Título: Una pasión Rusa
Autora: Reyes Monforte
Publicación: Planeta, agosto de 2015
Páginas: 592
Impredecible,
bellísima y dotada de un hondo sentimiento, como la música compuesta por
el genial Serguéi Prokófiev, así era Lina, su musa, su amante y su esposa.
Nacida en Madrid en 1897, con apenas 20 años se enamoró perdidamente del que sería su marido, del hombre y también del genio. «La princesa Linette», «mi Avecilla», como la llamaba Prokófiev, comenzó junto al compositor la vertiginosa andadura que da cuerpo a esta novela, que transcurre en los grandes escenarios del siglo XX, desde el Nueva York de los rascacielos, al París de las vanguardias y el glamour, donde la pareja formaba parte del círculo más exclusivo de intelectuales y artistas: Coco Chanel, Hemingway, Picasso, Matisse, Ravel, Diáguilev...
Los años transcurrieron luminosos hasta que Prokófiev decidió regresar a la Unión Soviética, donde pretendía consagrar el éxito cosechado en el resto del mundo. Allí, tras los dramáticos tiempos de la Segunda Guerra Mundial, Lina fue acusada de «espía extranjera» bajo el terror estalinista, encerrada y torturada en la siniestra Lubianka y condenada a trabajos forzados en el gulag. Solo su fortaleza, su pasión por la vida y el amor indestructible que sentía por su marido le permitieron sobrevivir.
Nacida en Madrid en 1897, con apenas 20 años se enamoró perdidamente del que sería su marido, del hombre y también del genio. «La princesa Linette», «mi Avecilla», como la llamaba Prokófiev, comenzó junto al compositor la vertiginosa andadura que da cuerpo a esta novela, que transcurre en los grandes escenarios del siglo XX, desde el Nueva York de los rascacielos, al París de las vanguardias y el glamour, donde la pareja formaba parte del círculo más exclusivo de intelectuales y artistas: Coco Chanel, Hemingway, Picasso, Matisse, Ravel, Diáguilev...
Los años transcurrieron luminosos hasta que Prokófiev decidió regresar a la Unión Soviética, donde pretendía consagrar el éxito cosechado en el resto del mundo. Allí, tras los dramáticos tiempos de la Segunda Guerra Mundial, Lina fue acusada de «espía extranjera» bajo el terror estalinista, encerrada y torturada en la siniestra Lubianka y condenada a trabajos forzados en el gulag. Solo su fortaleza, su pasión por la vida y el amor indestructible que sentía por su marido le permitieron sobrevivir.
Mis impresiones
No sé si a vosotros os ocurre lo mismo que a mí al coger
un libro con el conocimiento de que la vida de sus personajes es o fue
real. Aunque soy consciente de que los
autores se toman ciertas licencias literarias para su construcción me llama la
atención las vidas tan intensas que tuvieron algunos personajes conocidos y al
leerlo me impregno de mucho más realismo. Me gusta la ficción porque tiene
infinitas posibilidades pero también me gusta pasearme por vidas reales y
conocer personajes que como en este caso desconocía por completo.
A Reyes Monforte ya la conocí con Besos
de arena, una novela de corte muy distinto pero con cuya historia disfruté
mucho por eso, y por su historia, sabía que tenía que leer Una pasión rusa.
Esta es la historia de Carolina Codina o Lina Prokófiev,
su nombre de casada. Al comienzo de la novela, aproximadamente en el año 1917, conocemos
a una muchacha de buena familia que aún no ha cumplido los veinte años. Su
padre es un tenor español y su madre una gran soprano rusa. Sus primeros años prácticamente
los vivió con sus abuelos en Rusia por los constantes viajes de trabajo de sus
padres pero tras la muerte de estos la familia emigró a Estados Unidos. Allí en
el Carnigie Hall conoce a un compositor ruso del que se queda prendada de forma
inmediata. Es Serguéi Prokófiev. Poco tiempo después Lina no tiene reparos en
abandonar su vida y su familia para seguir al genio musical del que está
completamente enamorada….
Aquí es donde comienza la azarosa vida de Lina y la que
el lector va conociendo poco a poco. Una vida en la que soñaba con convertirse
en una gran cantante, en que conoció el lujo y el esplendor, viajó por todo el
mundo, se codeó con grandes personalidades el mundo artístico, del cine y la
literatura pero también en la que se enfrentó al miedo y vivió en unas
condiciones infrahumanas porque Lina pasó ocho años en un gulag en Rusia a
donde fue a parar acusada de espionaje, después de ser encerrada y torturada en
la Lubianka. Esta última parte de la novela en la que nos narra sus
experiencias es sobrecogedora.
