Título: La caricia
de la bestia
Autora: Cristina C. Pombo
Publicación: Espasa, octubre de 2017
Páginas: 436
En un bosque
solitario, dos adolescentes son brutalmente atacados por un ser de una fuerza
sobrenatural. En su declaración, ambos sostienen que el agresor es un zombi.
La inspectora Laura Tébar es encargada de la investigación. Se trata de una profesional de 55 años, brillante, solitaria y con un carácter temible forjado en un pasado lleno de errores imposibles de remediar. Se la respeta y se la teme a partes iguales. Con Tébar, y a su pesar, comienza a trabajar el subinspector Merino, un joven tan inexperto como intuitivo y motivado.
Los dos no pueden ser más opuestos y no tardan en chocar. A través de la novela, el lector asistirá a un auténtico tour de force entre ambos personajes, que pasarán lo suyo antes de permitirse el mínimo respeto mutuo que les permita colaborar y enfrentarse a unos seres tan misteriosos como violentos, que atacan desde lo más profundo del bosque, parecen invulnerables y desaparecen sin dejar rastro.
La inspectora Laura Tébar es encargada de la investigación. Se trata de una profesional de 55 años, brillante, solitaria y con un carácter temible forjado en un pasado lleno de errores imposibles de remediar. Se la respeta y se la teme a partes iguales. Con Tébar, y a su pesar, comienza a trabajar el subinspector Merino, un joven tan inexperto como intuitivo y motivado.
Los dos no pueden ser más opuestos y no tardan en chocar. A través de la novela, el lector asistirá a un auténtico tour de force entre ambos personajes, que pasarán lo suyo antes de permitirse el mínimo respeto mutuo que les permita colaborar y enfrentarse a unos seres tan misteriosos como violentos, que atacan desde lo más profundo del bosque, parecen invulnerables y desaparecen sin dejar rastro.
Cristina
C. Pombo trama una intriga
originalísima que supone una vuelta de tuerca en el thriller
contemporáneo, un género en que parecía que todo estaba inventado y al que, sin
embargo, le faltaba traspasar una última frontera que, literalmente, está en el más
allá.
Mis impresiones
La
caricia de la bestia es la primera novela publicada por Cristina C. Pombo que hasta ahora se
ha dedicado a diversos empeños en la televisión. No sé muy bien que es lo que
me llamó la atención de esta novela pero me apetecía leerla y descubrir qué historia
nos quería contar.
“- ¿Aquí? - dice él, riendo incrédulo y señalando el bosque que los
rodea- ¿Quieres hacerlo aquí?
-Aquí – dice ella, sonriendo ansiosa-. Ahora. ¿Quieres?
Él la mira, entre la excitación y la sorpresa y, sonriendo, asiente. Ella
sonríe también.
Son dos chicos jóvenes y guapos que llevan saliendo unos meses y están
empezando a enamorarse”
La historia arranca cuando dos chicos se encuentran en el bosque jugueteando.
Pocos segundos después son atacados por algo o alguien que definirán horas más
tarde a la policía sin la menor duda como un zombi. Obviamente, y a diferencia
del atacante, ambos han sobrevivido pero a él le han arrancado a mordiscos
parte de la cara y ella se encuentra en estado de shock.
Con esta inusual situación es la inspectora Tébar quien comienza a
investigar el caso. La que ha sido su compañera durante años se marcha y su
sustituto, David Merino, es un joven motivado pero con poca experiencia, que a
ella de entrada no le gusta. Y uno de los motivos es que nunca había tenido un
hombre como compañero. El choque entre ambos queda patente desde el primer
momento aunque tendrán que encontrar la forma de aunar sus fuerzas si quieren
descubrir que es lo que se esconde en el bosque. Mientras, la noticia salta a
la prensa de Grazalema, que el lugar de Cádiz donde se desarrolla la novela,
con la inevitable alarma que la sociedad asume.
Como ya ha salido por ahí la palabra zombi os aclararé que no es un libro
de zombis ni de ciencia ficción. Es decir, no vamos a encontrarnos muertos
vivientes que atacan a la humanidad sino que es una novela de corte policial en
la que hay un crimen y una investigación para descubrir al culpable. Si es
verdad, que tal y como la autora, nos presenta al peculiar atacante consigue
despertar nuestra curiosidad con un ser con una fuerza descomunal que ha
pretendido comerse a un hombre. Un inicio sin duda original y que te hace
preguntarte cómo va a salir la autora de forma creíble de este embolado.
Una de los aspectos que más me han gustado de la novela ha sido el
binomio de su pareja protagonista. Creo que dan mucho juego en la novela y que
incluso dan lugar a escenas divertidas. Laura
Tébar y David Merino son personajes completamente antagónicos que, obligados a
trabajar juntos, chocarán constantemente por esa concepción casi opuesta que
tienen del trabajo. Y ninguno lo disimulará.
Ella es una mujer de cincuenta y cinco años con una gran carrera a sus
espaldas. Es inteligente, independiente y no está acostumbrada a dar
explicaciones. Hace lo que quiere en todo momento siendo un calvario para sus
superiores y el resto de sus compañeros. Pero su mal carácter o sus reacciones
tan contundentes tienen una explicación que iremos comprendiendo conforme
avanza la novela y conozcamos la vida de este personaje, que no es nada fácil.
El subinspector Merino, que se hace llamar Cons, es joven y está comenzando su
carrera por lo que se lo toma todo muy en serio y no entiende ciertos
comportamientos de su jefa. Podríamos decir que ella pertenece a la vieja
escuela mientras él puede aportar metodologías más actuales. A pesar de esta
diferencia de caracteres se produce entre los dos personajes cierta tensión
sexual que no os cuento si se resuelve o no en la novela, que es algo que
también nos tendrá pendientes.
La
caricia de la bestia como he dicho es una novela de corte policial narrada a través de una
voz en tercera persona omnisciente que puede enfocar la acción en cada uno de
sus personajes según convenga para mostrarnos como son y sus historias personales.
Creo que la trama está muy bien pensada y construida porque al final todo
encaja bien y las explicaciones son creíbles.
Con respecto a su ritmo es una novela en la que quizás un poco más de
rapidez o acción no hubiese sobrado, sobre todo al principio, porque hay
algunos momentos en que me hubiese gustado que la autora abreviase algunos pasajes
o agilizase más la historia. Con esto no quiero decir que la lectura se haga
pesada porque es cierto que, gracias a ello, los personajes, por ejemplo, están
muy trabajados o los avances en el caso están muy bien detallados de forma que
no hay riego de perderse y quedarse con la duda con respecto a cómo han conseguido
llegar a ciertas conclusiones.
Por otro lado, otro de los mejores puntos de la novela son los diálogos
entre sus dos protagonistas, que te los imaginas a la perfección, y cuyas conversaciones
no tienen desperdicio. Creando incluso, como ya he dicho antes, escenas incluso
divertidas y socarronas. Porque la inspectora Tébar es un personaje que me ha
caído muy bien.
Conclusión
La
caricia de la bestia es una novela que desarrolla un buen caso policial, con mucho detallismo
y de forma muy creíble. Pero que además cuenta con dos personajes que aportan muchísimo
a la novela y que suman en interés.