lunes, 16 de octubre de 2017

El viento en la cara - Saphia Azzedine



Título: El viento en la cara
Autora: Saphia Azzeddine
Publicación: Grijalbo, septiembre de 2017
Páginas: 251

Bilqiss, una joven viuda musulmana, se enfrenta a un juicio por haberse atrevido a ocupar el lugar del muecín a la hora del rezo. Sabe que, más allá de ese crimen, la acusación real es simplemente la de ser mujer y no querer someterse a unas reglas que los fundamentalistas aplican en el nombre de Alá.

Pero Bilqiss no está sola. Hasta el país se ha desplazado una periodista norteamericana, sensibilizada por la noticia, que hará cuanto esté en su mano para difundir su causa por todo el mundo. Y el propio juez del caso, alguien que conoce bien a la acusada, se debate entre la obediencia ciega a la ley y la admiración por una moderna Scherezade capaz de seducirlo con su discurso rebelde.

Los relatos de estos tres personajes irán tejiendo un retrato fiel y conmovedor del proceso contra una heroína dispuesta a luchar hasta el final por su vida y su libertad. Alguien que alza la voz porque es consciente de que su absolución sería algo más que una victoria personal. Para ella y para muchas mujeres de su país significaría una llama de esperanza en estos tiempos oscuros.

Mis impresiones

Saphia Azzeddine es una autora de origen marroquí que se instaló con sus padres en Francia. Ha estudiado sociología y esta es su sexta novela. En ella pone de manifiesto su oposición al integrismo islámico. La sinopsis de El viento en la cara me llamó muchísimo la atención y su lectura me ha sorprendido gratamente. Porque es de esas novelas en la que esperaba encontrar algo más que una historia y lo ha cumplido con creces.

“A diferencia de ustedes, yo no hablaré en Su nombre. Aun así tengo una intuición. Ustedes adoran a Dios, pero Él los detesta”

Con esta frase conocemos a Bilqiss, una mujer que está siendo juzgada por incumplir la ley musulmana. Su delito fue recitar al Adhan –la llamada a la oración- emulando al muecín estando este acto está prohibido para las mujeres. Por esto y por no seguir a rajatabla las normas de los fanáticos religiosos todo el mundo espera que muera lapidada.

También es la historia del juez que tiene que dictaminar la sentencia contra esa mujer. La conoce desde hace tiempo y se debate entre sus propias emociones, la atracción que siente hacia ella y lo que la comunidad espera de él, que ejecute un castigo ejemplar.

Un tercer puntal de la novela es Leandra, una periodista norteamericana que conmovida y atraída por el caso desea cubrirlo y mostrarlo a la sociedad. Quizás ella pueda hacer algo por Bilqiss, quizás denunciándolo ante el mundo se pueda hacer fuerza.

El viento en la cara ha sido una novela que he disfrutado mucho. Por un lado, nos presenta un tema muy delicado y complicado como es el fanatismo musulmán (que es algo inherente a todas las demás religiones, aunque sea en diferentes épocas y manifestaciones) y lo hace con mucha inteligencia. Crea un lado emocional y por otro evalúa el tema desde varios puntos de vista realizando una crítica más global que no solo se ciñe al tema de la violencia y la situación de las mujeres en países con esta doctrina.

Es una historia dura, la de una mujer a la que quieren ver muerta. Desde nuestro punto de vista, el del pensamiento occidental, su delito no es grave. Pero desde el otro lado es castigado con la muerte. Bilqiss además es una mujer con pensamiento propio, que se atreve a cuestionar las reglas del mundo en el que vive, que condena las practicas violentas que se aplican a la religión en la que cree. Bilqiss es una mujer inteligente que supone un peligro y que hace que muchos hombres se sientan amenazados. Una mujer a quien con trece años casaron por obligación con un hombre mayor como sucede a miles de niñas en el mundo.

Otro personaje es el juez del caso. Sabe que su obligación es dictarla culpable porque la comunidad lo pide. Sin embargo, él se acerca a la mujer, entabla conversación con ella y se siente cautivado por sus ideas. Este personaje representa la duda, el dilema moral. Porque en el fondo siente que ella tiene razón. De hecho, muchos de los personajes en privado relajan las normas del Corán o las interpretan a su manera. La historia de su matrimonio refleja claramente cómo se siente la mujer es ese entorno en el que el hombre es quien manda.

El otro punto de vista es representado por Leandra, un periodista Norteamérica que llega dispuesta a cambiarlo todo, cree que podrá salvar a Bilqiss. Llega con ideas preconcebidas pero su relación con una familia musulmana le hará comprender que no todos ellos son terroristas y comienza a comprender como se vive allí. Ella es una mujer moderna, que vive con todos los derechos y libertades y además procede de una familia bien acomodada.

A través de estos y los diferentes secundarios toca el tema por ejemplo del burka o velo, el hecho de que una mujer no pueda tener en casa ciertos objetos, el que no pueda hacer ciertas cosas porque el pecado está en ella, porque ella provoca al hombre. Pero ¿no será el hombre quien asimila todo esto a cuestiones indecorosas? ¿No será él quien interprete el Corán de una forma demasiado radical? La autora también critica como vemos el islamismo desde fuera y nuestra posición contra él. Tendemos a rechazarlo por lo negativo cuando quizás tengamos ideas preconcebidas que tengamos que cambiar.

La novela tiene poca extensión y es muy directa. Narrada con fluidez en pocos capítulos la autora es capaz de desplegar varios temas y desarrollarlos de forma que el lector llegue a ese mensaje que la autora quiere manifestar. Y es que ser musulmana no implica cometer aberraciones, no implica que todos ellos piensen igual y que expresen su fe de la misma manera.

Me ha parecido todo un acierto ese cambio de voces y ese cruce de historias que van más allá de contar una historia. Es un libro para reflexionar con un final bastante duro que te deja turbada y emocionada.

Conclusión

Recomiendo la lectura de El viento en la cara. Una novela dura de la que se pueden extraer muchos pensamientos y reflexiones interesantes. La autora nos da la cara y la cruz del islamismo. No es una novela que gira entorno a esta religión sino a la relación que las personas tienen con él.