Título: Animales domésticos
Autora: Teresa Viejo
Publicación: Ediciones B, agosto de 2017
Páginas: 530
Me llamo Abigail y mi vida ha estallado en mil pedazos. Este es el relato
de cómo los he ido recogiendo en busca de saber quién soy. Y quiénes han sido las
personas que han estado a mi lado. He descubierto de mí cosas que no sabía.
Algunas muy oscuras. He caído en la tentación repetidas veces. He sentido
rencor y he urdido una venganza sin que me preocupasen las consecuencias. No me
importa que me juzguéis, yo misma lo he hecho. Pero sé que cuando leáis esta
historia a pesar de todo me entenderéis. Al fin y al cabo estoy hablado de
amor. Y es normal pensar que el amor no tiene límites.
La vida nos pone encrucijadas para que demostremos de qué madera estamos
hechos. Como aquella caja de galletas de la infancia que esperaba en lo alto
del armario acechando nuestro carácter y obligándonos a definirnos.
¿Qué harías tú ante la caja de galletas?
Mis impresiones
A pesar de que Teresa Viejo ha publicado ya varios libros, no había
tenido la ocasión de leer nada de ella. Animales
domésticos es su último trabajo, publicada por Ediciones B, y el libro con
que la he conocido. Dicen que es un libro muy diferente a los anteriores,
aunque yo, como es dicho, no puedo comparar.
“La moqueta amortigua el sonido de
mis tacones al avanzar por el corredor. Una pena porque me gusta su tac-tac-tac. Me
infunde poder. Si no pisara en blando resonarían con un ritmo ligeramente
obstinado. Habitación 5942. No he encontrado una regla para memorizar el número
antes de salir del coche y lo he apuntado con lápiz de ojos en el dorso de la
mano. A lo mejor mi inconsciente quería olvidarlo, vete a saber.
«La puerta estará entreabierta. No
llames.» ¿Ves? De esto sí me acuerdo, no en vano tengo una memoria semántica
gracias a la que, evocando una palabra, a veces incluso un olor, puedo recrear
al detalle una situación vivida tiempo atrás.”
Abigail es una mujer de cuarenta años que está casada,
tiene un hijo y trabaja en el sector inmobiliario. Su vida parece normal y
corriente hasta que su marido, que está parado, en un intento de volver al
mercado laboral se marcha un mes a América para encontrar posibles inversores
en el negocio que ha ideado.
Poco después de su marcha Abigail necesita imprimir
unos documentos y como su vieja impresora no funciona entra en el despacho de
Fernando para hacerlo allí. Sin embargo lo que encuentra despierta en ella la
desconfianza. Su marido tiene una contraseña para acceder al ordenador.
¿Porque? ¿Que guarda allí que no quiere que nadie vea? De esta forma Abigail
comienza a conocer quién es realmente su marido y que esconde detrás de las
contraseñas….
Animales
domésticos es la lucha que emprende una mujer por descubrir en qué
punto se rompió su matrimonio. Descubrir que su marido se relaciona con otras
mujeres destruye su mundo por completo, tal y como ella lo concebía. Mientras
busca información intentando llegar a la verdad, por su mente pasan miles de
ideas y conjeturas a la vez que repasa como ha sido su relación con la
inquietud de cómo va a ser en el futuro. Porque inevitablemente esto lo
cambiará todo.
Con esta novela, Teresa Viejo explora las relaciones
de pareja a través de la infidelidad algo que sufren, han sufrido o sufrirán muchísimas
personas en su vida. Corresponde a una realidad que tenemos delante. Y sin
embargo hay un concepto que me llama mucho la atención y que es quizás un
puntal de la novela y es que nos enamoramos de una persona tal y como es pero
con el tiempo pretendemos hacerla cambiar, amoldarla a nuestras necesidades y
lo que queremos que sea. Hay deseos o instintos que son irreprimibles por mucho
que queramos soterrarlos o anularlos.
La llegada de las redes sociales y de los smartphones
ha cambiado nuestra vida de forma brutal casi sin que podamos percibirlo.
Estamos localizables en todo momento y podemos hacer infinidad de cosas, en
cualquier lugar y sitio, que antes no podíamos a través de estos aparatos. Que a
veces nos dan la libertad y otras nos la quitan. Pero también ha dado lugar a
que las relaciones cambien, a que podamos conocer otras personas y
relacionarnos con ellas de otra forma. Ni siquiera uno tiene que mostrarse tal
y como es. Puede jugar a ser quien quiera. Hay gente que simplemente lo utiliza
como un juego, el coqueteo virtual y otras pueden llegar más allá. De hecho,
adentrarse en un móvil o un ordenador de otra persona puede suponer pisar un
terreno peligroso.
La novela está narrada en primera persona por Abigail
lo que da lugar a que la autora explore y definida su universo interior de forma
muy profunda. Lo que siente, lo que piensa y sus emociones resultan muy claras
y transparentes para el lector. No cuesta comprenderla y ponerse en su lugar. Es
una mujer vital, con carácter. Tras el choque inicial Abigail se comienza a
plantear muchas cosas, que la lleven quizás incluso al deseo de venganza. De
hacer lo mismo que le han hecho. Y a explorar con ello una parte desconocida de
sí misma y a evolucionar en su forma de concebir las cosas.
Y por ello no llegamos a la típica historia de
infidelidad. Este libro tiene una clara orientación hacia la reflexión sobre
las relaciones de pareja, sobre como lo tomamos y sobre como la rutina puede
hacernos llegar a explorar otros caminos. El morbo, las relaciones sexuales en
diferentes formas, la rutina, las adicciones, el deseo… son algunos de los
temas que va a tocar Teresa Viejo en ella.
Es por este carácter que el libro no tiene un gran
ritmo, sobre todo al principio, más bien es una lectura pausada con toques
intimistas que está plagada de reflexiones. A la vez esa investigación que
lleva la protagonista lleva a cabo a través de cuentas de correo electrónico,
móviles sin tarjeta o chats le da cierto suspense.
La novela está narrada en primera persona lo que hace
que nos acerquemos mucho al personaje conociendo en todo momento lo que pasa
por su mente. Con un estilo fluido, directo y natural, pero cuidado a la par,
va tocando muchos temas y llegando al punto que la autora pretende con un final
que me ha hecho pensar mucho. Me ha hecho ponerme en lugar de la protagonista y
aunque quizás yo hubiera actuado de forma diferente la he logrado comprender.
Conclusión
Con Animales
domésticos su autora no intenta contarnos otra historia más sobre la infidelidad,
sino que en mi opinión pretende hacernos ver que hay muchas maneras de concebir
y vivir las relaciones en pareja. Que muchas veces el amor trasciende de lo
físico o lo terrenal.
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