Título: Efectos secundarios
Autora: Almudena Solana
Publicación: Planeta, mayo de 2013
Páginas: 274
Los diez
medicamentos más vendidos se convierten en personajes reales; diez vidas que
avanzan individualmente mientras se van entrelazando, poco a poco, hacia un
final común. Adiro, Orfidal, Nolotil, Voltarén, Sintrom, Augmentine o Lexatín,
entre otros, cobran vida en esta novela inteligente llena de ironía y de
suspense. El amor, las relaciones, el sexo, los sueños no cumplidos, el olvido
o la vejez son las otras circunstancias que conviven con el interior de los
prospectos.
Estos prospectos han inspirado la nueva novela de Almudena Solana, quien, con su fresco y personal estilo narrativo, cuida al máximo cada frase sin dejar ninguna palabra al azar. Una auténtica radiografía de la vida actual a través de los medicamentos más consumidos.
Estos prospectos han inspirado la nueva novela de Almudena Solana, quien, con su fresco y personal estilo narrativo, cuida al máximo cada frase sin dejar ninguna palabra al azar. Una auténtica radiografía de la vida actual a través de los medicamentos más consumidos.
Mi experiencia con
la novela
Efectos secundarios
es una novela con un planteamiento muy original que te sorprende pero que
también te hace reflexionar. Dice en la página 97 que “Los medicamentos más consumidos son una radiografía de nuestra sociedad”
y está es la base sobre la que se fundamenta la novela. En todos los hogares
hay medicamentos, ellos representan nuestras dolencias y son una parte más de
nuestra vida, productos de consumo variables entre unos y otros pero ¿Pueden
representar también lo que somos o nuestro estilo de vida? ¿Esperamos que
resulten milagrosos y solucionen nuestros problemas? ¿Nos aferramos a ellos con
demasiada insistencia?
En ella, Almudena Solana, convierte los diez medicamentos
más vendidos en los personajes que protagonizan sus historias. Son Nototil,
Parecetamol, Lexatin, Voltaren y Paracetamol entre otros. Podría parecer
esta una novela coral pero tal cosa no es cierta, porque este libro es un
compendio de distintas vidas, de rutinas diarias, de diferentes formas de ver
el mundo y diferentes interpretaciones de conceptos parecidos. Diez personas
distintas cuyas vidas se entrelazan formando un mosaico con diversas piezas.
Será Germán, que representa Sintrom, un policía nacional
que a partir de la resolución de un atraco en la farmacia comienza a observar de
forma minuciosa a sus clientes y a partir de que establece con el farmacéutico
una relación de amistad comienza a conocer al resto. Así nos va hablando de
ellos y nosotros conociéndolos. Sus vidas se cruzan y sus distintas relaciones
con los medicamentos los van definiendo.
Adiro es una ejecutiva muy profesional que debido a su
capacidad para detectar las mentiras lleva una vida social escasa. Nolotil,
antiguo novio de Adiro con quien estuvo a punto de casarse es un médico que no
sabe decir que no. Viscofresh, hermana de German, es una azafata casada y con
dos hijos muy preocupada por la enfermedad de su madre. Augmentine, olfateadora
de tendencias en Zara acaba de quedarse embarazada de forma inesperada y su
marido Lexatin, periodista del Marca está obsesionado con su jefe. El padre de
Augmentine es Voltarén, que a pesar de ser un octogenario tiene problemas con
el alcohol. Orfidal, el mejor amigo de Lexatin, tiene celos de Agumentine. Ventolín
es una saxofonista holandesa que se afincó en Madrid.
Todas estas personas comenzaron a tomar los medicamentos
por una razón muy concreta. Bien sea para eliminar un dolor físico o mental,
por una enfermedad o un estado de ánimo.
Algunos no les hacen demasiado caso, para otros son la panacea en su
vida. El caso es que condicionan su vida
como las contraindicaciones y determinan sus relaciones sociales. Los
síntomas han dejado de ser un reflejo de una simple dolencia, de sus miedos,
para convertirse en una forma de vida que no se entiende sin la mediación. Hay
personas que sólo saben deshacerse de las molestias con dinero, que cambian a raíz
de su consumo y que se vuelven dependientes. Detrás de los prospectos hay vidas
y son las de estos personajes.
Quizás me ha faltado un poco de profundidad a la hora de
definir a estos personajes que la autora orienta más a conocer como es su vida
que como son ellos mismos. Es cierto que en muchas ocasiones nuestra rutina
puede definirlos pero creo que podrían haber dado un poco más de sí.
Como punto de encuentro de todos ellos está la farmacia a
la que acuden de forma rutinaria. Un farmacia cualquiera de un barrio de Madrid
en la que, por supuesto, no podía falta la figura del farmacéutico, ese al que
acudimos en busca de consejos, que nos resuelve las dudas y la persona que
conoce nuestros dolores o usos.
La novela está narrada en primera persona, desde el punto
de vista de Germán pero focalizando la acción en los distintos personajes. Es
decir, es Germán quien se dirige a nosotros para hablarnos de los demás con
constantes guiños al lector. A pesar de ser una voz que debería representar una
visión muy limitada y subjetiva, es capaz de contarnos distintas intimidades,
incluso pensamientos o sentimientos de los protagonistas que desde fuera sería
imposible conocer. Y no he sabido interpretar muy bien este aspecto.
Cada capítulo está dedicado a uno de los personajes de
los que nos cuenta recogiendo sus particularidades, su estilo de vida y como
llegó el medicamento en cuestión a su rutina. Aunque la novela me ha parecido
entretenida, curiosa y fácil de leer me ha faltado una línea argumental definida
que seguir o una a los personajes en ella. Prácticamente no existe un argumento
que he estado buscando hasta terminar la novela y no he llegado a encontrar. Si
es cierto que los personajes se van solapando unos con otros a través de las
relaciones que los unen, ya sean familiares, amistosas o laborales pero no
justifica del todo la coherencia global que toda novela ha de tener. Hasta el
punto en que me planteo si la misma podría ser calificada como un libro de
relatos cortos unidos bajo una temática común.
Hay que reconocer que Almudena solana ha abordado la
novela con un estilo muy acertado. Ágil, ameno, con un pizca de humor,
intercalando narración y diálogos en su justa medida y consiguiendo un ritmo
que invita a su lectura y engancha al lector.
Amor, celos, enfermedad, trabajo, miedos, amistad, mentiras,
dolor son los ejes alrededor de los cuales gira esta novela y que nos hablan de
los efectos secundarios que traza el destino en nuestros prospectos.
Conclusión
Efectos secundarios es una novela con un planteamiento
novedoso y original que con agilidad y de forma amena nos constituye la
radiografía de una sociedad a través de los medicamentos más consumidos.