Título: Tan poca vida
Autor: Hanya Yanagihara
Publicación: Lumen, septiembre de 2016
Páginas: 1008
Para descubrir...
Qué dicen y qué callan los hombres.
De dónde viene y dónde va la culpa.
Cuánto importa el sexo.
A quien podemos llamar amigo.
Y finalmente...
Qué precio tiene la vida y cuándo deja de tener valor.
Para descubrir eso y más, aquí está Tan poca vida, una historia que recorre más de tres décadas de amistad en la vida de cuatro hombres que crecen juntos en Manhattan. Cuatro hombres que tienen que sobrevivir al fracaso y al éxito y que, a lo largo de los años, aprenden a sobreponerse a las crisis económicas, sociales y emocionales. Cuatro hombres que comparten una idea muy peculiar de la intimidad, una manera de estar juntos hecha de pocas palabras y muchos gestos. Cuatro hombres cuya relación la autora utiliza para realizar una minuciosa indagación de los límites de la naturaleza humana.
Mis impresiones
Tan poca vida viene avalada por unas excelentes críticas que la han calificado como la mejor novela del año. Además ha sido finalista del Man Booker Prize y del National Book Award. Y cuando una novela tiene tales antecedentes sitúo mis expectativas muy altas. Comienzo a escribir sabiendo que esta va a ser una reseña de las difíciles En primer lugar porque no se puede hablar mucho de su contenido y también porque es una de esas novelas en que el lector pone mucho de su parte.
“En el undécimo piso solo había un armario y una puerta corredera de cristal que se abría a un pequeño balcón. Desde ahí se veía el edificio de enfrente, donde un hombre sentado fumaba al aire libre en camiseta y pantalón corto pese a ser octubre. Willen levanto una mano a modo de saludo pero él no respondió.”
La novela comienza en Manhattan sumergiéndonos en la vida que cuatro amigos que disfrutan de su amistad desde que se conocieron en la universidad. Cada uno de ellos tiene un carácter diferente y unas aspiraciones en la vida. Son Malcom, JB, Willem y Jude que van abriendo sus caminos en la gran ciudad de Nueva York. Han cerrado una etapa de su vida y al convertirse en adultos tendrán que enfrentarse a los problemas y obstáculos además de sacar partido y disfrutar de sus logros.
No os voy a contar nada más de esta novela porque a poco que se hable, ya es demasiado. La novela arranca con las historias del pasado de los cuatro amigos y una vez que los conozcamos a todos irá derivándose hacia el verdadero protagonista que es Jude. Estableciendo una especie de paralelismo con la obsesión del propio personaje no será de forma inmediata que llegaremos a conocer su pasado. Jude nunca habla de su vida y aunque sus amigos, intrigados, intentan sonsacarle información él nunca cederá ni satisfará su curiosidad.
Tan poca vida es una novela sobrecogedora y desgarradora que se mete en alma y la araña. Pocas veces una lectura me ha dolido tanto hasta el punto de que en ciertos momentos me resultaba difícil seguir leyendo. A pesar de que es una novela que por su forma se lee con facilidad su contenido es durísimo. La novela nos habla de la vida en sí misma. Aprovecha las condiciones en que viven sus personajes para hablarnos, entre otras cosas, del dinero (de la diferencia entre tenerlo y no tenerlo porque no hay que engañarse, una buena economía da seguridad y reconforta), del abuso, de la enfermedad.
Pero no son estos los temas principales. La novela nos habla de la culpa asumida y de cómo nos puede arrastrar a un estado de autodestrucción. A través de los personajes nos habla también de la amistad, la lealtad y el amor. Todo ello íntimamente ligado. Me han gustado muchísimo las reflexiones por las que Yanagihara me ha llevado de la mano. He visto amigos que están presentes hasta las últimas consecuencias, otros que se han equivocado, otros que se han visto obligados a morderse la lengua y aquellos que se despreocupan. Hay personas capaces de darlo todo por esa persona a la que admiran y quieren. Pero también he pensado en si la amistad puede llegar a convertirse en una carga. ¿Dónde están los límites que separan la amistad de algo más?
Con respecto a sus personajes creo que Hanya Hanagihara ha creado en general figuras con mucha vida, con perfiles interesantes y que aportan diferentes cosas a la historia. Willem es un camarero que aspira a ser actor. Un joven confiado, equilibrado y generoso. JB es un artista extravagante y algo voluble. Malcom es arquitecto, sensato, y proviene de buena familia. Pero sin embargo con Jude, el protagonista de la historia, ha hecho un trabajo magnifico siendo un personaje que no olvidaré nunca. Un hombre incapaz de mostrarse a sí mismo e incapaz de permitir el contacto humano. El evitar compartir su dolor, que los demás sepan quien ha sido y hablar de sí mismo se ha convertido en una forma de vida que a la vez detesta. Y como lectora no puedes evitar preguntarte qué cosas tan sucedido en la vida de Jude para que esté tan herido, cómo ha llegado al punto de creer no merecerse la vida.
Con respecto al estilo narrativo está abordado con una ligereza que no tiene la historia. Supongo que para compensar. Será una voz en tercera persona quien nos lleve por la historia con algunos capítulos en que la voz de uno de los personajes coge la batuta. Aún con sus luces y sombras es una novela que me ha atrapado en su interior y no porque su ritmo sea frenético ni porque la intriga me devorase pero la novela me ha resultado tremendamente atractiva. Hay escenas muy duras pero también hay esperanza, cariño y amor desinteresado.
Conclusión
Tan poca vida es una de esas lecturas que te cambian la vida. Un libro que no puedes parar de leer aunque a veces tengas que dejarlo a un lado y tomarte un respiro. Conmovedora, intensa, dura. Se trata de una novela que tanto por su extensión y contenido no te puedes tomar a la ligera.
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