Título: La Tienda
Autor: James
Patterson / Richar DiLaLlo
Publicación: Duomo,
septiembre de 2018
Páginas: 352
Seguro que muchos
de vosotros os habéis dado cuenta ya (y si no fijaos) de que los anuncios que
nos aparecen en las páginas webs están muy relacionados con las búsquedas de productos
o servicios que realizamos desde nuestro ordenador. Y es que es casi imposible
no dejar un rastro en la red. Por otro lado, quizás no nos damos cuenta de toda
la información que sin darnos cuenta vamos dejando sobre nosotros mismos y
nuestras vidas en las redes sociales. Y esa información es usada por empresas
para hacer negocio. Sobre esta idea James Patterson, a quien ya conozco de
otras novelas, junto a Richard DiLaLlo, como colaborador, fundamenta una
distopía que quién sabe si en el futuro se puede convertir en realidad.
Jacob y Megan
Brandeis se han dedicado siempre a escribir en diferentes proyectos, desde
catálogos o eslóganes publicitarios hasta anuncios para periódicos. Viven con
sus dos hijos adolescentes, de quince y trece años, en un extravagante apartamento
del Distrito Financiero en Manhattan. Sin embargo, después de trabajar durante
casi dos años en un libro se encuentran con el rechazo de su amiga y editora.
El libro en papel ya no se vende. De hecho, su propio puesto y el de muchas
otras personas del sector editorial, corre peligro.
Todo es debido a un
gigante online que está absorbiendo
todo el mercado editorial a través de los ebooks,
y apenas hay gente que consume ya libros en papel. Se trata de La Tienda. Una empresa
que controla no solo la mayoría de las ventas del país sino que además manipula
a los propios usuarios para que decidan lo que deben comprar. Allí se vende
absolutamente de todo a precios imbatibles. Ante esa situación Megan y Jacob
deciden una solución a la desesperada. Se infiltrarán en La Tienda como
trabajadores y después escribirán un libro sobre sus entresijos y secretos.
La Tienda les
ofrece un trabajo modesto (en su centro de distribución) y para ello tendrán
que mudarse a un pueblo llamado New Burg en Nebraska. Al principio todo parece
demasiado bueno para ser verdad. Una casa estupenda, muchas facilidades,
caprichos sin tener que molestarse en pedirlos aunque los vecinos son un poco
raros, quizás demasiado amables. Y lo que comienza a suceder allí se torna poco
menos que estremecedor…
La Tienda es una de esas novelas de suspense que te lees en cuatro ratos, un pasa
páginas entretenidísimo que pone a sus personajes en una situación límite. Y es
que una vez entran bajo el cobijo de La Tienda, será muy difícil que puedan
conservar el dominio de sus vidas. La Tienda tiene la capacidad de vigilar y controlar
a todos sus trabajadores de las distintas sedes, ha podido influir en el gobierno
para que modifiquen las leyes a su antojo, son capaces de controlar a los
consumidores y han creado un mundo a su medida.
Aunque puede
parecer una idea en principio muy exagerada creo que los autores de esta novela
lo que pretenden es ofrecer una reflexión y que tomemos conciencia sobre los
monopolios, sobre como las empresas pueden llegar a jugar con los consumidores
y como las más grandes tienen más herramientas. Las compras por internet son
cada vez más frecuentes, un modelo muy rentable, y yo como usuaria me he
sentido muchas veces bombardeada por la publicidad. Al mismo tiempo creo que también
es una especie de aviso sobre el peligro de la consumición de lo digital. Es más
cómodo y relativamente más barato. Pero ¿Podemos prescindir de un mundo sin
libros de papel? Obviamente leyendo se te viene a la cabeza el modelo de
negocio de Amazon aunque esta ha sido una aproximación personal mía. No sé si
tiene algún fundamento real o es cierto que el autor se haya inspirado en ella.
La novela tiene una
narración de ritmo vertiginoso. Su historia tiene mucha acción y no paran de
suceder cosas. No necesitamos que los personajes tengan un trazado, complejo y
profundo. No viene al caso en la historia. Sin embargo es una de esas novelas
que te lees prácticamente del tirón y que vas visualizando perfectamente en la
mente. A pesar de que está contada de forma muy dinámica, directa y sin usar párrafos
muy descriptivos. De hecho, cero que es
una buena historia para ver en la gran pantalla. Me ha resultado muy cinematográfica.
Conclusión
La Tienda es una novela que genera puro entretenimiento y la cual has leído antes de
darte cuenta. Una historia donde hay suspense, donde hay acción y que sucede a
un ritmo francamente rápido. Nos ofrece una visión poco halagüeña del futuro. Pero
¿Quién sabe cómo terminaremos dentro de unos años?