lunes, 23 de abril de 2018

El coleccionista de libros - Alice Thompson


Título: El coleccionista de libros
Autora: Alice Thompson
Publicación: Siruela, febrero de 2018
Páginas: 202

En la Inglaterra eduardiana, Violet parece llevar una vida de ensueño: un marido caballeroso, un hijo adorable, una lujosa residencia... Pero la creciente obsesión por uno de los preciados libros que colecciona su esposo —un misterioso volumen de cuentos de hadas guardado bajo llave— hará que su idílica existencia comience a tambalearse. Asediada por unas perturbadoras alucinaciones que amenazan su cordura, ingresa temporalmente en un sanatorio. Pero cuando, a su regreso, descubre que una bella y enigmática niñera ha ocupado su lugar, los horrores padecidos durante su internamiento no serán nada en comparación con los que su propio hogar le tiene reservados...

Alimentada en su fondo por la siniestra leyenda de Barba Azul, Alice Thompson nos ofrece una novela oscura y macabra, una creación elegantemente diabólica que, a la vez que homenajea a Rebeca y a la Angela Carter más transgresora, no pierde de vista en ningún momento el verdadero propósito de la mejores historias de terror: que el escalofrío que nos sacude durante su lectura se prolongue más allá de la última página.

Mis impresiones

De esta novela me atrajo mucho la referencia a las historias de terror y al título de Rebeca, de Daphne du Maurier, o Barba azul que se hace en su sinopsis. Y tengo que reconocer que tiene un parecido más que razonable aunque no llega a ser verdadero terror lo que encontramos en ella por lo que creo que cualquiera puede disfrutarla.

“Violet se sentó en el banco junto a la ventana a esperar a que el coche apareciese por la larga avenida en dirección a su casa de campo. Estaba deseando que su marido, Archie, regresara de Londres. Las doradas cabezas de los narcisos que bordeaban la entrada permanecían inmóviles. Más tarde, quizá un criado les llevase algo de beber a la salita y Archie se recostaría en el sillón junto a la chimenea y le contaría cómo le había ido el día en el trabajo. Mientras aguardaba, volvió a oír el llanto que procedía de la habitación del bebé.”

A principios del siglo XX, Violet es una joven que lleva poco más de un año casada con Archie y tienen un bebé llamado Félix. Con diecinueve años y tras la pérdida de sus padres, había llegado a Londres buscando un empleo y coincidió con el que sería su esposo en una terraza de un café. Inmediatamente le había llamado la atención la misteriosa mirada de aquel hombre que antes de alejarse le había dejado la tarjeta de la librería de la que era propietario. Allí es donde se enteró de que era viudo. Poco después estaban casados y un hijo completó su felicidad. Sin embargo la aparición en escena de un misterioso libro lujosamente encuadernado dedicado a Rose, la anterior esposa de Archie, comienza a hacer que el mundo de Violet se tambalee. Su obsesión por ese libro se volverá insana y peligrosa para su salud.

La referencia a los libros que ya se hace en su título a muchos seguro que atraerá. La mayoría hemos leído ya novelas con un marcado contenido metaliterario pero en esta ocasión nos va a hablar de dos tipos de bibliófilos. Por un lado, Violet es el tipo de persona a la que le interesa el contenido de un libro, la esencia o lo que esconde en su interior. Sin embargo su marido representa el coleccionista de primeras ediciones, de ejemplares raros, curiosos, especiales… y sin embargo solo son objeto de culto. Nunca los lee. Adornan una maravillosa biblioteca que no puede ser tocada para que sus joyas no se estropeen.

Para Violet descubrir un ejemplar maravillosamente encuadernado de un libro de cuentos de hadas dedicado a su anterior esposa, escondido del mundo, hace que se replantee su vida. Comienza a recelar de su marido, a sufrir alucinaciones y poner al límite su salud mental.

Me ha parecido una buena novela, muy interesante, oscura, algo macabra, que tiene más y más intriga conforme avanzamos en ella y que no me ocurre definir de otra manera que como “un cuento de hadas gótico”. Una novela que se desarrolla a principios del siglo XX, en la que veremos cómo los cuentos de hadas no siempre tienen finales felices.

Violet es la protagonista de la historia y poco a poco vemos como su vida se va llenado de sombras. Al principio de la novela su vida es idílica y ella está muy aferrada a su marido. Ha perdido a sus padres y sin más familia quiere construir una propia.  Quizás es mejor vivir ajena a ciertas cosas que saberlo todo. Uno puede pensar que es más feliz y está más seguro con medias verdades. Su esposo siempre le ha parecido un hombre con ciertas peculiaridades y rarezas, que en el fondo le hacían parecer más atractivo si cabe, pero llega un momento en que Violet desciende al abismo y dará con sus huesos en un sanatorio. A la vuelta encontrará una mujer en casa, una desconocida de la que le cuentan que va a cuidar de su hijo aunque ella no la quiere ella. Cuando logra salir de ese estado y comienza a tomar las riendas de la situación.

Secundarios misteriosos son los que nos vamos a encontrar en la novela y no sabremos muy bien qué esperar de ellos. Lo cual a mi parecer la hace más interesante aunque no queden del todo desarrollados.

La novela tiene una buena ambientación. Me ha gustado mucho ese aspecto gótico que crea una casa en el campo, un sanatorio, libros antiguos, etc… Y esa sociedad que se entrevé. No hay muchas descripciones porque no es una novela muy extensa pero me han parecido suficientes para conseguir un ambiente tenso y oscuro. Además nos vamos a encontrar en ese momento, la primera década del siglo XX, en que cualquier cosa que se le sucediera a una mujer se achacaba a la histeria femenina sin valorar las enfermedades reales que pudieran tener o que hubiese causas reales que las condujeran a ese estado. En el sanatorio donde acaba Violet hay muchas mujeres incomprendidas a las que se encierra y se les aplican terapias agresivas como el electroshock.

El coleccionista de libros es una novela muy bien narrada, que se hace ligera entre las manos y prácticamente se lee de una sentada. Es relato envolvente, a veces incluso tiene cierto lirismo. En muchas ocasiones he escuchado que las versiones originales de los cuentos infantiles, hoy tan dulces y tan inocentes, surgieron de otra forma mucho más oscura y macabra. Y es la base de esta novela.  

Conclusión

He disfrutado mucho de la lectura de El coleccionista de libros. Una novela envolvente, intrigante y muy interesante que no sumerge en las versiones más crueles de los cuentos de hadas.
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