Título: Asesinos de
series
Autor: Roberto Sánchez
Publicación: Roca,
mayo de 2018
Páginas: 316
Asesinos de Series es el nombre del blog de
tres jóvenes (Andrés, Marta y Rubén) que viven juntos en Madrid. Adictos a las
series, sueñan con crear su gran éxito internacional: una serie de referencia
como podría ser Lost. Andrés se gana la vida escribiendo textos para agencias
de publicidad y prospectos de farmacia. Marta es maquilladora en culebrones.
Rubén es taxista y, en las largas esperas en el aeropuerto o estaciones, devora
todas las series posibles. Un día, reciben la llamada de una productora de
televisión para entrevistarles. En realidad les recibe un subinspector de
policía, Héctor Salaberri. El motivo: se están cometiendo unos asesinatos que
tienen algo en común: están inspirados en series de televisión. La policía
quiere que les ayuden a encontrar nuevas pistas que puedan aparecer en otros
casos y, a la vez, ir dibujando el perfil del asesino. Ese mismo día, cuando
acuden a la cita, deben dar un rodeo porque el tráfico del centro de la ciudad
está imposible. Desde la sexta planta de un hotel ha saltado un hombre. No
tiene ningún documento que lo identifique. Se registró la noche anterior con un
nombre falso. Este caso se les encarga a los compañeros de Salaberri, el agente
Benítez y la inspectora jefe, Isabel Velasco.
Mis impresiones
Me llamó la
atención este título porque me resultó curioso que en vez Asesinos en serie se titulara Asesinos
de series. Una sola palabra que cambia mucho una frase y que parece que nos
da idea diferente. Su autor es Roberto Sánchez, periodista y locutor de Cadena
Ser desde hace muchos años. Una carrera con la que ha ganado algunos premios.
La novela comienza
con el cadáver de un hombre que ha caído del sexto piso de un hotel situado en
la Gran Vía de Madrid. Su cuerpo, que yace en medio de la calzada, se había
desplomado sin nadie hubiese visto nada extraño. Ni siquiera su tentativa de
tirarse. Además la posición del cuerpo parece indicar que hay alguien más
involucrado en ese incidente que no parece un suicidio.
Precisamente en el
atasco que ha provocado el cordón policial se encuentra Rubén, uno de los
protagonistas de esta novela. Es un chico que vuelve a casa de trabajar la cual
comparte con otros dos jóvenes, Andrés y Marta. Con ellos además administra un
blog que se llama Asesinos de Series.
Son fanáticos del tema y han elaborado en torno a ello un gran sueño: que la
serie que han creado llegue a los espectadores y sea un éxito. Mientras tanto hasta
que llegue el momento y para ganarse la vida cada uno de ellos se dedica a
otros trabajos. Cuando una productora de televisión se pone en contacto con los
tres lo que les viene a la cabeza es que la reunión tendrá algo que ver con
alguno de sus proyectos. Sin embargo están muy equivocados. Quien les recibe es
el inspector de policía Héctor Salaberri que requiere su colaboración en una
serie de casos de asesinatos que tienen mucho que ver con el propio guion de la
serie que ellos mismos han escrito. Son expertos y pueden aportan pistas que
pasarían desapercibidas a la propia policía.
El punto de partida
de esta novela me ha parecido muy original. Una serie de asesinatos que tienen
características muy comunes con algunos sucedidos en series de ficción. Es una
novela de género negro o policial en la que ese conocimiento será básico para
encontrar al asesino o asesinos porque las pistas están ahí. Y por tanto las
referencias a muchas series, algunas muy actuales, tienen mucho peso en la
novela. Imagino que el autor ha debido hacer un gran trabajo de recopilación de
información para incluirla en la novela y adaptarla a la historia sin que
resulte pesado. Porque hay que ser un poco “friki” (tómese en el buen sentido
de la palabra) de las series para poder identificar las pistas. Son muchísimas
a las que se hacen referencia como The
Blacklist, Prisión Break, Breaking Bad, Lost, Mujeres desesperadas o A dos metros bajo tierra (esta dos
últimas me encantan). Creo que los amantes del género pueden sacarle mucho
partido a esta novela y disfrutar ampliamente con su temática.
Los protagonistas
de estas historias son tres jóvenes entusiastas de la ficción. Los tres viven
juntos y algún día quieren que su propia serie sea todo un éxito. Ya han
probado suerte, han envidado guiones pero ninguno de sus proyectos ha cuajado.
Mientras tanto Rubén se gana la vida como taxista y se ha especializado en
series históricas. Andrés se dedica a escribir prospectos de medicamentos y en
el blog se ocupa de hablar de las comedias. Y Marta, la apasionada de los
thrillers, es maquilladora en una telenovela. Su ayuda será imprescindible para
la inspectora jefe Isabel Velasco y el subinspector de la policía Héctor
Salaberri que son quienes controlan la investigación oficial. Este último se
pegará a ellos para ¿Protegerlos o controlarlos?
La novela está
narrada con ligereza pero con un lenguaje muy cuidado y quizás no tan simple
como en otras novelas del género. Así mismo su autor aprovecha todo ese recurso
de la serie para utilizar ciertas técnicas relacionadas con el soporte. Por
ejemplo ya los capítulos tienen títulos que nos las evocan directamente como
T1x01 (¿Quién no es capaz de identificar esos números?). La novela va tomando ritmo
conforme avanzamos en ella y la resolución del caso no va ser nada fácil pues
su trama tampoco lo es. En primer lugar hay un par de casos y luego irán apareciendo
otros lo que hace que la novela sea muy entretenida y muy dinámica que además
acaba en una buena resolución.
Conclusión
Asesinos de series es una novela que nos lleva por unos
complicados casos criminales . Una novela que me ha resultado entretenida y muy
curiosa por como hila su trama con las series de ficción. Además el autor deja
entrever ciertas críticas al mundo del periodismo o a las redes sociales.