Título: La otra vida de Rachel
Autora: Dani Atkins
Publicación: Plaza y Janés, mayo de 2015
Páginas: 304
Ficha oficial en Me gusta leer
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Un solo instante. Dos destinos posibles. Adictiva,
romántica y desgarradora, La otra vida
de Rachel es una extraordinaria historia de amor
Rachel tiene veinte años, un novio atractivo y
cariñoso, un grupo de amigos maravillosos y todo el futuro por delante. Pero
unos días antes de que se marche a la universidad, durante la cena de
despedida, ocurre una terrible desgracia.
Cinco años después vive sola en un piso
minúsculo de Londres, con un trabajo sin futuro, aislada de todos y con un
eterno sentimiento de culpa por aquel trágico suceso que lo alteró todo. Haría
lo que fuera por dar marcha atrás al reloj, pero la vida no funciona de esa
manera... ¿O tal vez sí?
Cuando regresa a su pueblo por primera vez
desde aquella noche, sufre una caída y se golpea la cabeza. Al despertarse en
el hospital, todo ha cambiado. Es como si su vida hubiera tomado un rumbo
distinto desde el día de la despedida. Está comprometida con un chico
fantástico, vive rodeada por su familia y sus amigos, tiene la carrera
profesional con la que siempre había soñado, y su mejor amigo sigue a su lado. Pero
¿por qué no consigue deshacerse de esos extraños recuerdos de una existencia
muy distinta? Y ¿ya tiene claro quién es el amor de su vida?
Mis impresiones
A pesar de que la
sinopsis de La otra vida de Rachel me
había llamado mucho la atención no sabía muy bien ni la historia ni el tono
narrativo que iba a encontrar en ella. Comencé su lectura un poco a ciegas y la
verdad es que me ha sorprendido mucho y para bien. No solo me atrapó al
instante sino que de haber tenido el tiempo suficiente por delante la hubiese
leído del tirón. La novela fue autopublicada en digital en 2012 y resultó todo
un éxito de ventas en Amazon.
“Mi primera vida terminó a las 22.37 de
una lluviosa noche de diciembre, en una calle desierta al lado de la
antigua iglesia.
Mi segunda vida empezó unas treinta y seis
horas después, cuando me desperté debido al olor acre de una habitación de
hospital, con una herida considerable en la cabeza y sin recordar absolutamente
nada de mi vida. Estaba rodeada de amigos y familiares, lo que debería haberme
reconfortado; pero no fue así, ya que
hacía bastante tiempo que uno de ellos había muerto.“
La novela comienza
narrándonos un episodio ocurrido en 2008 cuando un grupo de amigos se encuentra
cenando en un restaurante. En ese momento Rachel tiene veinte años, un novio
atractivo, rico y cariñoso y un grupo de amigos de los que despedirse esa misma
noche ya que en pocos días se marchará a la universidad para estudiar
periodismo. Pero todos sus planes se truncan cuando un coche que circula a gran
velocidad pierde el control y colisiona con el restaurante empotrándose justo
en la mesa donde los amigos se encuentran. Es el momento en que todos los
sueños de Rachel se desvanecen.
Cinco años después
la vida de Rachel no es la que ella había proyectado ni imaginado. No llegó a
estudiar periodismo, vive sola en un pequeño apartamento de Londres, ha perdido
el contacto con todos sus amigos y está enganchada a los analgésicos. Obligada
por las circunstancias tiene que regresar por primera vez a su pueblo desde que
ocurrió el fatídico accidente. Durante su estancia allí una caída y un golpe en
la cabeza la dejan inconsciente. Y cuando se despierta se encuentra en el hospital
y su vida ha cambiado…
No os voy a contar
más de la novela a pesar de que en la sinopsis oficial hay algo más de
información. Creo que es una de esas historias que se disfrutan descubriéndola
poco a poco. Sin ser una trama de esas que te dejan con la boca abierta por sus
giros argumentales tampoco tiene un desarrollo fácilmente predecible en ciertos
momentos o al menos a mi así me ha resultado. La otra
vida de Rachel es una novela narrada con ligereza, que se lee de forma
agradable y va resultando muy entretenida a medida que pasas las páginas.
Quizás el argumento pueda parecer un poco enrevesado y nos sugiera que hay
ciencia ficción en ella y nada más lejos de la realidad porque al final queda
todo debidamente explicado siendo una resolución sencilla, quizás con algo de imaginación
pero que emociona al lector.
La otra vida de Rachel se basa en el desarrollo de un trama romántica
que se desarrolla con sentido común y lógica a la que se suman otros
alicientes. Para ello nos plantea el tema de los giros del destino y las
segundas oportunidades. A mi esta idea siempre me resulta interesante. Pensar
en que nuestra vida podría ser totalmente diferente con solo variar una
minúscula decisión. Vamos construyendo nuestra vida y el futuro en base a
nuestras decisiones pero también hay sucesos que nosotros no podemos controlar
y que cambian nuestro rumbo. En tan solo un instante todo lo que tenemos puede
desaparecer. Quizás por estar en el momento y lugar señalado. Quizás sea solo
una casualidad o será que verdaderamente existe el destino y ya está escrito.
Además la historia
tiene cierta intriga. Cuando Rachel se despierta en la cama del hospital y se
va dando cuenta de que su vida no es como la recuerda siente inquietud y aunque
todo el mundo insiste en la causa es que sufre amnesia ella sentirá la
necesidad de investigar qué es lo que ha pasado. Por un lado quería llegar al
final para comprobar cómo resolvería la autora el tema de las dos vidas de
Rachel y a la vez me daba miedo porque podría salir por cualquier lado y
estropearme la historia. ¿Viajes en el tiempo? ¿Dobles dimensiones? No quiero
desvelar el final aunque si tengo que comentar que me parece muy acertado el
desenlace por el que ha optado la autora dejándome satisfecha y con las
emociones a flor de piel.
La protagonista de
la novela es Rachel una joven cargada de sueños que al comienzo de la novela se
ha proyectado su futuro pero a quien un accidente le cambia la vida. Pero
tendrá la posibilidad de experimentar dos versiones diferentes. Quizás en este
sentido la novela se mueve en extremos muy opuestos porque una de las vidas es
muy buena y la otra es muy mala al potenciar la autora potencia mucho la
relación causa-efecto. Pero tampoco es
un hándicap que lastre la historia dentro del contexto.
En cuanto a su
estilo, la narración es directa, ágil y fluida y con un toque de emotividad que
aporta la protagonista al narrar en primera persona y hacernos partícipes de
sus sentimientos.
Conclusión
La otra vida de Rachel es una lectura ligera, amena y muy entretenida
que te atrapa entre sus páginas y que en mi caso particular me ha sorprendido
para bien.
