Título: El mapa de las viudas
Autor: Daniel Dimeco
Publicación: Algaida, 2013
Páginas: 310
A finales del verano de 1960, una serie de asesinatos en la ciudad de Stralsund, al norte de la República Democrática Alemana, agudizan la locura de Eleonora Maler. En ella conviven dos existencias paralelas: la mujer que fue hasta terminar la guerra y la personalidad que se originó una trágica noche de 1945. Pero ambas—la cuerda y la enajenada— son una, comparten el mismo cuerpo y viven una vida común, acompañadas de una niña que arrastra su propia desdicha.
En el asfixiante ambiente de una pequeña ciudad donde la Stasi se afana en controlar a todos sus habitantes, Eleonora tendrá que enfrentarse a sus propios miedos y a sus propios fantasmas: algunos sólo están dentro de ella, pero otros aún recorren las calles de Stralsund.
Mi experiencia con la novela
Con El mapa de las viudas, publicada por Algaida, el escritor argentino Daniel Dimeco se hizo con el XVI Premio Ciudad de Badajoz en 2013. Un escritor que a pesar de haber hecho ya sus pinitos en el mundo literario desconocía por completo hasta que esta novela ha llegado a mis manos pero que me ha sorprendido muy gratamente por su calidad.
El mapa de las viudas es un intenso y complejo thriller psicológico que atrapa en su lectura desde la primera página y a medida que avanzamos en ella nos causa cierto desconcierto. Es muy posible que en sus primeras páginas el lector se sienta perdido sin saber muy bien qué es lo que está leyendo ni cuál es el fin al que Dimeco quiere llegar pero sin duda merece la pena esperar y descubrir como todas las piezas del rompecabezas se van uniendo para desvelar una historia dura y desgarradora que nos remueve la conciencia en algunos momentos.
Dándole muchas vueltas a que contaros sobre el argumento he llegado a la conclusión de que no puedo llegar mucho más allá de lo que lo hace la sinopsis oficial de la editorial para no desvelaros nada esencial aunque lo haré a mi manera.
La historia transcurre en Stralsund, un pequeño municipio situado en el Norte de la Republica Democrática Alemana en el año 1960. Allí vive Eleonara Maler con su hija Annette, una mujer que se gana la vida como costurera. Pero el cuerpo de Eleonora no está habitado solamente por una persona porque en ella conviven dos personalidades distintas. Una es la mujer que existió hasta el día en que terminó la guerra en 1945 y la otra es producto de lo que sucedió la noche del aquel día en que su vida cambió para siempre y la que mantiene a su hija de nueve años encerrada en su cuarto y con los ojos vendados.
En la ciudad todo el mundo la toma por loca, pues Eleonora no tiene muy claro en qué año vive y aunque la guerra terminó hace años, ella sigue escuchando las sirenas, las bombas caer y mantiene intacto el miedo metido en el cuerpo. Toda esta locura se agudiza cuando el cuerpo de una niña de diez años aparece brutalmente asesinado en el barrio donde vive al que seguirán varias muertes más.
La novela comienza de forma inquietante presentándonos diversas intrigas que no se desvelarán completamente hasta el final de la misma. La trama creada por su autor resulta tan atrayente que es difícil dejar la novela a un lado. Aunque hay asesinatos yo no la considero dentro de la novela negra ya que no es tan importante encontrar al ejecutor como todo los interrogantes que nos planteamos sobre los actos y la patente locura de Eleonora, que vamos conociendo poco a poco.
Dimeco nos sorprende con un personaje realmente complejo, marcado por una doble personalidad y dos realidades bien distintas. Un personaje construido al detalle, con una caracterización magnifica y una naturaleza estremecedora. En ella se produce una lucha interior entre dos mujeres, una sumida en la locura y otra totalmente lúcida, una que ha querido olvidar y otra que recuerda. Aunque al principio no seremos participes de esta lucha sino que la iremos descubriendo a lo largo de su desarrollo. Si es cierto que al comienzo es casi imposible empatizar y conectar con su protagonista, en principio porque no la entendemos y en segundo lugar porque sus acciones nos producen rechazo pero cuando llegamos a entender que ocurrió para que Eleonora se desdoblara en dos algo cambia en nuestra percepción y llegamos a sentir una tremenda lástima por ella a la vez que de algún modo podemos comprenderla. El ser diabólico que conocemos al principio llega a convertirse en una mujer protectora y amorosa.
