Título: Dime quien soy
Autora: Julia Navarro
Publicación: Debolsillo, octubre de 2013
Páginas: 1097
Un periodista recibe la propuesta de investigar la vida de su bisabuela, Amelia Garayoa, una mujer de la que sólo sabe que huyó abandonando a su marido y a su hijo poco antes de que estallara la guerra civil española. Para rescatarla del olvido deberá reconstruir su historia desde los cimientos, encajando, una a una, todas las piezas del inmenso y extraordinario puzle de su vida.
Marcada por cuatro hombres que la cambiarán para siempre, la historia de Amelia es la de una antiheroína presa de sus propias contradicciones que cometerá errores que no terminará nunca de pagar y que acabará sufriendo, en carne propia, el azote despiadado tanto del nazismo como de la dictadura soviética. Dime quién soy es una novela que rebosa intriga, política, espionaje, amor y traición. Desde los años de la Segunda República española hasta la caída del Muro de Berlín, pasando por la Segunda Guerra Mundial y la Guerra Fría, constituye un apasionante retrato del siglo XX.
Mi experiencia con la novela
Voy a comenzar diciendo que Dime quien soy es una novela que en cierto modo me ha gustado, que me ha enganchado a una parte de su historia pero también que en la que he encontrado algunos aspectos que no me han convencido en absoluto, en referenciates sobre todo a su construcción. Me ha parecido una historia que entretiene con algunos elementos interesantes pero que falla tanto en consistencia como en credibilidad. Parece que en este párrafo concurro en una contradicción pero intentaré explicarlo a través de esta reseña.
Este es mi primer acercamiento a una autora cuya temática de sus libros siempre me ha llamado poco la atención pero en esta ocasión un personaje femenino con mucho carácter y un contexto histórico interesante me incitaron a leerla. Parece que esta obra se aleja un poco de lo que ha sido hasta ese momento el trabajo de Julia Navarro asentándose este nuevo estilo con su última publicación (Dispara, yo ya estoy muerto).
La historia comienza en la actualidad cuando Guillermo Albi, un periodista sin demasiado éxito laboral que escribe críticas literarias en una revista digital, recibe un encargo de su tía pagado de forma colosal. Se trata de investigar la vida de Amelia Garayoa, su bisabuela, una mujer de la que muy poco se sabe en su familia desde que abandonara a su marido y su hijo poco antes de que estallara la guerra civil española.
De esta forma y a medida que Guillermo va avanzando en su investigación nos adentramos en la vida de Amelia, una mujer fuerte y con un carácter muy decidido que supo romper con todas las convenciones sociales, abandonar una familia adinerada, vivir persiguiendo unos ideales y marcada por el amor de cuatro hombres muy diferentes. Mientras el mundo, cambiaba de forma continua a lo largo del siglo XX.
La historia está dividida en dos líneas argumentales. En una de ellas acompañamos a Guillermo paso a paso en la investigación a través de la cual intentará reconstruir la vida de su bisabuela. Para ello hablará con distintas personas y se verá obligado a viajar a diferentes lugares del mundo donde obtener información. El problema que he encontrado en esta es que me ha parecido totalmente prescindible pues sólo es la excusa para desarrollar la siguiente. Ya que no aporta ningún elemento atractivo y sólo sirve para ir hilvanando la historia incluso me ha llegado a irritar en algunos tramos que alargan innecesariamente una novela que cuenta con más de mil páginas. Si Julia quería contar la historia de Amelia porque no hacerlo directamente. Además este personaje accede a la información de forma demasiado fácil (con una simple guía telefónica) y me ha resultado muy difícil creerme que los personajes con quien habla después de tantos años puedan contar la historia con todo lujo de detalles, reproduciendo escenas y diálogos muy concretos incluso sin haber estado presentes en ellos.
