Título: ¡Fergal echa
humo!
Autor: Robert
Starling
Publicación:
Picarona, marzo de 2018
Páginas: 32
Un dragón con temperamento explosivo no
es una buena combinación, como la familia y los amigos de Fergal descubrieron
muy pronto. Quema la cena (literalmente), reduce a cenizas la portería del
campo de fútbol y no puede disfrutar de un juego de mesa agradable y tranquilo.
Sólo cuando empieza a notar que otros animales tienen trucos inteligentes para calmarse, Fergal comienza a tomar el
control de su genio y a recuperar a sus amigos; especialmente cuando descubre
que los dragones pueden calmarse
de una manera muy fácil.
Mis impresiones
Hoy os presento un
libro que en casa ha gustado mucho. Tanto a la mayor como al pequeño. Se trata
de ¡Fergal echa humo!, que es una de las novedades de este marzo de Picarona.
La historia está
protagonizada por un pequeño dragón llamado Fergal. Es un buen chico, pequeño y
simpático. Pero también hay momentos en que se enfada y es cuando sale un gran carácter.
Por ejemplo, cuando está tan contento jugando y su padre le llama a comer
comienza a aparecer su mal humor. Y encima ese día había verduras que no le
gustaban nada. Y no le darían el postre hasta que terminara el plato. Fergal,
enfurecido, lanzó una llama que arrasó el plato.
Este comportamiento
se repetía en muchas ocasiones. Cuando no le gustaban los juegos con sus amigos
o cuando alguien no se comportaba como él quería. Finalmente las personas de su
entorno se cansaron de él y hartos de sus rabietas empezaron a dejarle solo. En
ese momento el pequeño dragón habló con su mamá y esta le dijo algo que le hizo
recapacitar.
Me parece muy
interesante el tema que nos plantea en este libro y que da lugar a que lo
hablemos con los niños y ellos puedan reflexionar sobre ello. Hay veces en que
no solo los niños, sino también los adultos no saben cómo gestionar ciertas
emociones. En este caso nos habla de la rabia que siente Fergal. Pero lo cierto
es que no podemos ir por ahí enfadándonos cuando algo no es como nosotros
queremos. Hay que encontrar una manera de calmarse y canalizar los sentimientos
negativos. Así al final el pequeño Fergal encontrará su propia manera de
hacerlo y empezará a disfrutar de relaciones con los demás más sanas y
saludables.
Pero aparte de este
tema tan importante es un libro que resulta realmente divertido. Sus escenas
protagonizadas por simpáticos personajes están cargadas de humor y son muy
expresivas. Las ilustraciones, que también son obra del autor del texto, son
muy alegres, coloridas y llamativas. Por ello estoy segura de que es un libro
que gustará a cualquier niño.
Además me encanta
el detalle de la portada en la que el propio Fergal ha quemado parte de ella y
ha hecho un agujero. Os dejo algunas imágenes para que podáis apreciar este
maravilloso y original trabajo.