Pero no sólo existen en ella las consecuencias de todo lo visto y vivido en la guerra sino que Eleonora vive obsesionada por los murciélagos que duermen cada noche en su hogar, que la atacan, que la lastiman y que incluso está convencida de que uno de ellos se ha metido en su interior y devora su carne poco a poco e intentando llegar al corazón puede acabar con su vida. Al ponerse el sol los escucha, los siente, se enredan en su pelo y amenazan con atacar también a su pequeña Annete. Su presencia en la novela adquiere varias lecturas. Pueden ser una figura tanto real como una metáfora de los remordimientos o recuerdos anidados en su protagonista. Una cuestión que otorga al lector el poder de decidir.
A su alrededor existen otros tantos personajes igualmente interesantes y perfectamente dibujados que juegan un papel fundamental en la historia. Los Amstelheim forman una curiosa pareja, él es un médico dominado por su esposa Ulva, que no da un paso sin que ella lo apruebe. María GroB es la esposa de un alto cargo político del partido que encarga sus vestidos a Eleonora o Sibylle Müller, una joven charlatana y entrometida que sabe demasiado. Aunque en la novela tienen más protagonismo los personajes femeninos y están mejor caracterización los masculinos tienen una importancia decisiva en la historia. Lo que yo destacaría de todos los personajes es la doble cara que presentan y que dibuja distintas posibilidades en la mente del lector. Pero al final todo cobra sentido.
Igualmente interesante es la época en que se desarrolla la acción. En una pequeña ciudad de la República Oriental Alemana, en los años 60, con la población sumida en la posguerra viviendo las consecuencias de una guerra atroz, cuyos ecos están presentes durante todo el relato, y un país dividido por un muro. El dolor de lo vivido sigue muy presente en sus vidas aunque nadie se atreve a hablar de ello. Los alemanes viven en una especie de mutismo causado por el miedo o la vergüenza sobre las barbaridades cometidas por el gobierno alemán sobre el pueblo judío que todo el mundo parece haber olvidado.
Cada movimiento de sus habitantes está vigilado por los miembros de la Stasi, uno de los organismos más efectivos del mundo que se encargaba de la seguridad del Berlín oriental, que produce un ambiente opresivo y asfixiante en la ciudad. Nadie se atreve a hablar, a denunciar determinados actos por abominables que resulten incluso el asesinato de una niña inocente que hace que sus vecinos miren hacia otro lado.
La novela se nos presenta con un estilo narrativo impecable y de calidad. Con escenarios simplemente esbozados pero una gran riqueza en cuanto a la psicología de los personajes. Con un ritmo pausado que cuenta con escasos diálogos y donde predomina claramente la narración. El relato se estructura a través de capítulos normalmente narrados por una tercera voz omnisciente que cambia en ocasiones a la primera persona, en una de las cuales aprovecha para volver atrás en el tiempo y narrarnos los acontecimientos que sucedieron en una trágica noche del año 1945 y que fueron el punto de partida de la locura de Eleonora. Este cambio de narrador tiene un sentido concreto que no voy a desvelar pero que hace de esta novela una composición muy interesante. Es a partir de este capítulo cuando la madeja se va desenredando y comenzamos a comprender todo lo que oculta la historia.
Respecto a su desenlace, seguramente sus últimas páginas nos asombrarán o nos horrorizarán, porque esta novela es totalmente impredecible y termina cumpliendo ampliamente las expectativas del lector.
Conclusión
No puedo dejar de recomendaros la lectura de El mapa de las viudas, un testimonio de una época y una forma de vivir. Un relato duro, conmovedor de una mujer anclada a la locura, de una niña condenada a la oscuridad y de una ciudad sumida en el silencio. Una historia que no dejará indiferente al lector y que le acompañará durante algún tiempo.
