jueves, 19 de diciembre de 2013

Nina - Emilio Casado



Ficha técnica
Título: Nina
Autor: Emilio Casado
Publicación: Versión Kindle, noviembre de 2013
Páginas: 450 (longitud aproximada, según lector)

Cada día que amanece ha olvidado lo que sucedió ayer.
Cada noche una extraña criatura alada viene a visitarla y le cuenta historias macabras y desconcertantes. De este monstruo no puede olvidarse, sus encuentros con él son lo único que permanece en su memoria después de cada despertar.
Un sanatorio alejado del resto del mundo para que consiga recuperar su capacidad de generar recuerdos.
Un amigo que cada mañana sale a su encuentro para ayudarla en todo lo que necesite.
Un nuevo médico que llega, exclusivamente, para estudiar su caso.
Y su pasado, oculto tras la niebla, esperando para revelarse. Nina. Ella no puede recordarte. ¿Serás tú capaz de olvidarla?

Mi experiencia con la novela

Llevaba varios días encontrándome con la portada de este libro en diversas redes sociales y en el momento en que leí su sinopsis me llamó mucho la atención. Me descargué los primeros capítulos e inmediatamente me quedé enganchada a la historia. A su autor, que ha optado por el difícil camino de la auto publicación con lo que ello conlleva, apenas lo conocía y tenía una vaga referencia sobre su anterior libro Crónica insignificante, que tuvo una muy buena aceptación en la blogosfera.

Nina es una historia oscura, un inquietante thriller psicológico que atrapa desde sus primeras páginas y nos deja pegados a una historia cuya intriga se mantiene intacta hasta su punto final.

Nina es la protagonista de esta historia. Una mujer de cuarenta años que desde hace tres meses se encuentra encerrada en un sanatorio donde recibe tratamiento para combatir su incapacidad de generar recuerdos. Cada nuevo día que amanece Nina se levanta con la mente en blanco. No recuerda quien es, su nombre, si tiene familia o la razón por la que se encuentra encerrada. El único recuerdo capaz de guardar es un escalofriante visitante nocturno que recibe cada noche en su habitación. Una bestia alada que le cuenta macabras historias de muerte y desesperanza.

Parte de su tratamiento es no desvelarle nada sobre su pasado, ella misma debe ser quien genere y atraiga sus propios recuerdos. Pero un nuevo médico llega al centro para tratar su caso intentando marcar una evolución en su enfermedad.

¿Cuál es la verdadera identidad de Nina? ¿Qué sucedió para que su mente se negara a recordar?¿Cual es la verdadera intención del nuevo médico?

El planteamiento inicial de Nina me ha parece muy atractivo y su autor consigue un desarrollo muy interesante y bien planificado en el que va dosificando la información a la vez que siembra un mar de dudas en el lector. Es de esas novelas en las que hasta poco antes de alcanzar su final no podremos resolver las incógnitas y circunstancias que se nos presentan en la misma.

Una de las cosas que más me han gustado de esta novela es el tratamiento que Emilio Casado otorga a sus personajes. Juega constantemente con una duplicidad en sus identidades de forma que para el lector es complicado prever cual es su verdadero juego. Pero lo hace sin comprometerse, es decir, sin llegar a engañar al lector de una u otra manera. Con esto quiero decir que no predispone al lector a tomar una decisión respecto a los personajes por lo que son o la posición que ocupan sino que son ellos mismos los que van generándola a través de sus actos.

Nina es el personaje central de la novela y el que presenta esta ambigüedad que os comento de forma más evidente. Salvo los médicos, nadie conoce los motivos por los que se encuentra internada en el sanatorio ya que existe un secretismo extremo al respecto. Además tiene completamente prohibidas las visitas. Nina en ocasiones nos parece frágil, desorientada, vencida, sin saber quién es y adormecida por la fuerte medicación que le suministran. Una mujer atormentada por un monstruo que cada noche la visita y atemorizada. Pero también conocemos su otro lado, el de una mujer fuerte, lucida, capaz de razonar, de examinar su situación y sacar las garras cuando tiene que defenderse. Un personaje que desconcierta y es capaz de generar distintas sensaciones en el lector.

Otro personaje sin duda muy importante en la novela es Boris, que también se encuentra internado en el centro. Ha sido diagnosticado como maniaco depresivo después de dos intentos de suicidio. Es uno de los personajes que más parece preocuparse por Nina, siempre está atento a ella a pesar de que Nina cada día vuelve a conocerlo por primera vez cada mañana cuando se encuentran en las zonas comunes del centro. Y no siempre su encuentro resulta agradable.

Sin duda el personaje que hace que se precipiten los acontecimientos es el doctor Rodrigo Ortiz, que llegará al sanatorio para intentar ayudar a Nina. Su método de trabajo es muy diferente al que hasta ahora se ha empleado con la paciente y sus razones para hacerla recordar muy poderosas.

La novela está narrada en tercera persona por una voz omnisciente que va focalizando la acción en los distintos personajes para ofrecernos una amplia visión de la historia. Emilio Casado nos la narra de forma detallista y minuciosa, con precisas descripciones tanto de situaciones, personajes y escenarios. La novela, estructurada en setenta y tres capítulos no muy extensos y con una estructura lineal, aunque se encuentra narrada con tranquilidad se lee de forma ágil y amena gracias a la fluidez de la prosa, su vocabulario accesible al lector y una trama adictiva.

Nina es una inquietante y perturbadora novela que explora el lado más oscuro del ser humano, mostrándonos increíbles momentos de tensión que impactan de forma irremediable y angustian al lector. Muertes, comportamientos violentos, abuso de poder, venganzas, odios irreprimibles, ambición, sexo se mezclan en esta trama.

La mayor parte de la novela se desarrolla en el sanatorio La quinta de la montaña donde Nina permanece ingresada. El estilo detallista en las descripciones hacen que nos imaginemos perfectamente la vida allí. Los largos pasillos, el silencio, las paredes y el mobiliario blanco, aséptico y sin personalidad  y los internos ocupando los rincones bajo la mirada escrutadora de los enfermeros. Todo esto hace que sintamos la misma sensación de aislamiento que su protagonista en un lugar donde ella cree que no debería estar y donde cualquiera perdería el juicio.

Según vamos acercándonos al final, el lector comenzará a comprender y resolver todos los interrogantes planteados desde el principio. Tengo que reconocer que en algunas ocasiones no sabía hacia donde se dirigía exactamente el autor al introducir algunas historias que aparentemente no tienen nada que ver con la trama principal pero al final cobran un sentido sorprendente. Las última páginas resultan tremendamente adictivas y su desenlace original y bien planteado dejando pero dejando al lector cierta sensación de inquietud.

Conclusión

Nina me ha resultado un lectura absorbente, inquietante y perturbadora que nos habla de la maldad humana. Una lectura recomendable si disfrutáis con los thrillers psicológicos.

Por cierto está disponible tanto en papel como en versión digital (a menos de un euro)