lunes, 27 de abril de 2020

Cien locos conocí - Fernando Arnáiz

Cien locos conocí es la segunda novela de Fernando Arnaiz, un licenciado en químicas que se ha lanzado a la gran aventura de la escritura.

La historia comienza en Louisiana en 1869, Alfonso es tan solo un niño que se queda maravillado en el circo cuando conoce a extraño hombre con la habilidad de leer la mente. La vida de Alonso nunca volvería ser la misma. O más bien él. Porque su padre seguiría maltratándolo, sus hermanos seguirían abusando de él y su madre moriría un poco después de aquel día, dejándolo desangelado.

Pero un mundo se abriría ante sí mismo y es que, convencido de la existencia del tesoro secreto de Moctezuma y de que su suerte puede cambiar, unos años más tarde cruza el desierto de Sonora (en Arizona). Tras una serie de circunstancias termina dando con sus huesos en el asilo para dementes de Opelousas en donde todo un abanico de singulares personajes que irán pasando por su vida.

Este es grosso modo el argumento de Cien locos conocí. Una novela difícil de calificar o encuadrar en un género determinado. Quizás se acerque más al género histórico siendo una novela que esconde muchísimas mini historias en su interior.

Es una novela de largo recorrido en la vida de un personaje pero en la que quizás no sea Alonso del todo el protagonista. Un niño maltratado al que la vida no acoge bien. Mientras él intenta salir hacia adelante todos sus planes se van al traste y es que es un personaje ingenuo y fantasioso que no aprende de sus errores ni acaba de espabilar. Vive en su mundo pensando que él también puede leer la mente, lo que no le ayudará mucho.

Alonso es, en realidad, un personaje que como lectora, no me ha llegado a calar. A pesar de todo lo que le va pasando no ha despertado lástima en mí. Quizás por la forma en que el autor nos lo narra sin caer en el dramatismo. La primera parte del libro nos va contando su historia que no está mal pero tampoco me ha apasionado.

Sin duda, la parte que más me ha gustado de la novela es todo lo que sucede desde que entramos en Asilo para Dementes de Opelousas. Un sanatorio construido en Louisiana para adaptarse a una nueva forma de pensar sobre estos enfermos a los cuales hasta hacía pocos años se trataba como animales. Y aunque el concepto de “loco” había cambiado y en esos momentos se consideraba que debían recibir un tratamiento más moral lo cierto es que la vida en Opelousas no era fácil. Allí se mezclaba todo tipo de gente. Locos con cuerdos e incluso con quienes eran criminales, el trato bastante inhumano y el ambiente asfixiante.

No solo conoceremos cómo se desarrolla la vida en el asilo sino que vamos conociendo las historias personales de muchos personajes que han llegado allí. Como digo, no todos enfermos. Si no que allí metían a muchos de los “sobrantes” de la sociedad. Aquellos con los que no se sabía qué hacer. 

La novela se nota que está escrita con mimo. Su autor tiene un estilo narrativo cuidado y muy elegante por lo que de por si resulta un placer leer la novela. Si es cierto que su ritmo es en algunos momentos algo cadencioso y que algunos párrafos podrían ser recortados pero en lo general se agradece encontrarse con una historia tan bien escrita y tan bien cuidada en detalles. Además se nota frescura y originalidad.

Como aspectos menos positivos tengo que comentar que el argumento se está poco definido, no sabes muy bien a qué ni a dónde quiere llegar el autor (aunque de esto te das cuenta una vez la novela ha acabado). Y una segunda pega es que como ya he dicho no hay ningún personaje que te enganche y te cree apego.

Antes he calificado esta novela como género cercano al histórico y es porque muchos de los escenarios e incluso algunos personajes existieron en realidad. Todos hemos oído hablar de la fiebre del oro que surgió en Estados Unidos y personajes como Jacob Waltz, del que se cree tenía un gran tesoro escondido. Como sigue siendo toda una incógnita a día de hoy el tesoro de Moctezuma ya convertido en un mito. Se nota que este aspecto ha sido bien documentado y resulta muy creíble en la novela.

En definitiva, aunque Cien locos conocí no es una novela del todo redonda, he disfrutado de su lectura. Me encanta la temática de los sanatorios mentales y me han encantado las historias que el autor nos cuenta de sus inquilinos. Una novela que me ha resultado interesante y entretenida. Aunque un aviso es que hay que leer sin prisas.