viernes, 29 de diciembre de 2017

Lo mejor de 2017

Como cada final de año me gusta hacer balance y recordar aquellas lecturas que más huella han dejado en mí. Como siempre digo no tienen porque ser los libros con más calidad, mejor escritos o que cuenten mejores historias. Lo cierto es que entre los 115 leídos han sido los que a día de hoy, al volver la vista hacia atrás, me han venido a la cabeza de forma más lucida y con mejores recuerdos.

Una de las autoras que me gustaría destacar es Barbara Pym. No había leído nada de ella y encontrarme con  Mujeres excelentes y Amor no correspondido restultó una auténtica delicia. Esas mujeres son muy especiales y aunque solas siempre están ahí para quien necesite su ayuda.



Otra novela que me disfruté mucho y que relataba una historia de amor muy complicada fue Como fuego en el hielo de Luz Gabás. Me encantó su trama y su desarrollo. 


Nunca he sido muy afín a Javier Marías pero Berta Isla me pareció una novela redonda. Aparte de tocar el tema del matrimonio nos sumergia en muchas otras reflexiones como la lealtad, la soledad...

David Foenkinos es un autor que me ganó completamente con La delicadeza y todos sus libros me han encantado. Lo mismo que me ocurrió con La biblioteca de los libros rechazados. Creo que es un autor original y que cuenta sus historias de una forma especial.

Y este año me ha traído una nueva relectura de Cien años de soledad, esta vez con una edición maravillosa con ilustraciones y que no cambia la novela pero si que te hacer disfrutar de tocarlo y verlo mientras pasas páginas.

Con Por encima de la lluvia, Víctor del Árbol lo ha hecho de nuevo. Me conquistó con una novela que me tocó especulamente la fibra sensible. Dura pero necesaria.

A Elia Barceló la he conocido este mismo año con El color del silencio y El secreto del orfebre. Dos novelas que no voy a olvidar con facilidad 

No me puedo quedar atrar Todos los días son nuestros de Catalina Aguilar Mastretto, que me conquistó por completo con una historia que podiamos haber vivido cualquiera de nosotros pero narrada con tal frescura y desparpajo que la disfruté muchísimo. Como de amores, esta vez obsesivos, también nos hablaba Celso Castro en Sylvia.


De Care Santos procuro leer todo lo que se publica y este año nos ha traido una historia, Media Vida, que es un homenaje en toda regla a la mujer, pero a aquella que le tocó vivir en uno de los momentos más díficiles en la historia de nuestro país. Como también sigo fervorosamente a Isabel Allende, una autora que se reinventa en cada novela y que a mi me sigue gustando mucho. Me da igual que el realismo mágico ya no esté presente, como suced en  Más allá del invierno, algo que muchos echan de menos en ella.   


También fue una novela que disfruté mucho por su intensidad  La noche que no paró de llover de Laura Castañón, una novela compleja, cargada de matices y de fuertes emociones. Como también es una gran lectura Una suerte pequeña de Claudia Piñeiro, emotivo, sensible y muy especial.
  .Y vosotros ¿Coindicís en alguno de estos libros como vuestras mejores lecturas?