jueves, 15 de septiembre de 2016

Mentira y sortilegio - Elsa Morante



Título: Mentira y sortilegio
Autora: Elsa Morante
Publicación: Lumen, 2012
Páginas: 1024

Imaginemos un apartamento grande, lleno de baratijas y vacío de vida. De repente, asoma el rostro de una mujer: es Elisa, una joven huérfana, que vive rodeada de novelas de aventura y sagas trufadas de héroes y doncellas. Decidida a poner por escrito la historia de su familia, Elisa convierte a su madre Anna, a su padre Francesco, al primo Edoardo y a una generosa prostituta de nombre Rosalía en personajes de leyenda. Así, unos seres en realidad anodinos, patéticos incluso, se transforman en hombres y mujeres dignos de mil locuras, y lo que podría ser una comedia costumbrista es una grandiosa tragedia. Además, Elisa ya nos advierte en las primeras páginas de la novela: «Aunque ustedes, queridos lectores, encontrarán en estas líneas a más de un personaje contagiado por el morbo de la imaginación, sepan que ya han conocido al enfermo más grave, pues aquí me tienen: soy yo, Elisa».

Hija del desprecio, esa mujer de largas trenzas y rostro pálido ha heredado de sus padres un enigma, y a ese enigma se añaden el miedo y la mentira, que fabrican amores apasionados, hijos ilegítimos y matrimonios infelices. Para comprender tanta locura, la joven fantasea y recuerda; luego escribe y lleva al lector a una pequeña ciudad del sur de Italia a principios del siglo XX, un lugar y una época en que la libertad de las mujeres estaba en manos de padres, maridos y amantes.

Mis impresiones

«Con esta obra descubrí lo que puede ser la buena literatura». Esta frase fue dicha por Elena Ferrante y con la que yo encontré a Elsa Morante, que me ha conquistado completamente como os ha ocurrido a muchos de vosotros. Elsa Morante nació en Roma a principios del siglo XX y sus últimos años de vida y su muerte, en 1985, fueron muy tristes. Publicó Mentira y sortilegio, su primera novela, en 1948 y a pesar del tiempo que ha transcurrido desde entonces esta novela no ha perdido nada de frescura a pesar de que las costumbres y modas han cambiado mucho.

En Mentira y sortilegio vamos a conocer a Elisa, una joven que  al quedarse huérfana fue acogida por una mujer de vida alegre. Dos meses después de la muerte de la que ella dice ser la persona que más cuidados y afectos le ha proporcionado en su vida, Elisa permanece encerrada en el que ha sido su hogar durante los últimos quince años rodeada de las historias de ficción que siempre le han acompañado. Así, refugiada una vez más en la literatura, se decide a escribir la historia de su familia. Desde sus abuelos hasta como llegó a ser la protegida de la mujer que acaba de perder.

Son realmente sus antecesores quienes van a protagonizar esta turbulenta historia donde amores, pasiones, odios, mentiras, hijos ilegítimos, matrimonios de conveniencia, locura, obsesión, ambición y deseo entre otras muchas vicisitudes sufrirán sus personajes. Y todo esto hace que Mentira y sortilegio sea una lectura increíble y fascinante. La precisión y lucidez con que Elsa Morante nos habla de personajes y situaciones te hacen meterte de lleno en la historia.

Mentira y sortilegio es un drama familiar pero a diferencia de las novelas que ahora catalogamos dentro de este género no es una obra ligera que tenga el único objetivo de entretener ni mostrarnos los trapos sucios de una familia. Elsa Morante disecciona de forma minuciosa y brillante cada matiz psicológico de sus personajes o su estado anímico quedando completamente abiertos de cara al lector. Son figuras muy complejas, poniendo además en relieve sus claroscuros infundiendo cada uno de ellos en el lector ciertos sentimientos. He disfrutado mucho de su lectura, la historia ha captado mi interés, sus personajes han hecho que sufra con ellos y también me han dejado un sabor agridulce. Agrio por la dureza de la historia, dulce porqué he leído una gran novela.

Elisa es la narradora de la misma con un enfoque un tanto especial porque conoce a la perfección a sus antepasados y los hechos que llegaron a vivir. Comenzando por ella misma iremos descubriendo la complicada situación que se vivió en su propia casa con sus padres (también conoceremos a los abuelos maternos y la paternos). En ese hogar nos vamos a encontrar una madre que no corresponde al apego ni los afectos de su marido, su propia madre o su hija. Una mujer fría que ya consagró su vida a otro ser y nunca derivó el cariño que este le producía en nadie más. Cada hecho que sucede en la novela está justificado y/o explicado con sumo detalle de forma que nada sucede porque sí.

Las vivencias de la abuela Cesira,  el abuelo Teodoro, Anna, la madre, Edoardo, el primo, de Nicola, Francesco, Rosaria o Concetta resultarán tan vividas para el lector que parece que puede tocar con las manos a sus personajes y al terminar tiene la sensación de pertenecen a su propia familia. El egoísmo, la ambición, el odio, la impotencia, la soberbia, son sus rasgos incluso llegaremos a ver el maltrato psicológico más despiadado. Esta última apreciación se percibe sobre todo en uno de los personajes más interesantes que hay en la novela. No voy a desvelar su nombre pero su carácter es tan voluble, irascible y tirano que en un momento ama y al segundo puede llegar a odiar y humillar.

En esta novela hay dolor, hay pesar. Todos ellos viven en el sur de Italia a principios del siglo XX  (aunque los escenarios no están muy concretados ni falta que le hace) y sus vidas determinadas por ese entorno hostil en el que algunos viven. Son esclavos del honor y de las formas, de su propia pobreza y las decisiones que han tomado. Uno de sus personajes será repudiado por su familia al casarse con una persona de una clase social muy inferior, otro renunciará a su amor propio para mejorar su situación económica y siempre a expensas del que dirán.

Nada más empezar a leer esta novela me llamó la atención su calidad narrativa, la elegancia y sobriedad con que Elsa Morante conduce la historia. En diversas ocasiones la narradora se dirige al lector y esto aporta un aire intimista y cercano que a mí me ha encantado pero a la vez manteniendo la agilidad y la ligereza. Con una historia de tal volumen suelo tener recelos pero en las más de mil páginas que esta novela tiene no me ha aburrido ni un solo instante y considero que esto es muy complicado en una novela que no tiene un gran ritmo. Aunque hay muchas cosas que el lector está deseando conocer tampoco te mantiene en un suspense que te lleve a acelerar la lectura. Mentira y sortilegio es para disfrutarla sin prisas ni plazos, dejándote llevar y escuchando atentamente lo que sus personajes cuentan por sí mismos.

Conclusión

Mentira y sortilegio no es una novela que se deba coger a la ligera con la única pretensión de pasar un rato entretenido. Es una novela de emociones intensas y profundas que nos habla de las dificultosas relaciones de los miembros de una familia. En esta ocasión no voy a recomendar la novela a todo el mundo pero si a aquellos que aprecien la buena literatura y la calidad y no les importe prescindir de la acción.


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