Título: Carolus
Autora:
Carlolina Molina
Publicación:
Páginas: 432
Carlos III llega a
Madrid a ocupar el trono de España con ideas ilustradas y modernizadoras. La
ciudad del «agua va», sin aceras y falta de luz, se transforma: las calles se
asfaltan y se crean normas de higiene y seguridad. El famoso arquitecto
Francesco Sabatini levanta edificios emblemáticos, como la Puerta de Alcalá, y
finaliza el Palacio Real. El Salón del Prado se llena de fuentes, entre ellas,
la de Cibeles.
A esta ciudad de
cambios asoman dos parejas, la de los granadinos Lorenzo de Elvira y Gil López
y la de las burgalesas Dorita y la marquesa de Valdivielso. El destino los
llevará a enredar sus vidas, complicadas por el amor, mientras son testigos de
los cambios que experimenta la España ilustrada aún heredera de la picaresca y
del engaño. En este Madrid nada será lo que parece. Marquesas que se enamoran
de criados, hijos con dos padres, amantes que huyen por las ventanas… todo es
posible en esta novela, incluso presenciar el Motín de Esquilache.
Con Carolus recorreremos el amplio reinado de Carlos
III. El que sigue siendo «el mejor alcalde de Madrid» tuvo un carácter cercano
y dócil pero firme en sus propósitos de ilustrar a sus súbditos. Carolina
Molina nos narra con pericia los cambios sociales, las modas en el vestir y las
costumbres que asoman al siglo XVIII, con situaciones divertidas e inesperadas.
Una novela que
conmueve y obliga a la sonrisa, tan necesaria en estos tiempos de crisis.
Mis impresiones
A pesar de que no
soy muy asidua al género histórico de vez en cuando me gusta cambiar de aires y
acercame a esas obras que normalmente no lo hago. Y en Carolus vi algo que me llamó la atención poderosamente. Siempre
asocio el género con una lectura quizás más pausada y seria y está novela ha
sido completamente diferente a lo que me esperaba. Más adelante os cuento
porqué.
“Desde agosto de 1759, siendo oficial la
muerte del rey español Fernando VI, todo se preparó a la carrera para que su
sucesor, su hermanastro por parte de padre, Carlos, que era entonces rey de las
Dos Sicilias, ocupara el trono de España.”
Carolus
comienza cuando Carlos III llega a España para ocupar el trono tras la muerte
de Fernando VI, su hermanastro y anterior regente. Instalado en el Palacio del
Buen Retiro, un lugar no muy cómodo ni acogedor, la impresión que se lleva de
la ciudad de Madrid no puede ser más nefasta. Es un lugar pestilente y sucio,
que ni siquiera tiene sus calles pavimentadas y resulta muy diferente al
Nápoles de donde procede. El nuevo rey hará todo lo posible por mejorar la vida
de los madrileños aunque estos se muestren reticentes a los cambios.
Prácticamente al mismo tiempo llegan otros dos personajes
a la ciudad. Por un lado conoceremos a la marquesa de Valdivieso, una viuda alegre
de Burgos en busca de diversión, acompañada
de su amiga, confidente y asistente Dorita. Y por otro lado conoceremos a
Lorenzo de Elvira, un joven cantero que abandona Granada con la esperanza de
adquirir prestigio en su trabajo.
Carolus me ha
parecido una novela diferente a las que se suelen encontrar dentro de su mismo
género. Y la principal razón es el sentido del humor y del desenfado con el que
se nos narra su historia que a mí me ha supuesto un aire fresco. La novela
tiene una parte histórica muy definida que nos va a narrar el reinado de Carlos
III en España y una parte ficticia que se ocupa de las aventuras y desventuras
de un grupo de personajes que se verán relacionados unos con otros y serán protagonistas
de amoríos, de malentendidos y otros enredos.
Aunque ya conocía la figura de Carlos III me ha gustado
profundizar en su figura y en cómo fue su reinado. Un monarca que hizo muchas
cosas por la ciudad de Madrid que en aquellos momentos en los días de lluvia se
convertía en un auténtico lodazal en el que los efluvios de sus habitantes
(arrojados a la calle con el grito de “Agua va”) causaban un olor insoportable.
Carlos III mandó instalar una red de recogida de residuos, un sistema de alumbrado
y el empedrado de las calles intentando siempre modernizar el aspecto (se construyeron
monumentos tan emblemáticos como la Puerta de Alcalá, la Cibeles o el museo del
Prado ) a la vez que mejorar la salubridad y la seguridad de los madrileños. Estos no siempre tomaron bien las decisiones
del monarca ya que pensaban que los malos olores les protegían de enfermedades
siendo peor aun cuando les afectaba al bolsillo.
Carolus es una
novela coral donde se mezclan por completo los personajes de ficción y los
históricos. Así la figura de Carlos III resulta muy cercana e incluso amable
para el lector revelándose como un hombre moderado, culto y muy equilibrado. Veremos
su preocupación por los españoles, su gusto por el arte, su afecto por su
querida esposa Amalia (a quien le costó mucho adaptarse al cambio) o la
relación con su madre, la intransigente Isabel de Farnesio. También habrá otras
muchas figuras reconocibles como Francesco Sabatini, José de Hermosilla, Pedro
Rodríguez de Campomanes o el marqués de Esquilache con el que la autora
representa diversos ámbitos de la vida en España en el siglo XVIII.
Los personajes ficticios también están muy bien
conseguidos. Tenemos a Marina, una marquesa que ha enviudado muy joven y sin
apenas dinero tendrá que buscarse la vida. Es una joven muy alegre, caprichosa
y juguetona que se pasa las noches de cama en cama por lo cual se mete en más
de un lío del que siempre sale gracias a la ayuda de Dorita, cuyo carácter es
opuesto siendo una muchacha tranquila y casta. El plano masculino principal lo
conforman Lorenzo de Elvira, cantero y pintor, un joven muy formal y estudioso,
y su ayudante Gil López, a quien le encantan los líos amorosos y se sabe todas
las triquiñuelas para conseguir sus objetivos.
Como ya os he comentado antes me ha gustado mucho ese
tono desenfadado y tan cercano con el que Carolina Molina aborda su historia
siendo fiel a la realidad pero contándotelo de una manera atractiva y muy
amena. Carolus está narrada en
tercera persona omnisciente acoplándose está a la forma de hablar de esa época
y aun así no se pierde ni agilidad ni frescura. Tampoco le impide hacer gala de
un sentido del humor un poco socarrón que para mí es otro atractivo de la
novela. Su historia no tiene un gran ritmo pero todo lo que va contando la
autora resulta tan interesante que prácticamente la lees sin darte cuenta.
Conclusión
Por todo lo que he comentado anteriormente creo que Carolus es una novela muy recomendable y
entretenida. Con un punto de humor y desenfado nos lleva por la historia de
Madrid y uno de los monarcas que más cambios hizo en la ciudad.
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