jueves, 1 de agosto de 2019

Clara - Virginia Gil Rodríguez


De Virginia Gil había leído con anterioridad En la calle mayor, una novela que tocaba un tema muy delicado y que me dejó muy buenas sensaciones. Su última novela se titula Clara y como la anterior, pretende hacer visible un tema que es importante que seamos conscientes. Es un problema muy grave en la sociedad y cuanto más hablemos de él mejor.

La historia es protagonizada por Clara, una niña de tan solo nueve años, que tiene una vida absolutamente normal y corriente. Va a al colegio como cualquier niña de su edad, disfruta de la compañía de sus amigas Esther, Elsa y sobre todo con Erika, con quien comparte una relación especial. Además Clara tiene un don especial y es que en el agua es como un pez. En la piscina se siente libre de todos los problemas lo que le ha llevado a practicar la natación de una forma un poco más seria.

Pero un día Clara pierde todo eso que tenía y es que sin saber muy bien la razón Erika, su mejor amiga, la deja de hablar y además impide a las demás que jueguen y hablen con ella.  A partir de ese momento la vida de Clara se transforma en un infierno, pierde la motivación y ni siquiera el agua logra consolarlo.

Clara es una novela muy corta, no supera las cien páginas, que tiene un argumento crudo y bastante duro. Nos habla del acoso escolar, ese que desgraciadamente sufren mucho niños y niñas a diario. Que afortunadamente a veces es detectado a tiempo y se consigue encauzar pero que otras veces termina de forma trágica provocando graves problemas psicológicos, de autoestima y de comportamiento en quien lo sufren. E incluso puede llegar a tener consecuencias mucho más graves.

Hay niños que por su carácter o por lo que sea son líderes naturales. Lo he visto en la clase de mi hija. Son niños con altas capacidades de llevar a los demás, de convencerlos e incluso de dictar que comportamientos tienen que seguir. Si estos niños no tienen una buena base de respeto hacia los demás y empatía o se encuentran con niños con poco carácter y débiles se pueden convertir en maltratadores.

Por eso es importante en primer lugar que se hable del acoso que quizás es más invisible, ese en el que no hay violencia física ni mental, al menos de forma evidente. Se manifiesta dando de lado a una persona, haciéndola sentirse mínima incluso invisible. Creo que es muy difícil que alguien se pueda defender de eso. Es lo que le ocurre a Clara, una niña a quien nadie comprende. Nadie es consciente del calvario que está sufriendo, ni profesores ni gente cercana. Su madre le aconseja que no se preocupe, que ya volverán las aguas a su cauce - ¿Por qué a veces incluso las mejores amigas tienen enfados? - o que encontrará nuevas amigas. Poco a poco empieza a evadirse, a no rendir lo mismo, a estar ensimismada y triste. Pero ¡Qué fácil es pensar que es lo propio de la edad! Y que ya se le pasará y que llega la adolescencia y que todo esto pasa de forma natural.

Virginia Gil una vez nos demuestra lo importante que es estar pendientes de lo demás, que la comunicación es básica y esencial y que no debemos confiarnos.

A pesar de que es un tema muy duro, Virginia Gil lo toca con muchísima delicadeza y lanza un mensaje de esperanza y es que se puede hacer frente a este tipo de situaciones. Como os he adelantado, la novela no supera las cien páginas y se lee de un tirón. Sí que es verdad que hay ciertos aspectos que me hubiese gustado, por razones completamente personales, que hubiese desarrollado más a fondo pero creo que Virginia va a lo esencial de la historia. No distrae al lector de su mensaje incluyendo elementos superficiales.

En definitiva, Clara es una novela corta que se lee del tirón y que trata un tema muy duro que la sociedad ha de tener presente y luchar contra él.