Títulos: Los atrevidos dan el gran salto / Los
atrevidos en busca del tesoro
Autoras: Elsa Punset / Rocío Bonilla
Publicación: Beascoa, octubre de 2015
Colección: Taller de emociones
Edad: 7-8 años
Páginas: 48
Saber gestionar
nuestras emociones no siempre es fácil, especialmente para los más pequeños.
Educar con inteligencia emocional es algo esencial para enseñar a los niños a
manejar sus emociones y así mejorar sus relaciones con los demás, superar los
problemas cotidianos y tomar mejores decisiones.
Elsa Punset, la conocida autora y referente
indispensable en el ámbito de la inteligencia emocional, combina en esta
colección aventuras entrañables para los niños y niñas con el taller de
emociones, en el que toda la familia descubrirá pistas y recursos para
mejorar su inteligencia emocional.
Los Atrevidos son Alexia, Tasi y su perro Rocky.
Ellos aún no lo saben, pero están a punto de descubrir cómo hacer magia con sus
emociones. Acompañados por el genial y experimentado entrenador de emociones,
la gaviota Florestán, se enfrentarán cada noche a retos divertidos y
trepidantes. A través de sus aventuras aprenderemos de forma amena a gestionar
nuestras emociones, o lo que es lo mismo: a ponerles nombre, calmarlas o
transformarlas.
En Los Atrevidos dan el gran salto,
nuestros amigos descubren, con una prueba impresionante, ¡CÓMO SER VALIENTES Y
DOMINAR SUS MIEDOS!
En Los Atrevidos en busca del tesoro, nuestros amigos se
embarcan en una arriesgada misión de rescate para descubrir el secreto de donde
se esconde el mejor tesoro del mundo… ¡Y MEJORAR SU AUTOESTIMA!
Mis impresiones
Ser padres no era
una tarea fácil en algunos momentos. Nos volcamos en nuestros hijos, les
enseñamos a comer, a caminar, a vestirse, luego aprenderán a leer y escribir y
cada vez a ser más autónomos. Pero sin embargo hay un aspecto menos tangible
que es mucho más complicado de gestionar y controlar en ellos. Se trata de sus
emociones. Los niños no perciben el mundo como los adultos y en ocasiones les
cuesta expresar sus sentimientos y saber qué es lo que les está pasando. A los
padres a veces nos cuesta comprender ciertos comportamientos y sobre todo
ayudarles a superarlos.
Con la colección Taller de emociones (que por ahora tiene
dos títulos publicados en el sello Beascoa) Elsa Punset, una escritora cuyo
nombre seguro que os suena, les dará a los más pequeños y a nosotros mismos ciertas
claves para que ellos aprendan a comprender y controlar sus emociones. No
siempre tienen porque ser en el sentido negativo ya que hay emociones positivas
como la alegría que pueden llegar a desbordarse y ser un problema. Porque las
emociones también forma parte de la educación y armar una buena inteligencia
emocional es tan importante en su vida como cualquier otro aspecto. Esta
colección a través de diferentes historias nos hablará de la ira, la tristeza,
la alegría, el estrés o el autocontrol entre otras cuestiones a la vez que sus
personajes las van descubriendo.
El primer título
de esta colección es Los atrevidos dan el gran salto y en ella conoceremos a los “atrevidos” que
son dos hermanos llamados Alexia y Tasi y su pequeño perro llamado Rocky. Los
hermanos son aún pequeños y como todos los niños tienen miedo a ciertas cosas
como a la oscuridad, a los monstruos que se esconden bajo la cama o a quedarse
solos. Aunque Tasi tiene un truco para superarlos y es borrar con una goma
invisible todo lo que hay en la habitación así los ruidos extraños y sombras
desaparecen. Sin embargo una noche sucede algo raro. De repente aparece una
gran ventana abierta detrás de la cual se esconde un enorme barco que flota en
el aire. Allí junto a la risueña gaviota Florestán vivirán una increíble
aventura participando en las olimpiadas de las emociones. ¿Conseguirán superar
la prueba?
El segundo título
es Los atrevidos en busca del tesoro. En este volumen ya conocemos a los hermanos
y su perrito pero seremos de testigos de una nueva aventura que van a vivir.
Todo comienza cuando Alexia se pone a llorar porque todo le sale mal, y es que
todos tenemos de vez en cuando un mal día. Los niños del colegio le han puesto
triste ya que se ríen de ella porque es bajita. Y así nunca nadie la elige en
la clase de gimnasia para su equipo. Pero de nuevo aparece la gaviota Florestán
con una nueva prueba que hay que superar en las Olimpiadas de las Emociones. ¿Lo
conseguirán esta vez también?
Si el título
anterior nos hablaba de superar los miedos enfrentándonos a ellos en este otro
nos habla de lo importante que es la autoestima y el sentirnos bien con
nosotros mismos independientemente del comportamiento de los demás. Todos
tenemos en nuestro interior algo único y especial que hay que potenciarlo y
saber cuidarlo. Me parecen dos libros muy acertados para ayudar a los niños a
enfrentarse a cuestiones que en el día a día si no se solucionan a tiempo a la
larga pueden resultar ser un problema grave. Las emociones influyen en nuestro
estado de ánimo, en nuestras reacciones y repercuten en la forma en que nos
relacionamos con el entorno.
Las ilustraciones
son obra de Rocío Bonilla (autora de ¿De
qué color es un beso?) y no pueden ser más tiernas y dulces. Sus personajes
se ganan nuestro cariño y suponen el complemento perfecto a la historia. A
parte son divertidas y con un toque de humor.
Al final de cada
historia hay un taller para que padres (o educadores) e hijos trabajen juntos
las emociones con información muy valiosa tanto para uno como para los otros.
En el primero se nos explica qué es el miedo y algunas claves para gestionarlo,
favoreciendo ciertas actuaciones y con la recomendación de que evitemos otras.
En Caja de Estrategias nos ofrece algunas pautas para controlarlo como la relajación,
las visualizaciones o incluso dibujar el miedo. En el segundo volumen, dedicado
a la autoestima, encontramos las mismas directrices pero enfocadas a esta emoción.
Una muy curiosa es la confección de una caja del tesoro que represente lo más
valioso que en el interior de uno mismo.
En conclusión, Los atrevidos dan el salto y Los atrevidos en busca del tesoro son
dos títulos que ayudarán, tanto a niños como padres, a controlar y gestionar
las emociones. Un aspecto en su educación que no hay que descuidar aunque no
sea tan evidente como otros.