
luchen desde el anonimato. Mujeres que se reunen a hurtadillas, enmascaradas
con una moretta, como fantasmas, sin
ser vistas ni oídas.
Esa noche se celebra una gran fiesta en Ca Massari, el
palacio de Arabella, y entre los poderosos invitados que van acudir ella espera
impaciente la llegada de una joven que se sume a la hermandad. Últimamente han
tenido demasiadas bajas y hay que renovar la sangre. Se trata de Lucrezia
Viviani, la hija de un mercader, a la que han prometido en matrimonio con
Roberto Manin, el sobrino del Dux de Venecia. Pero la joven de espíritu rebelde
e inconformista odia al ser despreciable que ha de ser su esposo en el futuro y
no quiere casarse con él. Las hijas del agua intentarán por todos los medios
que el matrimonio no se celebre.
En esta novela nos vamos a encontrar intrigas palaciegas,
ambición, traiciones, secretos, artimañas, venganza y muerte. Pero sin duda el
tema predominante en la novela es la reivindicación del papel femenino en la historia.
Esas mujeres que desde tiempos muy antiguos han intentado ser algo más que
juguetes al servicio de los hombres. Han utilizado las armas que han podido o
que les han permitido y poco a poco han conseguido salir de las sombras y poder
acceder a través de los años a la libertad o y a ser consideradas algo más que
un adorno. En aquel momento las mujeres tenían una vida muy limitada y prácticamente
su único lugar era compañera de un hombre y permanecer en el hogar. De las
ordenes de sus padres pasaban a la de sus esposos sin tener capacidad de
decisión.
Es una novela cuya trama me ha parecido atractiva y en la
que he encontrado escenas de mucha tensión que he disfrutado. Pero también he
tenido la sensación general de que su ritmo, en especial la primera mitad del
libro, era excesivamente lento. En mi opinión, la autora se recrea demasiado en
las mismas cosas, dando la sensación de repetición y que con menos páginas y la
historia más centrada hubiese ganado. No es una novela que llegue a aburrir
pero esa falta de ritmo lastra en cierto modo la trama de la historia. Un dinamismo
que me ha resultado necesario pero que no consigue tampoco a pesar de esa
fluidez y sencillez que caracteriza a la narración. La forma de contar es
bonita, seductora y detallista.
La novela tiene una ambientación atractiva y bien
recreada. Venecia en el siglo XVIII era una ciudad con muchas caras. Los canales,
las aguas, los callejones perdidos la convierten en el sitio ideal que guardara
secretos y escondiera sombras. Por otro lado, las Foscas, las grandes damas con
sus vestidos de brocados, encajes y joyas, sus pelucas y las máscaras que
escondían sus rostros. Como se recrean las fiestas, las relaciones sociales,
las diferencias entre el status de hombres y mujeres e incluso de personas de diferente
clase social se nota que está muy trabajado en la historia.
En cuanto a sus personajes tengo que reconocer que están
correctamente dibujados y se entiende a la perfección su papel en la historia.
Y eso que son unos cuantos. Para mí la joven Lucrezia ha sido el mejor de la
novela por su carácter rebelde, impulsivo y fuerte. Siempre me siento más
atraída por los personajes con estas características. Por ejemplo, a Arabella,
que es otro de sus personajes principales, le ha faltado fuerza. Es la Gran
Maestre de la hermandad de las hijas del agua, una mujer de gran belleza e
inteligencia que ha sabido ganarse siempre el favor de los hombres poderosos.
Hay muchos más personajes en la historia y no me voy a
detener a citarlos a todos. Cada uno tiene su papel. Y junto a ellos aparecen o
se citan personajes históricos reales, como Maria Antonieta, que conectan con
la ficción y la hacen bastante creíble. Es una historia que hubiese podido
suceder.
Conclusión
Las hijas del agua
es una lectura entretenida que cuenta con una trama interesante y aunque he
disfrutado su lectura también me han sobrado páginas o me ha faltado acción. Creo
que es una novela a la que le falta definición.