Los dos protagonistas absolutos de la novela son Lina y
Serguéi Prokófiev, una pareja sin duda muy interesante. Ella se enamoró
perdidamente de él, quizás más por su talento que por el hombre, y su relación
estuvo marcada por el amor, la diversión y la pasión pero también por los celos
enfermizos, los constantes viajes, a veces la incomprensión y la contraposición
de ideas, las idas y venidas y las traiciones. Mientras, Lina soñaba con ser
una famosa cantante y durante muchos años se preparó y asistió a clases pero
nunca consiguió llegar hasta donde ella quiso entre otras razones por el miedo escénico
que sufría. En el relato conocemos a una mujer seductora y que deslumbraba a
todo el mundo pero también entregada, luchadora y con gran capacidad de
sacrificio por su marido. A Serguéi le veremos como un genio voluble y algo
inestable en cuya vida la música era lo primero. Amaba la libertad y era fiel a
sus propias convicciones por encima de todo. Un personaje que no acabará de
encontrarse con nuestra simpatía por completo debido a su comportamiento al
contrario que Lina.
No podía ser de otra manera que Una pasión rusa está impregnada de música ya que está siempre ha
estado muy presente en la vida de su protagonista. Fue hija de Juan Codina, un
tenor español, y Olga Nemiskaia, una soprano rusa que desarrollaron sus
carreras por todo el mundo. Más tarde se casó con un genio que componía y vivía
por y para la música.
El contexto en que se desarrolla la novela es una parte
fundamental de la misma. Cada uno de esos escenarios está perfectamente descrito
reflejándose perfectamente la vida de la época y haciéndose eco de algunos de
los más importantes acontecimientos del siglo XX. Comienza en 1917 y nos narra prácticamente
hasta los años sesenta. Partimos desde nueva york para viajar a Paris en los
dorados y glamurosos años veinte, Ámsterdam o a Italia pero también a la Unión Soviética
en un momento en que la situación política del país no auguraba nada bueno.
Stalin quería conquistar a la población con la música y emprendió una campaña
para atraer a los artistas hasta aquel país. Pero el régimen se cerraba y la
represión se cernía sobre la población. Muchos fueron acusados de ir contra el
régimen, hubo desapariciones, encierros, torturas. A veces sin ni siquiera
motivo.
Lina Serguéi decidieron regresar a Rusia, atraídos por la
trampa del dictador, donde se encontraron el miedo y la incertidumbre de un país
que se dirigía inexorablemente a la guerra. Él fue condenado por tendencias antidemocráticas
que atentaban contra el régimen soviético y obligado a retractarse y pedir
perdón públicamente pero al final logró escapar del país. Ella fue destinada al
gulag, uno de los campos de trabajo donde los prisioneros políticos entre
muchos otros eran condenados a trabajos forzados en condiciones durísimas. Tenían
que resistir jornadas de más de catorce horas de trabajo a temperaturas de
cincuenta grados bajo cero y eso sin haber comido ni descansado correctamente. Eran
el equivalente ruso a los campos de exterminio nazis.
Reyes Monforte enfoca la narración de Una pasión rusa desde un narrador en
tercera persona omnisciente. Con un estilo cuidado y depurado y un ritmo
pausado pero muy afianzado. Consigue un maravilloso retrato de los personajes
con sus intereses y sentimientos y como he dicho un magnifico retrato de la época.
Por la novela circulan también un selecto grupo de personajes reconocidos como
Hemingway, Coco Chanel, Ravel, Boris Pasternak o Stravinski que da la
oportunidad a la autora de contarnos anécdotas muy curiosas relacionadas con
ellos o de la élite cultural de la época. Para hablar la novela da muchísimo de sí pero no quiero alargar más esta reseña.
Conclusión
Una pasión rusa
nos habla de una mujer que a pesar de su intensa vida es muy poco conocida. Una
novela que aparte de narrarnos una gran historia de amor nos lleva por una
magnifica recreación de una parte de la historia del siglo XX. Una novela que
he disfrutado mucho y que sin duda os recomiendo.