Autora: Kathy Kacer
Ilustración: Gillian Newland
Publicación: Picarona, mayo de 2016
Páginas: 40
Tamaño: 21,5 x 27,9 cm
Edad: +6 años
Nos
encontramos en la época de la Segunda Guerra Mundial, y Werner es un niño que
está solo en el campo de concentración de Auschwitz. Separado de su familia, no
tiene ningún amigo en el mundo. Comparte litera con un hombre callado llamado
Levin, alguien demasiado amable para un lugar tan terrible como aquél. Una
noche, a Werner lo despiertan los gritos de los guardias, pero no es él a quien
buscan sino al señor Levin. « ¡Haz magia!», le ordenan. ¿Magia? ¿En Auschwitz?
Mis impresiones
Pudiera parece que hay partes de la
historia que los niños no tienen la madurez suficiente para conocer por la
dureza que estas pueden representar como es el caso de todo lo ocurrido con los
judíos en el III Reich. Pero todo depende de la forma en que se lo expliquemos.
Quizás es mejor que cierta información llegue pronto y de forma sutil. Y con
este libro le he propuesto un primer acercamiento a mi hija a esta parte de la historia
que ella no conocía. Claro que este libro es completamente válido para los
adultos y nos sorprenderá también.
El
mago de Auschwitz nos narra, aunque parezca
mentira, una historia real y al final del libro la encontraremos al completo
con fotos reales de sus personajes, una información que he apreciado bastante
porque completa cosas que no se cuentan en ella. Esta la historia de un pequeño
llamado Werner Reich a quien un día sacaron de su casa y después de estar en
Terezin fue encerrado en Auschwitz. Allí tuvo que aprender a sobrevivir con lo
mínimo pero también conoció a un hombre muy especial. SE llamaba Levin y su número
de prisionero era el A1676.
Levin había sido un mago famoso que
había actuado en los locales más importantes de Berlín, aclamado y aplaudido por
todo el mundo hasta que fue detenido junto a su familia y enviado al campo de concentración.
Werner aprenderá una valiosa lección de
vida junto a mago.
Es cierto que El mago de Auschwitz puede resultar una novela un poco dura. Nos
habla de los barracones del campo de concentración, de la supervivencia, de la
escasez de comida, el trato de los guardias, de las noches frías y el miedo, el
trabajo duro, el hambre pero también es una bonita historia de amistad y apoyo
al prójimo llena de esperanza que llegó a condicionar la vida del pequeño
Werner. No solo en sentido negativo porque cuando salió del campo (fue unos de
los supervivientes del Holocausto) la magia siempre estuvo presente en su vida.
También es una historia que nos demuestra que el ser humano hasta en las peores
condiciones puede sacar su lado humano y ser amable con los demás.
El texto de la novela es de Kathy Kacer
y es algo más extenso que los libros que os suelo enseñar por lo que quizás es
recomendable para niños o bien que ya tengan cierta soltura en la lectura o
bien para aquellos que ya sean capaces de asimilar y seguir el hilo de una historia
larga. No porque está este narrada de forma compleja, porque resulta todo lo
contrario sino porque hasta cierta edad a los niños les cuesta retener un hilo.
Las ilustraciones las pone Gillian
Newland y son muy expresivas. No llegan a ser muy duras pero sí que se percibe
cierta tristeza ya que también son muy realistas. La autora ha optado por una
gama de grises difuminados en la que puntualmente mete un toque de color para
enfatizar ciertos elementos.
Creo que El mago de Auschwitz es un libro que gustará tanto a los más
pequños como a los adultos. Una historia dura pero real que todo el mundo tiene
que conocer.