domingo, 13 de marzo de 2016

El cuerpo deshabitado - María Menéndez-Ponte



Título: El cuerpo deshabitado
Autora: María Menéndez-Ponte
Publicación: Algar, 2015
Páginas: 256

Aldara está convencida de que, el día que nació, los hados se debieron de pillar una buena borrachera. ¿Por qué a ella le tocó la cara de pan, un pelo amorfo y carne al peso y no los ojos verdes, el tipazo de modelo y el hoyito en la barbilla de su hermana? Después de años de comparaciones más o menos sutiles entre ambas, Aldara se ha convertido en una adolescente inteligente y con un sueño, ser actriz. Pero en un mundo donde todos parecen perfectos, a menudo se siente como un mastodonte con acné. Y lo peor es que los kilos de más pesan tanto sobre su autoestima que la joven empieza a perder el control peligrosamente… 

Mis impresiones

Hoy os traigo al blog un género en el solo hago incursiones en casos muy puntuales. Se trata de una novela juvenil que la editorial Algar me envío por sorpresa. Comencé a leerlo y prácticamente de una sentada alcancé casi la mitad de la novela.

“El día en que yo nací los hados se debieron de pillar una borrachera. O bien fueron mis padres cuando me engendraron. El caso es que no dieron una, u los cromosomas, que debían de ir algo contentillos, se juntaron al tuntún y me llevé todos los genes de deshecho. ¡Se lucieron las leyes de Mendel conmigo! ¡Menudo reparto hicieron!”

Así se presenta Aldara, la protagonista de esta historia. Es una chica inteligente pero con un físico no muy agraciado y algunos kilos de más. Al contrario que le ocurre a su hermana que es una muchacha con un exterior muy llamativo y armonioso. Aldara está acomplejada, se siente la oveja negra de la familia y ve como una afrenta cada intento de su madre, que tiene un centro de estética, de mejorar lo que la naturaleza le ha negado.

A pesar de la apatía que le rodea y que reniega de sí misma tiene un sueño. Y es que Aldara quiere convertirse en actriz. Sueña con ser Julieta en la representación de la obra que se hará en el cole. Pero ¿encajará ella en ese mundo donde el físico es tan importante? ¿Logrará aceptarse a sí misma? ¿Habitará algún día su cuerpo?

El cuerpo deshabitado toca un tema que siempre está de actualidad y aunque afecta también a adultos quizás la etapa en la que su efecto es más acusado es en la adolescencia. Vivimos en una sociedad en la que se da demasiada importancia al aspecto físico y hay personas más sensibles y vulnerables a este tema que viven acomplejadas hasta el punto de condicionar su existencia. La anorexia y la bulimia (un tema que en la novela se toca aunque sin profundizar demasiado en él) son muy frecuentes en las jóvenes. Por eso me parece importante que se hable de ello, que se ofrezca información y apoyo y novelas como esta lo reflejan muy bien y comunican un mensaje importante. La novela nos transmite la idea de que hay que aceptarse a uno mismo y que aunque el aspecto físico es importante, no es lo esencial en una persona.

MI punto de vista, por edad, está muy alejado al de los personajes de la historia porque lo aunque he entendido los problemas de Aldara, al fin y al cabo también he pasado por esa complicada etapa, no me he podido ver reflejada en ella ni en ninguno de los demás. A los diecisiete años los intereses, las preocupaciones y los problemas son diferentes a los que ocurren en la etapa adulta cuando tienes una familia, una casa y una economía que cuidar. A esa edad uno se preocupa por el trabajo en el instituto, las amistades y las relaciones con los chicos sobre todo. Pero también con los peligros que conlleva como la inseguridad, el acoso, las drogas o incluso la intolerancia o la homofobia que son los temas que nos vamos a encontrar.

Sin embargo creo que la autora hay hecho un buen trabajo con Aldara, una joven que desprecia su cuerpo. Es una chica inteligente pero ve como su hermana y su madre si cumplen los cánones de belleza y ella se siente inferior. Para colmo, Carla, una compañera en el instituto es muy popular y para ser su amiga tiene que pagar una especie de peaje. Es decir, Carla es una amiga por interés. Junto a otros personajes también está Pablo el chico que le gusta a Aldara con quien Carla tontea y que es muy superficial. También está Hugo, el mejor amigo de Aldara, que la valora por quien es ella y no por lo que representa.

La novela está narrada en primera persona por la protagonista de la historia lo que nos introduce en su interior para conocer sus sentimientos y emociones. Porque Aldara sufrirá desengaños, se sumirá en una situación desesperada y tendrá que salir de ella. Con una prosa fluida, directa, fácil de seguir y cierto sarcasmo e ironía que aligeran en ciertas ocasiones las situaciones a que se enfrenta Aldara. Además la novela tiene buen ritmo y mucho dinamismo que aparte de la gran presencia de diálogos hacen que su lectura se cuestión de un par de sentadas. En El cuerpo deshabitado hay muchas referencias a la literatura destacando y sirviendo como referencia Romeo y Julieta, la obra que se va representan en el colegio y en la que Aldara quiere representar a Julieta, cuyos versos introducen cada capítulo.

Conclusión

Recomiendo El cuerpo deshabitado a aquellos lectores habituales del género juvenil. Es una historia fresca, que se lee con gran facilidad y que a mí me ha dejado una buena sensación a pesar de que no ser un género que con el que conecte del todo.