Título: A la sombra del árbol Kauri (Trilogía del Kauri II)
Autora: Sarah Lark
Publicación: Ediciones B, 2014
Páginas: 808
Nueva Zelanda, 1875. Lizzie y Michael Drury han cumplido el sueño de tener una granja de ovejas, y ante ellos parece abrirse un futuro prometedor. Pero su vida se descontrola de repente cuando su hija mayor, Matariki, es secuestrada por un líder maorí. Mientras Michael hace todo lo posible por recuperar a su hija, en la familia Burton un acontecimiento sorprendente llena de alegría a Kathleen: su hijo Colin vuelve a Nueva Zelanda. Sin embargo, nadie sospecha las consecuencias de este regreso...
Por primera vez en todo el mundo un país permitió votar a las mujeres. Hoy Sarah Lark homenajea a todas esas pioneras que lucharon por su liberación. La trilogía que da voz a la mujer.
Mis impresiones
Parece que Sarah Lark se ha empeñado en escribir sus novelas prácticamente a la misma velocidad que yo voy leyendo y esto me viene muy bien porque no me veo obligada esperar durante muchos meses la continuación de la trilogía y así queda superado uno de los principales inconvenientes que existen con respecto a esta estructura.
A la sombra del árbol Kauri es la segunda parte que da continuación a Hacia los mares de la libertad con las que la autora regresa a tierras neozelandesas, un lugar que ya queda patente que conoce muy bien. La historia comienza tras haber transcurrido aproximadamente diez años después de que se cerrara la novela anterior.
Nos encontrarnos en Nueva Zelanda en el año 1875 el lugar donde los irlandeses Lizzie y Michael Drury se han establecido definitivamente después de enfrentarse a numerosos problemas. Por fin han conseguido constituir la granja con la que ambos soñaban y su hija Matariki es una jovencita independiente y resolutiva que comenzará a estudiar en un colegio en Dunedin para completar su formación. Pero el futuro de ellos cambia drásticamente cuando la joven es secuestrada y obligada a permanecer junto a una tribu maorí…
Por otro lado seguiremos a Peter y Kathleen Burton en su viaje hacia Gales en donde esperan recibir la herencia de un familiar. Mientras arreglan los asuntos pendientes del difunto, Kathleen espera reencontrarse con Colin, el hijo nacido de su primer matrimonio con quien no tiene muy buena relación por su mal comportamiento, que después de servir durante algún tiempo en el ejercito inglés se siente atraído por la idea de volver a Nueva Zelanda. A pesar de que el joven ha cambiado mucho su regreso a la colonia deparará muchas sorpresas…
También conoceremos a los Paisley, una humilde familia minera que ha caído en desgracia. El padre es un alcohólico que nunca ha dado una buena vida a su familia y tras la muerte de la madre, la pequeña Violet a sus trece años tendrá que proteger a Rosie, su hermana menor. Buscando nuevas oportunidades los Paisley viajarán también a Nueva Zelanda en donde Violet abandonará definitivamente su infancia para enfrentarse a su desgraciado destino.
Aunque pueda parecer que Sarah Lark vuelve con más de lo mismo a mí A la sombra del árbol Kauri me ha gustado incluso más que su predecesora. Todas sus novelas me parecen muy entretenidas por la mezcla de amor, aventuras, paisajes y las pinceladas de historia que incluye en sus tramas. En esta ocasión además se hace eco de la lucha de la mujer por conseguir evolucionar y emanciparse del varón. Nueva Zelanda fue pionero en el tema del voto femenino adelantándose en su legislación a los países Europeos. Como siempre Sarah Lark construye un universo muy entretenido donde la parte histórica se difumina con la de ficción.
Otro tema fundamental en la novela es la lucha entre los pakeha (el hombre blanco) y las tribus maoríes que se sienten indignadas ante el dominio y el trato del hombre blanco y desean conseguir su completa libertad. Principalmente con este objetivo construyeron un gran poblado llamado Parihaka en el que convivían diferentes tribus y luchaban de forma pacífica por sus derechos. Mientras se desarrolla esta subtrama Lark aprovecha para ofrecernos muchos datos sobre los maoríes y las diferencias en el estilo de vida (creencias, ritos, costumbres) de sus diferentes clanes. Destacar la de los hauhau una de las más extremas que llegó a practicar el canibalismo.
Al ser la continuación de Hacia los mares de la libertad descubriremos qué ha sido de los personajes que protagonizaron esta novela pero realmente el peso de la trama lo soportan nuevos protagonistas que viven sus propias aventuras. Aunque sigue cobrando mayor importancia el plano femenino los hombres cuentan con mayor definición y aparición en la misma que en las anteriores trilogías. Lo que sigue intacto es la humanidad con la que están construidos, presentando sus dudas e indecisión, a veces cierta ambigüedad, cometen errores y se mueven por distintos intereses. De entre todos, que son un número considerable, destacan dos personajes femeninos en los que la historia se centra en gran medida. Una de ellas es Matariki, un mujer que se ha criado muy cerca de la cultura maorí pero que no puede prescindir de las comodidades de la vida europea. La otra es la pequeña Violet que a sus trece años tendrá que aprender a sobrevivir en un mundo muy duro siempre protegiendo a su hermana pequeña con quien mantiene una relación entrañable.
Como es habitual el estilo narrativo de Sarah Lark es directo, sencillo, fluido y con un magnífico equilibrio entre la narración y los diálogos lo que hace siempre de sus novelas una lectura ágil y amena (a pesar de la extensión) perfecta para encontrar en ella entretenimiento y evasión gracias a la capacidad que la misma tiene de trasladarte a los escenarios donde se desarrolla. La acción transcurre en Nueva Zelanda e Inglaterra en el último cuarto del siglo XIX,
A la sombra del árbol Kauri avanza a un ritmo generoso y a ello contribuye el que la autora proponga muchas subtramas distintas que van surgiendo durante toda su extensión y se van resolviendo para dar lugar a otras. El narrador es una voz en tercera persona omnisciente que alterna dos hilos argumentales principales a través de los capítulos en que se estructura. Como curiosidad decir que Sarah Lark realiza varios guiños a la trilogía de la nube blanca introduciendo algunos personajes de la misma de forma directa con apariciones y relacionándose con los actuales o simplemente nombrándolos (como por ejemplo a Gwyneira Warden)
Conclusión
A la sombra del árbol Kauri es una novela tan entretenida como ágil en su lectura gracias a la mezcla de aventuras, historias de amor y superación, sus cautivadores paisajes y su aspecto histórico que se mezcla con la ficción.