Título: La historia del doctor Gully
Autora: Elizabeth Jenkins
Publicación: Alba, mayo de 2015
Páginas: 456
En mayo de 1870,
Florence Ricardo, esposa de un capitán bebedor y violento, acudía a la consulta
del doctor Gully en Malvern (Worcestershire), en busca de una cura para su
estado de nervios: estaba agotada, deprimida, ansiosa, bebía preocupantemente,
no paraba de llorar. El doctor Gully era famoso por sus tratamientos que hoy
denominaríamos «alternativos», en especial la hidroterapia. Entre sus pacientes
agradecidos se contaban Darwin, Tennyson y Carlyle. A pesar de los más de
treinta años de edad que los separaban, el médico y su paciente iniciaron una
relación que no tardaría en ir más allá de lo profesional y que, a lo largo del
tiempo, pasaría por las más diversas fases, siempre bajo la amenaza del
escándalo.
Como en Harriet, Elizabeth Jenkins reconstruye
en La historia del doctor Gully
(1972) un sonado caso criminal que dejó perpleja a la sociedad victoriana. Con
una técnica narrativa magníficamente astuta, al servicio de una compleja trama
con muchos e inesperados giros, la autora se las ingenia en todo momento para
desbaratar las expectativas del lector y llevarlo de uno a otro extremo de la
identificación con los personajes.
Psicológicamente
brillante, socialmente revulsiva, esta historia de amor, manipulaciones y
traición es una novela tan lúcida como intrigante.
Mis impresiones
La autora inglesa Elizabeth Jenkins es muy conocida por haber escrito biografías
de figuras tan notorias como Jane Austen, Henry Fielding o Isabel I de Inglaterra.
Aunque también escribió novelas de su cosecha propia con frecuencia inspiradas
en hechos reales de los que tenía conocimiento. A este último grupo pertenece La historia del Doctor Gully que nos
narra la vida de un médico adelantado a su tiempo que se vio involucrado en un
asesinato del que toda la prensa del momento se hizo eco. La editorial Alba,
dentro de su colección Rara Avis, nos trae una reedición de esta novela
traducida por Flora Casas.
La historia comienza en el año 1870 en Malvern House. Este lugar es un
balneario fundado por el famoso y respetado doctor James Manby Gully en las
colinas de Worcestershire (en Inglaterra) ya que este este es un firme creyente
de la hidroterapia como método curativo. Allí ha acudido en busca de una solución
a sus problemas de salud una joven llamada Florence Ricardo que es la esposa de
un hombre a quien su afición al alcohol le vuelve excesivamente violento.
Florence lleva una vida deprimente. A sus problemas para dormir se
suma un estado continuo de ansiedad y malestar que amenazan con afectar
gravemente a sus nervios. A la clínica llega para ponerse en total disposición
del doctor Gully. Sin embargo lo que comienza como una relación estrictamente
profesional pronto se convierte es una relación amorosa que amenaza con
envolver a sus protagonistas en un sonado escándalo hasta terminar en unos turbios
y misteriosos acontecimientos que dejaran perpleja a la sociedad del momento.
Es cierto que La historia del
doctor Gully, publicada originalmente en el año 1971, recoge un crimen que se
hizo muy famoso en la sociedad victoriana pero sin duda no es el aspecto que de
primeras el lector deba buscar. No nos encontramos ante una historia en la que
desde el principio nos vayamos a topar con el misterio. En cambio la novela
comienza cuando entre sus dos protagonistas se produce un primer encuentro para
narrar detalladamente como va evolucionando su relación desde esos primeros
momentos de interés profesional hasta la historia de amor que viven sus personajes
desarrollando después la decadencia de los mismos. Un romance que era
inadecuado en sí mismo–él era un hombre divorciado y ella una mujer casada que
se llevaban más de cuarenta años de edad- que nadie puede aprobar pero que sus
dos protagonistas no dudan en vivir.
Y esto nos lleva a una fantástica recreación de la época en que viven
sus personajes. La sociedad hipócrita, anticuada, de estricta moralidad y doble
rasero que no concede la oportunidad de que cada cual viva su vida, ni siquiera
puede comprender que surja el amor natural entre dos personas que según sus
propias normas no deban quererse. A parte de ver ese aspecto social en la
novela nos encontraremos con algunos detalles costumbristas que nos sitúan muy
bien en la época y que nos ayudan a hacernos un idea de ciertos aspectos de la
vida cotidiana.
Prácticamente son dos los personajes alrededor de los cuales gira toda
la historia con algunos secundarios que quedan muy de fondo. Son dos personajes
reales imbuidos en unas circunstancias reales los que Jenkins ha utilizado para
construir su historia. Claro que la autora no los conocía personalmente y
supongo a la hora de conformar sus personalidades se habrá tomado sus propias
licencias. Uno es James Gully, un médico de ideas progresistas con respecto a
la época en que vivía. Sus estudios le habían convertido en un firme defensor
de la hidroterapia que le había llevado incluso a abandonar su consulta en
Londres y prescindir del uso de medicamentes. Sus resultados le había
convertido en un médico célebre que contaba con la aprobación y el respeto de
todo el mundo. Desde que se había divorciado vivía con sus dos hermanas en
Malvern donde había prosperado. Si el doctor Gully había pasado los sesenta
años Florence Ricardo apenas tiene una veintena. Una joven casada con un
capitán alcohólico al que llega tanto a temer como odiar, lo cual le ha llevado
a un cuadro depresivo que incluso hace peligrar su vida.
Tanto sus personajes como las relaciones que se establecen entre ellos
están narradas con mucha profundidad en la novela con personalidades muy
definidas, detalladas y matizadas que al lector no le cuesta comprender. Vemos
y comprendemos a la perfección como paso a paso los dos personajes van creando
una relación de dependencia emocional, conocemos sus pensamientos y él porque actúan
de una forma u otra. Ella le admira profundamente como hombre y como médico por
sus modales y su Inteligencia y él necesita protegerla y apartarla del mundo en
que vive. También vemos como la joven Florence libre de sus presiones florece y
con ello cambia su percepción de todo lo que le rodea.
La historia del
doctor Gully transcurre de forma apacible con un ritmo más bien lento pero con una
narración maravillosa, elegante y envolvente que te seduce página a página. Es
cierto que en algún momento la historia parece detenerse y no avanzar pero son
momentos puntuales en los que la autora recupera después del ritmo. El último
tercio de la novela es el que más misterio contiene y el que nos dejará pegados
a sus páginas para dejar al lector con un buenísimo sabor de boca a pesar de
que la autora no se prodiga en explicaciones.
Conclusión
La historia del
doctor Gully es una novela primorosamente narrada que nos cuenta una historia de
amor vivida por dos personajes con circunstancias muy diferentes y que termina relatándonos
un misterioso crimen que conmocionó a la sociedad inglesa del siglo XIX.