miércoles, 29 de julio de 2015

Iqbal Masih. Lágrimas, sorpresas y coraje - Miguel Griot



Título: Iqbal Masih. Lágrimas, sorpresas y coraje
Autor: Miguel Griot
Publicación: Oxford University Press
Páginas: 272

Iqbal Masih fue un niño que nació para ser esclavo y creció para desafiar su destino. El héroe que escapó de su trabajo forzado y se convirtió en el símbolo contra la explotación infantil. Acércate a él a través de lo que cuentan quienes lo conocieron. Cada uno tiene una historia con lágrimas, sonrisas, alguna sorpresa y mucho coraje. Juntándolas todas llegarás a saber quién fue Iqbal.

Mis impresiones

La literatura aparte de entretenernos y enseñarnos también es un excelente vehículo para denunciar situaciones injustas que se puedan vivir en cualquier parte el mundo. Quizás nos resulte mucho más agradable leer historias ficticias en las que aunque sus personajes vivan desventuras y eso nos emocione en el fondo sabemos que no es algo más que inventado. Algo que al cerrar el libro dejamos entre sus páginas. Nos suelen gustar las historias con finales felices en que los protagonistas consiguen sus objetivos y todo se soluciona. Pero eso no se suele corresponder con la realidad. Y la historia que hoy os presento no tiene un final feliz. No cerraremos sus páginas complacidos de ver como su protagonista ha conseguido una vida mejor.

“Esta historia no te la voy a contar yo sola. Imagínatela como una habitación. Mis palabras van a ser una de las muchas ventanas desde la cuales te vas a asomar. Ahí fuera, es decir, aquí dentro, entre las páginas de este libro, te espera Iqbal Masih. Lástima que no puedas entrar y conocerlo tú personalmente”

Iqbal Masih. Lágrimas, sorpresas y coraje es el título de este libro que ya de antemano te lo dice todo. En ella se nos narra la vida de un niño pakistaní llamado Iqbal. Un niño que a los seis años de edad es vendido por sus padres para trabajar en una fábrica de alfombras y tapices en  Lahore a cambio de un préstamo de 600 rupias (que equivalen a unos 150 euros) que el pequeño tendrá que liquidar. Allí tendrá que prescindir de las travesuras y juegos de niños y trabajar muy duro es un régimen de semiesclavitud soportando el olor a polvo, el calor y el dolor de sus pequeñas manos.

Gracias al BFLL (Frente de Liberación del Trabajo Forzado), un movimiento creado para tratar de erradicar el trabajo infantil, Iqbal logró salir de las condiciones en que se veía forzado a trabajar. Ellos pagaron su paishgee (que así es como se conoce al préstamo que le vincula al trabajo en la fábrica) y le ofrecieron la posibilidad de estudiar. De este modo Iqbal se convertiría en un símbolo contra la explotación infantil. A pesar de su corta edad, ya que no contaba con más de doce años, comenzó a ofrecer charlas y mítines en diversos lugares viajando incluso a Suecia o Estados Unidos intentando concienciar tanto a patronos como a trabajadores de la situación en que se encontraban muchos niños pakistaníes y darlo a conocer al mundo entero.

Nos os voy a engañar. Es una novela muy dura pero que te hace reflexionar y plantearte muchas cosas sobre el mundo en el que vivimos. Aquí en occidente consumimos a un ritmo desmesurado sin plantearnos de donde vienen todos estos objetos que nos gusta poseer, mirar y a los que tantas utilidades sacamos. Pero la realidad es que para que nosotros disfrutemos de muchos de ellos hay personas, con frecuencia niños, que trabajan un gran número de horas en condiciones deplorables y a cambio de un sueldo ínfimo que apenas les permite vivir. En este caso concreto nos habla de alfombras de una calidad extraordinaria que se venden en occidente a bajo precio pero lo mismo se puede aplicar a muchísimos productos. No nos planteamos el porqué de estos precios. A veces incluso porque ni siquiera pagamos poco por ellos. Ciertas empresas tienen enormes beneficios a costa de la vida humana, explotando y humillando a sus trabajadores.

La novela está relatada de forma muy original ya que son muchos los narradores que nos cuentan la historia de Iqbal a modo de testimonio y ofreciéndonos detalles sobre su relación con el joven. Desde sus padres, sus amigos u otros familiares que vivieron con él de forma cercana hasta otros personajes que lo conocieron de pasada. Cada uno de ellos aporta una pieza del puzle, un microrrelato que nos va formando la historia al completo. Durante su lectura me preguntaba si llegaría a conocer a Iqbal, si en algún momento aparecería su propia voz. Claro que esto no es posible porque la vida de Iqbal terminó de forma abrupta en 1995 cuando fue disparado y murió. En Pakistán, se convirtió en una figura peligrosa que había que silenciar. No interesaba escucharle.

A pesar de ello, la de Iqbal es una historia de superación. La de un niño travieso que reía constantemente y al que le gustaban las bromas. Un niño inconformista que siempre tuvo claro que había que luchar para conseguir aquello en lo que uno cree y que aprovechó las oportunidades que se ofrecían sacando el máximo partido de ellas. Un niño sin infancia que era muy maduro para su edad.  A su alrededor las distintas voces, que actúan como narradores, nos dan la cara y cruz de la moneda. Algunos en quienes las palabras de Iqbal recalan hondo, otros que no hacen más que mirar hacia otro lado a pesar de que conocen la realidda y otros que simplemente ven en él un pequeño delincuente.

Y Miguel Griot narra la historia de manera cercana, directa y sencilla de forma que no te cuesta nada meterte en el relato. Pero tiene frases que te dejan pensando y a las que se le puede sacar mucho partido. En cierto modo es una novela agridulce que te va deparando diversas emociones durante su lectura. Vemos como Iqbal se distrae y escapa de sus obligaciones como un niño cualquiera para pocas páginas después conocer el terrible castigo al que es sometido.

Conclusión

Iqbal Masih. Lágrimas, sorpresas y coraje es una novela dura que nos habla de las terribles condiciones en que viven muchos niños en Pakistán. Una novela que te proporciona las herramientas suficientes para hacerte reflexionar.