Título: El sol bajo la seda
Autor: Éric Marchal
Publicación: Grijalbo, febrero de 2014
Páginas: 736
A finales del siglo XVII, con Francia y Lorena en guerra, un cirujano ambulante se convierte en el protagonista de una historia trepidante de amores, guerras e intrigas cortesanas.
LA EPOPEYA DE UNA TIERRA, DE UNA ÉPOCA, DE UNA PROFESIÓN.
Un apasionante retrato histórico de la Europa de finales del siglo XVII en el que la sociedad se enfrenta a los avances y las controversias de la ciencia médica de la época. La epopeya de un carismático cirujano ambulante que, guiado por la ambición de revolucionar la medicina, se ve abocado a una trepidante aventura en la que no falta el amor, la pasión, la guerra y las intrigas cortesanas.
Un apasionante retrato histórico de la Europa de finales del siglo XVII en el que la sociedad se enfrenta a los avances y las controversias de la ciencia médica de la época. La epopeya de un carismático cirujano ambulante que, guiado por la ambición de revolucionar la medicina, se ve abocado a una trepidante aventura en la que no falta el amor, la pasión, la guerra y las intrigas cortesanas.
Mi experiencia con la novela
Puede que lo primero que nos llame la atención es la bonita y atractiva portada con la que la editorial Grijalbo ha editado El sol bajo la seda del francés Éric Marchal, una novela que está dando mucho que hablar y parece ser que ya cuenta con el favor de muchos lectores y críticos profesionales del sector. Ha sido incluso comparada con Ken Follet y ciertamente en mi opinión la novela tiene algunas similitudes.
El sol bajo la seda es una mezcla de interesantes ingredientes que consigue un llamativo resultado final. La novela es una gran epopeya que contiene aventuras, historia, amor y un aspecto que nos instruye sobre la medicina en el siglo XVII, puntos que hacen de ella una novela muy completa que interesara al lector por muchos motivos. Sumergirse entre sus páginas es una auténtica aventura y a pesar de su extensión la novela se evapora de las manos.
La historia comienza en el año 1694 en el ducado de Lorena donde su protagonista, Nicolas Déruet, trabaja como cirujano ambulante. Después de algunos años fuera de su ciudad natal decide volver a Nancy para instalarse junto a su antiguo maestro, François Delvaux, y ejercer su profesión en la misma. Uno de los principales motivos es cumplir su máximo deseo y estar cerca de Marianne Pajot, una comadrona que ha conocido en un parto donde desafortunadamente no pudieron salvar a la madre y de la que se ha quedado inmediatamente prendado.
Sin embargo, el destino va a truncar sus planes cuando Nicolás es el encargado de operar al gobernador francés de una dolencia muy simple. Todo sale bien en principio pero las complicaciones posteriores llevan al paciente a la muerte y el médico personal del gobernador acusa a Nicolás de ser el culpable debido a su mala praxis. En un primer momento es encarcelado pero poco después le proponen ser liberado si consiente en marcharse al frente a trabajar como cirujano.
Ante estas circunstancias Nicolás solo puede aceptar las condiciones y en el campo de batalla se verá obligado a atender numerosos heridos y enfrentarse a las duras condiciones en que se desarrolla la guerra. Pero a su regreso de nuevo a Nancy Marianne ha desaparecido….
Aunque parece que os he contado gran parte del argumento en realidad solo he contado la línea básica sobre la que se asienta la novela. Complementando a esta, El sol bajo la seda tiene multitud de tramas que se entrelazan entre sí formando un complejo entramado de historias y personajes que nos proponen acción, traiciones, venganzas, celos, conspiraciones, alianzas políticas, enfrentamientos entre reyes pero también amor, lealtad y amistad.
El protagonista indiscutible de la novela y alrededor del cual gira toda la historia es Nicolas Déruet, un personaje construido de forma muy sólida con el que el lector no tiene ningún problema en empatizar. Además de su carácter noble, afable, honesto y con mucho carisma se hacen evidentes todos sus esfuerzos por conocer la medicina, sanar e ir hacia adelante en su trabajo. Además llega un momento en el que se encuentra entre dos mujeres muy distintas que han sido capaces cada una de ellas de conquistar su corazón. Son Rosa y Marianne, las cuales le aportarán distintas cosas.
Si bien es Déruet el personaje que más nos llama la atención a su alrededor hay muchas figuras con distintas personalidades y circunstancias que completan la historia. No voy a nombrar a ninguna de ellas en concreto porque es una amplio abanico de personajes los que circulan por la novela donde se entremezclan los ficticios con los reales y todos ellos muy afinados y matizados.
Uno de los aspectos que sin duda destaca en la novela es su ambientación. Es evidente que Éric Marchal ha trabajado concienzudamente el contexto histórico para que el lector comprenda perfectamente la vida a finales siglo XVII y principios del siglo XVIII en diversos planos.
El sol bajo la seda es una la historia de una intriga ficticia situada en un contexto histórico real. La acción comienza en el año 1694 cuando Lorena era un estado independiente de Francia pero el rey Luis XIV estaba obsesionado con convertirlo en territorio francés. La población vivía bajo la presión de su ejército que se había hecho con el ducado a la fuerza y Leopoldo I, duque de Lorena, se encuentra exiliado y luchando contra el imperio otomano, una guerra que dura ya más de diez años. La novela finaliza en el año 1729 con un panorama social y político muy diferente al que presenta en sus comienzos.
Otro aspecto, sin duda muy interesante, es como Marchal nos narra los conocimientos que existían sobre la época en materia de medicina, como se practicaban y como estos evolucionaban. En un momento en que los médicos despreciaban a los cirujanos ambulantes (que habitualmente también trabajaban como barberos) y existía una clara rivalidad entre ambas disciplinas. Sus herramientas eran poco más que remedios elaborados a base de plantas, elixires, la realización de sangrías y con frecuencia se veían obligados a realizar amputaciones u otras operaciones sin contar con anestesia. El autor nos describe de forma detallada y minuciosa todas estas prácticas que hoy en día nos pueden parecer una barbaridad pero que en aquel momento eran la única solución posible para los pacientes. También nos hace participes de las ansias de su protagonista por encontrar remedios alternativos, estudiar e investigar enfrentándose a menudo con la institución eclesiástica de ideas cerradas e incapacidad para evolucionar.
El sol bajo la seda es una historia muy viva, narrada con sencillez pero con una prosa cuidada al máximo tanto en su forma como en su contenido. La novela se estructura en diecinueve extensos capítulos con divisiones interiores que nos proporcionan una lectura pausada donde los detalles y la descripción de ambientes cobran una especial relevancia. A pesar de ello prácticamente no dejan de suceder cosas de forma que es imposible que el lector se aburra al contar además con algún giro interesante y alguna sorpresa inesperada.
Conclusión
El sol de la seda es una novela que atrapa al lector entre sus páginas. Un relato muy vivaz, con elementos muy interesantes, unos personajes con los que compartir la historia y un pluma diestra para narrar.
