Título: Cartas a una extraña
Autora: Mercedes Pinto
Publicación: Amazon Kindle, julio de 2015
Páginas: 349
Berta regresa a la casa familiar, donde nunca deseó volver, para hacerse cargo de la herencia de su madre, una mujer oscura y controladora que convirtió su infancia en un infierno. Asediada por los recuerdos, decide liberarse de los fantasmas del pasado desenredando la madeja de engaños de doña Alberta y su primogénita y devolviendo la libertad a su última víctima, cuyas cartas sin abrir, ocultas en el desván hasta que da con ellas, le llegan al corazón. Pero hay quienes no se alegran de la decisión de Berta y pronto se ve inmersa en un camino de trampas que puede hacer peligrar su vida.
Mis impresiones
Cartas a una extraña es la octava novela de Mercedes Pinto Maldonado. Después de haber leído cuatro de ellas lo que tengo claro es que para mí esta autora es un valor seguro por la forma de abordar y construir sus historias ya que nunca me ha decepcionado.
“Había muerto… Mi madre había abandonado el mundo hacía menos de cuarenta y ocho horas y no sentía nada, solo la incomodidad propia de saber que no era el mejor momento para viajar, y mucho menos a España, el último lugar que hubiera deseado visitar. Le habían dado sepultura esa misma mañana, los pésames estaban dados y los lutos habían vuelto al fondo del armario, mi única misión era hacerme cargo de sus bienes, ahora, la mitad míos.”
Después de quince años de ausencia en los que Berta había logrado reconstruir su vida y creía haber dejado atrás algunos fantasmas del pasado se ve obligada a volver a la casa donde pasó su desagradable infancia. Su madre acaba de morir y ante la negativa de su hermana de viajar es ella quien tiene que ocuparse de la herencia y las pertenencias de Doña Alberta, su progenitora y de quien nada había querido saber nada desde que decidiera romper toda relación con ella. Siempre fue una mujer fría y distante que le negó el afecto maternal relegando su cuidado a Teresa, la única persona de su pasado de quien guarda un buen recuerdo y con quien se reencontrará a su regreso a la casa familiar.
Berta lo único que pretende es arreglar todos los asuntos lo antes posible, sin pensar demasiado, sin darse tiempo a reabrir viejas heridas y regresar a la vida que tiene en Londres. Sin embargo, en los quince años que ella estuvo fuera ocurrieron muchas cosas y algunas demasiado turbias. Cuando encuentra en el desván un montón de cartas sin abrir la curiosidad le lleva a sumergirse en una historia inesperada, que le llevará a desvelar un terrible secreto que pondrá en peligro su propia vida y descubrirse a sí misma, a comprender que es posible que aún puede enamorarse.
Cartas a una extraña es una atractiva combinación de elementos que te atrapan desde el principio y cuya intriga te mantiene expectante durante toda la novela. Nos habla de secretos familiares, pasando por dos grandes historias de amor en las que Mercedes saca su lado más romántico y todo termina por converger en una historia con tintes policiales y de suspense en la que vamos a encontrar una intrincada red de mentiras, chantajes, desapariciones, ambiciones e incluso un asesinato…. Pero a mí lo que más me gusta de esta autora siempre son las emociones que desbordan sus novelas. En esta ocasión además de narrarnos historias de amor nos habla de complicadas relaciones entre madres e hijas que tal y como sucede en la vida real no siempre están marcadas por el amor y el cariño incondicional. También hay madres que se mantienen distantes con sus hijos o hijas, que no les ofrecen amor ni ternura ni suponen ese pilar básico que se espera de ellas.
Mercedes Pinto tiene la capacidad de meterte por completo en la piel de sus personajes de forma que puedes comprenderlos a la perfección. Sus motivaciones, sus miedos y pesares quedan perfectamente plasmados en la historia e incluso más de un lector podrá verse identificados en ellos. Será Berta el personaje central que mueva la historia y de quien conoceremos todas las emociones que convergen en ella. Es una mujer que desprecia a su madre y hermana y al cumplir los dieciocho años huyó a Londres, donde construyó una nueva vida. A pesar de que ella cree tenerlo todo olvidado los estigmas de ese pasado siguen marcados en su corazón. Pero ahora, a su regreso, siente la necesidad de saber, de desvelar las razones por las que su madre se comportó así con ella.
Teresa es quien se ocupó de cuidarla y darle todo aquello que su propia madre no quiso o supo darle. Su reencuentro es muy emotivo y le lleva a recordar lo mucho que hizo por ella en su infancia. Pero también a darse cuenta de la profunda lealtad que guardó a Doña Alberta durante toda su vida y que calla demasiadas cosas. ¿Esconderá algo Teresa? ¿Sabrá algo más de lo quiere contar? Otro personaje destacable en la novela es Saúl que aunque no llegaremos a conocerle en persona se convertirá en una figura destacable en la novela. No os cuento de qué forma ni el motivo. Seréis vosotros mismos los que tendréis que descubrirlo leyendo la novela.
Como siempre y como motivo más que suficiente para leer Cartas a una extraña nos encontramos con una forma de narrar maravillosa. Un estilo íntimo, elegante y envolvente que te atrapa desde las primeras páginas. La historia está relatada a través de dos voces en primera persona. Una de ellas es Berta que nos va narrando todo lo sucede a su alrededor en forma de diario personal con un claro carácter introspectivo de forma que en cada momento sabemos que emociones y pensamientos dominan al personaje. Cada capítulo está fechado entre el 11 y el 30 de junio, el intervalo de tiempo en que transcurre la historia. El otro narrador es el autor de las cartas (cuya identidad no he querido ni voy a revelar) y que desarrolla prácticamente una segunda historia dentro de la principal. Esta comienza en el año 2002 para llegar prácticamente hasta el momento actual.
Me gustaría hacer un inciso sobre su final. Aunque existen algunos interrogantes que son desvelados en el desenlace de la misma también quedan suficientes cuestiones en el aire como para que me hagan intuir que pueda existir una continuación a la historia. En caso de que esta no exista me quedo con la sensación de que la historia esta incompleta, de que me faltan algunas cosas para llegar al fondo del personaje.
Conclusión
Tal y como esperaba Cartas a una extraña no me ha decepcionado y he podido disfrutar de una lectura que tiene intriga y misterio y que es perfectamente compatible con un lado emocional donde el amor y las emociones están a flor de piel.
