Una de las novedades que más me ha llamado la atención últimamente es El lenguaje oculto de los libros por una sinopsis muy atractiva desde mi punto de vista. No leí la anterior novela del autor aunque me quedé con ganas de ella y después de leer esta seguirá ahí pendiente pero pasará a mi lista de prioridades.
La novela se desarrolla principalmente es dos líneas argumentales que se van desarrollando de forma simultánea.
En 1933 vamos a seguir los pasos de un escritor y profesor de universidad en dos lugares importantes para su vida. Bilbao es la ciudad de donde procede y en la que su familia, dedicada a la siderurgia, ha amasado una ingente fortuna de la que es heredero Gabriel de la Sota. Pero en Oxfordshire en donde ha encontrado la inspiración para escribir esa novela que durante años ha estado forjándose en su mente, la que será su obra cumbre. Sin embargo algo oscuro del pasado entraña un peligro en el presente.
Casi treinta años después, en Londres, Úrsula de la Sota, hija de Gabriel, contacta con el abogado Mark Wallace con un objetivo muy concreto. Que investigue sobre su familia y encuentre el tesoro de la familia del que todo el mundo habla. Wallace está a punto de jubilarse pero ante la jugosa oferta de la joven no puede negarse. Quizás pueda encontrar alguna pista en El señor del mal, lo último que escribió de la Sota antes de morir.
Este es el punto de partida de una novela que podríamos encuadrar dentro del thriller y que tiene muchos ingredientes para gustar y complacer a un amplio abanico de lectores. Misterio, aventuras, secretos y metaliteratura - y alguna cosa más- conforman una novela que se hace muy atractiva, entretenida y que desde el principio te atrapa con una escena inquietante que te pone un poco los pelos de punta.
Una de las bases de la novela es la eterna lucha entre el bien y el mal, muy característica en los thrillers. Ahora que el mal puede hacerse presente y ejecutarse de muchas maneras. No diré que sea una novela sobre fantasmas, porque no lo es, pero en ciertos momentos parece que hay algo demasiado poderoso como para que sea humano. Algo demasiado oscuro que sobrevuela y que transmite sensación de amenaza. Es una novela en la que pasan muchísimas cosas y que tiene acción.
Me ha gustado especialmente encontrar literatura dentro de la literatura. El señor del mal es la novela que escribe Gabriel de la Sota, uno de los protagonistas de la historia. Un libro que será muy importante en su desarrollo pero además nos encontramos datos o referencias sobre el proceso de escribir un libro, la forma en que una persona se enfrenta a ello y de como puede afectarle. Y también no puedo dejar de nombrar a dos personajes muy conocidos dentro del mundo literario Son C. S. Lewis y J.R. R. Tolkien, que supondrán una ayuda imprescindible para de la Sota. Además de un pequeño cameo de Unamuno que me ha hecho mucha gracia.
Esos personajes son los de la trama más antigua, la que se desarrolla en los años treinta entre las ciudades de Oxford y Bilbao. Dos lugares que poco tenían que ver en aquella época pero que de alguna manera imprimen su carácter a la novela. En la parte que desarrolla en 1961 me ha encantado como el autor recrea la época, sin desmerecer su trabajo en la otra, y como da vida a los personajes que se mueven en ella. Quizás algo más cercanos o al menos esa ha sido mi impresión como lectora. El caso es que todos ellos están bastante trabajados.
La novela está escrita con agilidad y fluidez y los constantes saltos entre las diferentes épocas y lugares hacen que se intensifique esa sensación de dinamismo. Por lo que se lee sin darte cuenta.
Como conclusión solo puedo decir que El lenguaje oculto de los libros es una novela que he disfrutado, me ha entretenido y me ha enganchado a su historia. Poco más se puede pedir a un libro que tiene muertes sospechosas, figuras extrañas, secretos, personajes muy atractivos y una parte, como ya he dicho, metaliteraria que se fundamente en la lucha entre el bien y el mal pero que además resalta valores como la verdad y la lealtad. Muy recomendable.