La segunda línea argumental es la que se desarrolla en el pasado comenzando a hablarnos de su verdadera protagonista, Amalia, una burguesa que lo tenía todo y lo abandonó siguiendo sus creencias para experimentar una vida plagada de aventuras y desventuras, de amores y odios, de alegrías y tristeza. Poco a poco irá perdiendo esa inocencia debido a los numerosos y continuos desengaños que va sufriendo en su vida y en diversas facetas. Es una mujer muy humana que se equivoca, se contradice, comprometida con lo que la rodea, que cae una y mil veces pero vuelve a levantarse gracias a su fuerza interior. El amor también será fundamental en su vida marcado por distintos hombres como son Santiago, Pierre, Max Y Friedrich que de alguna manera le van marcando el camino. Esta es la parte del libro que si me ha gustado, me ha interesado y ha hecho que continuara su lectura.
Respecto a los personajes he encontrado un claro desequilibrio entre los aquellos que encontramos en la narración pasada y los que aparecen en la actualidad siendo estos últimos ligeros bocetos y una mera excusa para desarrollar los anteriores. Guillermo me ha parecido un personaje totalmente plano e incluso infantil en muchos momentos, actitud que comparte con otros protagonistas de forma que al final parecen poco más que caricaturas. En cambio tanto la propia Amelia, un personaje lleno de matices que evoluciona ostensiblemente a lo largo de la historia, como los que la rodean han sido dibujados con mayor acierto, desarrollando una función muy concreta que el lector es capaz de situar.
La novela está narrada con mucho dinamismo, agilidad y sencillez, con una narración plagada de diálogos y acción. La historia, estructurada en seis partes divididas a su vez en capítulos, cuenta con dos narradores. Una voz en tercera persona que sigue a Guillermo en su investigación y la otra para recomponer la historia de Amelia de boca de multitud de narradores distintos que van desgranando aquellos acontecimientos que marcaron su vida. Como os he dicho ya no me ha parecido acertado este enfoque que da a la novela ya que la información resulta demasiado precisa para ser originada a través de la memoria.
La novela pretende abarcar un periodo histórico demasiado amplio de forma que se dan demasiados sucesos desde los años veinte hasta finales de la década de los noventa. Ello incluye la Guerra Civil Española, la posguerra y la Segunda Guerra Mundial entre otros viviendo en diferentes regímenes como el franquismo, el nazismo, el fascismo, el comunismo con algunos personajes decisivos en cada uno de estos periodos como Franco, Hitler, Mussolini o Stalin. Este es el aspecto más interesante de la novela y en el que se nota que Julia Navarro ha trabajado de forma concienzuda.
Para completar la vida de su abuela Guillermo deberá comenzar una serie de viajes que le llevarán a Barcelona, Francia, Argentina, Rusia, Londres o Roma entre otros lugares. En cada uno de ellos irá obteniendo fragmentos del puzle que debe completar. Como he dicho antes todas estas idas y venidas, los constantes viajes, los diferentes personajes que narran me han llegado a irritar y cansar al ser un formato que se repite de forma constante.
Respecto a su final, a pesar de que la autora ha pretendido ofrecer un interesante giro argumental al lector a través de una revelación importante en mi caso tal cosa no ha sucedido porque ya fue en la página ciento cuarenta y uno (de las más de mil que tiene) cuanto lo tuve claro e identifiqué perfectamente a donde quería llegar la autora.
Ante el tamaño de la novela es inevitable que me quede algunos aspectos por comentar pues la reseña tendría una longitud enorme. He decidido plantarme en aquellos que de alguna forma sobresalen y le dan mayor carácter a la misma.
Conclusión
Dime quien soy es un libro entretenido pero al que en mi opinión le sobra una de las tramas y con ello muchas páginas. La historia de Amelia me ha enganchado a su lectura pero he tenido que hacer un esfuerzo para compensar las pérdidas de ritmo que la trama que protagoniza Guillermo causa en la historia. Me quedo con la sensación de que una novela de tal longitud no se puede permitir tantos defectos como son la poca consistencia de algunos de sus personajes, la escasa credibilidad de la historia y la repetición constante de una misma fórmula.