lunes, 30 de noviembre de 2020

El asesinato de Platón - Marcos Chicot

 


Sócrates, Pitágoras... y ahora Platón... Parece que Marcos Chicot se ha empeñado en acabar con todos los grandes filósofos y pensadores de la antigüedad. Al autor lo conocí cuando auto publicó su primera novela, la cual me sorprendió muchísimo. La cuestión era que convirtió un tema que para mí era tremendamente árido en una novela que disfruté mucho. 

El asesinato de Platón nos emplaza a la ciudad de Atenas en el año 372 a. C. Allí vive la joven Altea, embarazada por tercera vez y con miedo a que el bebé se malogre como en ocasiones anteriores. Además de ser una mujer independiente e inteligente es también una de las mejores discípulas de Platón, quien ha fundado la Academia de Atenas. Sin embargo la obsesión y el miedo que siente al pensar que nunca podrá tener hijos y que su marido, Calipo, la repudie le impide ver que tiene el enemigo metido dentro de casa.  

Con esta novela su autor nos acerca un poco más a la figura de Platón. Reconozco que esta parte de la historia me da pereza pero a través de los libros de Chicot siempre logro sacarle partido. Conoceremos a una de las figuras más importantes en cuanto a la evolución del pensamiento y conocimiento. Un hombre adelantado a su época que creía en que las mujeres podían ser mucho mas de lo eran consideradas por entonces. 

Consagró los últimos años de su vida a su gran pasión. Esa Academia que hoy se considera la precursora de la universidad. Su objetivo fue el de explorar el conocimiento a través de las diferentes materias entre las que se encontraban las matemáticas, la astronomías, la ética, el psicología, la política, etc... pero sobre todo crear una forma de gobierno justa y sabia. Algo que no todo el mundo verá con buenos ojos y que le llevará a poner en peligro su vida. 

Y esta manera de convertir a Platón en un personaje más hace que se aleje de la visión abstracta, complicada y lejana que tenía del mismo. No debe ser fácil transmitir todos esos conocimientos, teorías o postulados que Platón legó a la sociedad y simplificarlos de forma que no pierdan su esencia pero a la vez sean entendibles por cualquiera. Y sin perder esos matices y clarosocuros que tenemos las personas reales. De igual manera no sabe acercarle a los lectores sino que también consigue que empaticemos con los personajes ficticios que crea y nos los creamos.  Por ejemplo el personaje de Altea se gana al lector desde el principio. 

Es una novela donde realidad y ficción se dan la mano de una forma muy bien estructurada porque es difícil separar una de al otra y discernir cual es la línea que las divide. Las diferentes tramas que nos hablan de ambición, odio, lealtad, traición, intrigas, deseos, sueños, amor se imbrican en un contexto histórico complicado. 

El pueblo espartano y los agresivos tebanos mantienen una dura rivalidad que parece llevarles a una guerra inevitable. Atenas sabe que si no logra contener a Tebas pueden acabar destruidos. Sin embargo al final la llegada del general Epaminondas será determinante en el futuro de las dos potencias. 

En este aspecto histórico se ve que el autor es minucioso y riguroso y se nota todo el trabajo de documentación (que no deber ser fácil) que hay detrás al recrear la vida de sus personajes. Una vez terminas la novela parece como si tu mismo hubieses estado allí. Aunque no me sorprende tanto porque es algo que ya percibí en sus novelas anteriores. 

Algo que además ayuda es que la narración, además de ser cuidada y elegante, está muy focalizada en los personajes, en que el lector conozca sus pensamientos y sentimientos, lo cual hace que te de alguna manera te veas involucrado en la historia.

Obviamente lo que os he contado es un ligero esbozo de todo lo que podréis encontrar en esta novela. Ya que como entenderéis novecientas páginas (sí, se que son muchas pero en ningún momento se hacen pesadas) dan para mucho más de lo que yo he mencionado. Podría profundizar en muchos aspectos pero la reseña sería eterna. 

En definitiva, con El asesinato de Platón una vez más Marcos Chicot deja claro que se puede escribir y descubrir la historia sin que resulte tedioso ni complicado. Esta es una novela que resulta didáctica a la par que entretenida y que recomiendo a cualquier tipo de lector.