miércoles, 20 de enero de 2016

Corazón de acantilado - Cristina Selva



Título: Corazón de acantilado
Autora: Cristina Selva
Publicación: Autopublicado, 2015
Páginas: 206

Manuela, una mujer que nunca ha salido de su pueblo natal en Almería, y su hija Carmen escapan de una situación peligrosa y se refugian en el lugar más lejano que se les ocurre, justo al otro extremo del país: la Costa da Morte. Allí el comienzo se les hace duro, el carácter de los lugareños es diferente; la climatología, adversa; y el miedo todavía les bulle por dentro.

Pero poco a poco irán descubriendo la bondad de las personas con las que conviven, como Elvira, la panadera, una mujer hosca que les ayudará mucho; o Eduardo, el maestro, quien también ha sufrido un gran desengaño. A su vez, la llegada de las andaluzas será como un soplo de aire fresco en la pequeña aldea.

Corazón de acantilado es una novela de superación personal y de esperanza. Su autora, Cristina Selva, ha pretendido transmitir en esta historia el derecho a comenzar de nuevo, a rehacer la vida por muy duro que haya sido el pasado, a volverse a enamorar…

Mis impresiones

Los pequeños detalles dicen mucho de las personas. Y así con un envío en una presentación muy cuidada, un marcapáginas y una dedicatoria me llegó Corazón de acantilado de Cristina Selva. Empiezo por aquí porque estos detalles que me agradaron de entrada siguen presentes en la novela autopublicada de esta autora.

La historia comienza cuando Manuela elige un nuevo lugar para rehacer su vida. Ha sido una mujer maltratada por su marido que ha estado a punto de perder la vida y buscando una nueva oportunidad para ella y para Carmen, su hija de cinco años, abandona su pueblo natal en Almería y se refugia en un pequeño pueblo de la Costa da Morte.

Allí, en el norte, la vida se desarrolla de forma distinta a como lo hace en el sur. Pero no solo son las costumbres o el clima porque las personas son también diferentes. Son más serias y parcas en palabras como si costara más entrar en sus vidas. Mientras ella sigue con el miedo en el cuerpo se tendrá que adaptar a las nuevas circunstancias. Pero descubrirá que hay puertas que se abren poco a poco…

Corazón de acantilado es una novela que nos habla de segundas oportunidades y de que nunca hay que perder la esperanza. Nos habla del comienzo de una nueva vida, con las dificultades que supone abandonar todo lo que uno ha conocido hasta el momento y adaptarse a otra realidad. Se trata de una novela de corte sencillo, con una historia también sencilla pero que tiene mucha emotividad y carga sentimental entre sus páginas.

A la vez nos habla de un tema durísima que desgraciadamente sigue de actualidad. El maltrato a la mujer, una lacra que la sociedad actual no es capaz de extinguir por mucho que se intente concienciar al ciudadano. A diario conocemos noticias de mujeres que han perdido la vida a manos de sus parejas. Y en esta novela vamos a encontrarnos con escenas muy duras que nos podrán los pelos de punta. En este caso son ficticias pero tienen una enorme dosis de realidad. A pesar de ello la autora no se regodea en ellas pero si las utiliza para que comprendamos el dolor de los perosnajes.

Con respecto a estos, Manuela se encuentra en el centro de la historia. Un mujer que ha sufrido muchísimo porque se ha encontrado muchos obstáculos y pruebas difíciles de superar en el camino. Y ya no solo por el marido violento y salvaje con el que ha compartido una parte de su vida sino también porque se ha visto obligada a superar otras muchas situaciones complejas. Ahora, dentro del programa de protección a la mujer maltratada, sigue sin sentirse segura pero tiene que tirar hacia adelante con su hija Carmen. Todo lo hace por ella. Como personaje me ha resultado curioso. Aunque quizás no he logrado hacerme con ella del todo porque me ha resultado una mujer con unos valores demasiado antiguos y algo cerrada de mente que no ha visto más mundo que el que siempre ha tenido a su alrededor. Quizás de ahí vengas ese carácter aunque si es admirable su fuerza y entereza. En el transcurso de la novela se ve una evolución en ella. También huye del tópico de la mujer que ha sufrido por amor y se niega a volver a enamorarse.

En la novela Cristina Selva remarca mucho la diferencia entre el carácter con el que se vive en el norte y el sur de nuestro país. Quizás alguien pueda pensar en que esto es algo tópico pero lo cierto es que se fundamenta en la realidad.  El carácter abierto, el hablar por los codos, quizás incluso la forma de concebir el trabajo (mucho más relajada) es muy distinta en la parte sur que en el norte donde los caracteres son más austeros, donde les cuesta más transmitir sus emociones y sentimientos y a veces las palabras sobran. Esto no quiere decir que no existan grandes interiores en estas personas como sucede en la novela. Y nos daremos cuenta cuando vayamos conociendo con más profundidad a Elvira, que es la dueña de una panadería y dará trabajo a Manuela, o Eduardo, el maestro de escuela que también tiene una historia personal que contar.

Pero aparte de todo esto en la novela hay más. Mientras vemos como Manuela y Carmen intentan salir hacia adelante iremos conociendo una bonita historia de amor que sucede cincuenta años atrás en el tiempo y que se va alternando en capítulos con la anterior. De esta prefiero no contar nada más, salvo que tiene un sentido en la novela, pero solo deciros que me ha encantado, casi más que la principal, porque desprende magia y ternura al igual que los personajes que la protagonizan. Incluso al final me he quedado con ganas de más.

El detallismo que antes os comentaba también se nota en el estilo narrativo de Cristina Selva que pone cuidado al construir cada frase. Es una novela que no tiene demasiada acción ya que en su lugar priman las emociones y sentimientos pero aun así su lectura es muy fluida y amena. Tanto que la novela se lee sin darte cuenta. El último tramo de la novela nos espera un acontecimiento que yo de alguna forma había previsto aunque entiendo que es para dar emoción a la trama y llegar hasta un final amable para la protagonista o por lo menos para darle un punto y final.

Conclusión

Corazón de acantilado es una obra de carácter sencillo y lectura agradable que avanza con una trama tranquila en la que priman las emociones de sus personajes y que pretende transmitirnos un mensaje esperanzador. Cristina Selva reivindica con ella el afán de lucha y superación y sobre todo el hecho de que todos merecemos una segunda oportunidad y encontrar nuestra propia forma de ser felices.

Su precio en formato digital (también está disponible en papel) no llega al euro y el 2% es donado a asociaciones sin animo de lucro que luchan contra la pobreza infantil. Encontraréis más información en: http://cristinaselva.com/


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