Título: El
aire que respiras
Autor:
Care Santos
Publicación: Planeta,
2013
Páginas:
585
Virginia acaba de heredar el negocio familiar: la
librería Palinuro. Entre el montón de ejemplares, polvo y papeles que su padre
acumuló, pronto aparece la historia de Carlota Guillot y la búsqueda de un
libro, escurridizo y caprichoso, que formó parte de una de las bibliotecas
particulares más sibaritas de la Barcelona napoleónica. Una historia prolongada
a lo largo de las décadas más convulsas del siglo XIX en que la ciudad asistió,
incrédula, a su mayor transformación: el derribo de las murallas y la urbanización
de su paseo más emblemático, La Rambla.
El aire que respiras es un canto de amor a los libros,
pero también a la ciudad de Barcelona. Después de leer esta gran historia
coral, la ciudad no volverá a ser la misma.
Mi experiencia con
la novela
«Tiemblo a tu voz y tiemblo si me miras
y quisiera exhalar mi último aliento abrasada en el aire que respiras.»
Carolina
Coronado
Recientemente ha sido publicada la última novela de la
autora catalana Care Santos. Con una carrera como escritora prácticamente consolidada
a pesar de su juventud nos presenta El
aire que respiras, un libro que nos habla de libros, que nos transmite el
amor de los bibliófilos por los ejemplares antiguos, las triquiñuelas para
conseguir joyas altamente codiciadas, el mundo de los libreros y la existencia
de libros prohibidos y todo ello engranado de forma meticulosa y con lo que
supongo habrá sido un trabajo concienzudo por parte de la autora para crear una
historia no exenta de cierta complejidad.
“Una
vieja máxima de bibliófilos afirma: Quien ama los libros y tiene que vivir
lejos de ellos poco a poco va perdiendo su alma”(Página 479)
La novela se estructura en dos líneas argumentales
desarrolladas en dos tiempos temporales distintos pero con un emplazamiento común:
escenarios próximos a Barcelona y una temática similar: el amor a los libros.
En la actualidad, Virginia Rogés acaba de perder a su
padre y heredar el negocio familiar, la librería Palinuro. Su padre, Antoni,
fue el presidente del gremio de libreros anticuarios de Barcelona. Ella nunca
ha tenido mucho interés en el negocio pues durante toda su vida se ha dedicado
a ejercer la abogacía. Cuando se encuentra ante el legado de su progenitor le
encarga a una amiga que investigue sobre ciertos documentos encontrados entre
las pertenencias de su padre. Será esta escritora, alter ego de Care Santos, y
amante de los libros quién se encargue de intentar descubrir y recompor la historia
que cuentan.
La otra línea argumental nos sitúa en la misma ciudad a
principios del siglo XIX, donde una serie de personajes giran en torno a los
caprichos de un libro tan escurridizo como exquisito. Un libro prohibido que
hizo las delicias de quienes lo tuvieron en sus manos. Una historia que comienza
con la llegada de Víctor Philibert Guillot, portador de trece libros muy
especiales, a España y nos muestra Barcelona cuando las tropas de Napoleón
sitiaron la ciudad.
En realidad es esta última parte la que conforma el alma
del libro, ya que la primera simplemente actúa como un elemento que si nos
ofrece información adicional no resulta imprescindible en la novela.
Se trata de una historia coral donde existen muchísimos
personajes que toman vida en la historia y que de alguna manera u otra se
encuentran relacionados con los libros. Carlota Guillot, el astuto Víctor
Brancaleone, el desalmado Néstor Pérez de León, el capellán Serafín Girabancas,
la lavandera Rita Neu, Madame La Ruga, Guiseppe Lechi y eso por citaros algunos
porque en la novela aparecen muchísimos más. Además entre ellos podemos
encontrar tanto personajes ficticios como otros que fueron reales en el periodo en que se enmarca la historia. Como
norma general quedan correctamente dibujados de forma que incluso puede resultar
complicado discernir cuales provienen la mente de la autora y cuáles no. Juntos
conforman un elenco de lo más variado pero siempre con unas premisas muy claras
y una personalidad arrebatadora. La autora sabe dotarles de vida y asignarles
un papel muy determinado en la historia.
Quizás este elevado número de personajes sea esta la razón
por la que la novela no presenta un argumento muy definido y nos cueste
hacernos con ellos, la vida de estos personajes se entrecruza y aunque están
relacionados de muchas maneras en El aire
que respiras aparece una historia que contiene otras muchas en su interior.
He descubierto en Care Santos una autora con una forma
muy especial de contar historias. Un estilo muy personal que se torna muy
agradable al lector, con diversos guiños, cambios de registro y tono e incluso
con cierto sentido de humor que coloca e introduce de forma muy acertada. Una
forma de narrar dinámica en la que la autora emplea varios formatos para
ofrecernos todo tipo de detalles. Utiliza la primera así como la tercera
persona para narrar, se sirve de diarios, de pasquines, de misivas, biografías
e informes para conformar una historia no exenta de cierta complejidad ya que
no se trata de una obra lineal sino que se producen diversos saltos en el
tiempo . Quizás en algunas ocasiones el lector se pueda sentir abrumado con tal
grado de información, porque Care Santos no deja nada al azar, pero también
aporta cierto atractivo este cambio continuo de registro que además nos aporta
diferentes puntos de vista y sobre todo, una forma diferente de contar.
La obra se estructura en cuatro partes, divididas a su
vez en capítulos, más un prólogo inicial. Al final de la historia hay una breve
explicación de cada uno de los trece libros prohibidos que aparecen en su
recorrido.
La parte histórica de la novela está excelentemente
desarrollada. Se nota claramente la escrupulosa labor que Care Santos ha
realizado en este aspecto sin dejar al aire ningún fleco, sin que encontremos
ninguna incongruencia y de forma que nos hace llegar ese periodo con mucha
rigurosidad aunque enmarcando una historia ficticia.
Casi comienza la historia a la vez que se declara la
guerra de independencia española (1808) cuando Napoleón, en su afán por dominar
el territorio español, entró y conquistó Barcelona. Una época de incendios,
saqueos, asesinatos, violaciones y miedo generalizado. Pero la novela abarca
hasta mediados del siglo XIX, un periodo de tiempo en el cual se produjeron
cambios políticos y sociales bastante ostensibles. Entre esos años se produjo la expropiación de Mendizábal
que puso en el mercado muchos libros que permanecían ocultos en manos de
coleccionistas muy sibaritas que custodiaban con celo sus tesoros.
Como ciudad Barcelona esta perfectamente detallada. Sus
edificios, sus calles, la gente que transitaba por ellas, su forma de vida, sus
costumbres, las normas que regían la ciudad. Pero también vemos le evolución de
Las Ramblas, sus cambios y la caída de los muros que la encerraban por arriba y
a los lados. Una ciudad totalmente distinta a la que podemos conocer hoy en
día.
Casi al llegar a fin de la novela el ritmo de los sucesos
se acentúa y comienza a descubrir sus cartas y todo encaja como por arte de
magia. Pero creo que es un final, de esos bien pensados que dejan un buen sabor
de boca y que en ningún momento es susceptible de ser imaginado por el lector
aún resultado razonable.
Conclusión
El aire que respiras
es una novela elaborada, trabajada, narrada con una prosa muy rica en estilo y
un contexto interesante que satisfará a los lectores ávidos de conocimientos.
Quizás no sea una historia para todo el mundo pero que
gustará a los amantes de los libros y que supone toda una declaración de amor
hacia ellos. Una historia que contiene amor, intriga, política, sociedad,
venganza, traiciones, ambición, honor, amistad.