martes, 9 de febrero de 2016

Una saga moscovita - Vasili Aksiónov



Título: Una saga moscovita
Autor: Vasili Aksiónov
Publicación: Navona, 2015
Páginas: 1216

Una saga moscovita narra la vida de una familia de médicos en la Rusia del siglo pasado. En 1925, en la dacha de los Grádov, el padre, Borís Nikítovich, es un brillante cirujano y un maestro respetado; la madre, de origen georgiano, se consagra a su casa, a sus hijos y al piano; el hijo mayor, Nikita, es un noven oficial superior del Ejército Rojo; su hermano Kiril es un bolchevique, amante de la Revolución y del Partido; y su hermana pequeña Nina, una joven poeta de enorme belleza. Lenin ha muerto y el Partido está dividido entre los seguidores de Stalin y los miembros de la oposición liderada por Trotski. Los Grádov se verán implicados, a su pesar, en la Revolución y esto marcará el comienzo de un largo proceso de transformación que acabará sometiendo a todos los miembros de la familia.

Mis impresiones

Pensar en una novela rusa (de autor ruso que no es lo mismo que se desarrolle en Rusia y este escrita por un autor de otra nacionalidad) y que supere las mil doscientas páginas puede asustar un poco. Pero lo cierto que todo es empezar. No podía dejar atrás esta publicación de Navona, porque me llamó mucho la atención su sinopsis y porque forma parte de la colección Los Ineludibles la cual me ha descubierto obras sorprendentes que bien hacen honor al título de su colección.

Si miramos la vida de su autor podemos comprender el porqué de esta novela. Hijo de una familia prospera, con solo cuatro años su madre fue acusada de trotskista y enviada al gulag siendo Vasili Aksiónov custodiado en un orfanato para enemigos del pueblo. Estudió medicina y siempre tuvo un afán literario que derivó en novelas de éxito innegable. Pero estás fueron censuradas y más tarde él enviado al exilio.

La novela comienza en Rusia en 1925 y allí, en una dacha (que es una casa de campo típica rusa), vive la familia Grádov. Borís Nikítovich (o Boris III), el cabeza de familia, es un importante cirujano muy bien considerado en su profesión por lo que la familia disfruta de una situación económica privilegiada. Es un hombre justo y de principios que valora a cada paciente por igual independientemente de su estatus. En la casa viven también María, su esposa dedicada al cuidado de la familia y cuya pasión es el piano, y sus tres hijos que son, Nikita, un alto oficial del Ejército Rojo, Kiril, de ideas afines a los bolcheviques y seguidor convencido del Partido y la revolución . La más joven es Nina, que ama la poesía y la libertad. Tres personas con tres caracteres muy diferentes pero muy férreos en sus convicciones.

En ese momento Rusia está cambiando. La muerte de Lenin está aún muy cercana y es Stalin quien ahora tiene el poder aunque con una dura oposición dentro del Partido por parte de los trotskistas. Esta situación política y social afecta a la familia de forma inexorable mientras Rusia se dirige al declive.

Una saga moscovita, publicada por primera vez al principio de la década de los noventa, es una novela con sabor a clásico que nos narra la vida de una familia en un contexto muy determinado. A lo largo de la novela iremos conociendo las relaciones entre sus miembros pero sobre todo seremos participes de como los acontecimientos políticos y sociales afectan a diferentes generaciones de los Grádov y a todos aquellas personas involucradas de una manera y otra en sus vidas. Nos encontraremos historias de amor y amistad, traiciones, ambición, miedo y violencia en una increíble mezcla de realidad y ficción.

La parte histórica en la novela cobra un protagonismo especial retratándonos con fidelidad y exactitud cómo se vivió en aquel lugar y momento. La Revolución de Octubre (con todo aquello que supuso para el pueblo) dio al poder a los bolcheviques y la muerte de Lenin dejó el país en manos de un hombre llamado Stalin. A lo largo de su extensión vemos como el régimen en principio considerado todo un logro se va deteriorando. La novela se inicia en 1925 y abarca hasta el año 1953, con Stalin ya fallecido. En estos años conoceremos la represión, “las desapariciones” de ciudadanos, los campos de trabajo, las encarcelaciones, las torturas y el exilio.  

Porque si el nazismo parece el mayor y más famoso horror concebido por el hombre no fue el único. El estalinismo también sembró el pánico, masacró, ejecutó, cometió barbaridades y atentó contra los derechos de la vida de igual manera. Stalin tuvo miedo de perder el poder y eliminó a aquellos que consideró una amenaza o que podrían llegar a serlo. Pero el pueblo ruso no quiso o supo verlo. También nos habla del paso de Rusia por la II Guerra Mundial y lo que ocurrió en el país después de ella, cómo intentó sobreponerse a la posguerra mientras otra guerra, la Fría, se acercaba. Finalmente el régimen acabó derrumbándose dejando atrás millones de víctimas.

Creo que uno de los inconvenientes cuando uno se enfrenta a la literatura rusa (o al menos en mi caso) es memorizar y situar los nombres de sus personajes. No solo porque nos resulten complicados sino también porque los apellidos tienen forma masculina y femenina o utilicen los patronímicos (formados a partir del nombre del padre) para referirse a ellos de forma indistinta. En esta novela hay muchísimos personajes que sería imposible resaltar uno a uno y a estos les ocurren tantas cosas que es muy difícil sintetizarlas en una línea básica. En Una saga moscovita nos encontramos las experiencias de los Gradóv pero estos no solo más que unos nombres ficticios que representan las vivencias del pueblo ruso. Vemos sus sueños, sus motivaciones, sus pensamientos y ambiciones conformándolos el autor como entidades muy humanas que se ganan nuestro corazón y que nos afecta cuando van cayendo en desgracia, porque palos se van a llegar muchos. También nos encontraremos otros personajes reales que se irán entrecruzando con ellos entre otros el propio Stalin o Lavrenti Beria, jefe del NKVD, el servicio secreto.

Pudiera parecer que el lector que comience su lectura se enfrenta a una novela densa pero lejos de la realidad y salvando un comienzo que puede despistar o algunos términos que no pueden resultar familiares al lector (a pesar de las notas a pie de página) la novela se aborda con fluidez (por el lenguaje sencillo y directo y la acción presente en todo momento) y a través de un narrador omnisciente que puede narrar incluso dos escenas a la vez. En la novela hay muchos hechos dramáticos narrados con crudeza pero también con sentido del humor e ironía sin faltar una parte crítica.  Formalmente se articula en tres partes (con capítulos, actos y entreactos) que aunque inicialmente fueron pensadas para ver la luz en tres tomos finalmente en esta edición los encontramos reunidas en uno solo. Las dos últimas hacen un guiño a Guerra y Paz de Tolstoi.

Por ultimo os confieso que esta ha sido una reseña de las que más me ha costado hacer. Después de varios días escribiendo, borrando y reescribiendo, siempre con la pretensión de sintetizar al máximo e ir a lo esencial, me doy cuenta de que esta novela da para hablar o escribir muchísimo sobre ella. Me he dejado muchas cosas fuera que inicialmente quería comentar pero ya me he excedido de mi extensión habitual.

Conclusión

En mi opinión Una saga moscovita es una gran novela que deja huella en el lector pero eso sí hay que olvidarse de intentar leerla a la ligera y como un simple entretenimiento. Es la terrible y dramática historia de una familia pero también es un increíble fresco de como se lo que sufrió el pueblo ruso durante el estalinismo y como se vino abajo el socialismo en el país. Os la recomiendo de forma especial si os interesa esta parte de la historia.