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viernes, 12 de enero de 2018

El aroma del miedo - Armando Rodera



Título: El aroma del miedo
Autor: Armando Rodera
Publicación: Amazon Publishing, septiembre de 2017
Páginas: 496

Meses después de su último gran operativo, el inspector Bermejo deberá enfrentarse a una doble misión en Valencia: descubrir al causante de los misteriosos asesinatos de mujeres ocurridos en la región y acabar con una trama de corrupción en la que se ven involucrados algunos miembros de la Policía.

Por su parte, tras una excedencia, el sargento Roncero regresa a España junto a la periodista Miriam Monfort y recibe el encargo de colaborar en una importante operación de la Guardia Civil contra el tráfico de personas en la zona levantina.

Un macabro hallazgo en el puerto de Valencia los situará tras la pista de un empresario ruso con conexiones al más alto nivel. La presencia de mafias internacionales en la zona pondrá en jaque a los investigadores, envueltos en una trama cada vez más compleja, repleta de peligrosas ramificaciones.

Un thriller en el que los protagonistas deberán enfrentarse al lado más oscuro del ser humano y luchar encarnizadamente por sus vidas.

Mis impresiones

Es mi primer acercamiento al trabajo de Armando Rodera y creo que es necesario decir que quizás no sea la novela que más me atraía dentro de las que tiene escritas. Esta es una de las reseñas difíciles que una tiene que escribir de vez en cuando porque es complicado diferenciar si es que el tema no era del todo para mí o es la propia novela la que no me ha acabado de convencer.

Este volumen está protagonizado por personajes que ya aparecieron en una novela precedente titulada El color de la maldad, la cual no he leído. Por ello no puedo comparar entre una y otra ni sé muy bien si es necesario leerlas en orden o no. Aunque yo al menos no he echado nada en falta.

“Ya no le quedaban lágrimas. El hedor de la muerte le inundaba las fosas nasales y una sombra siniestra se había cernido sobre ella, un aura tenebrosa que sobrevolaba su cabeza como un vulgar buitre carroñero a la espera de que la joven exhalara el último suspiro. A Olena le fallaban las fuerzas. Su organismo se encontraba al borde del colapso y sus escasas esperanzas se desvanecían tras tantos días de infortunio.”

La novela arranca en el puerto de Valencia en 2015 cuando varias chicas son encontradas en un contenedor. Después de varios días encerradas sin agua y en condiciones inhumanas solo una de ellas sobrevive. Esto es solo la punta del iceberg para una banda organizada que se dedica a comerciar con mujeres para prostituirlas.

Mientras el inspector de la policía Francisco Bermejo quien se ocupe de investigar unas muertes que parecen indicar que un asesino en serie anda suelto por la zona y que está obsesionado con las mujeres.

Por otro lado Pablo Roncero, sargento de la Guardia Civil, está pasando unas vacaciones junto a su pareja Miriam en la costa alicantina. Ambos necesitan sobreponerse a lo ocurrido algunos meses atrás. Fue un caso que les dejó tocados psicológicamente (y que es narrado en El color de la maldad), cuando recibe una llamada de su comandante para que intervenga en la investigación de un oscuro caso que se está produciendo en la zona y que tiene que ver con mafias y drogas.

El color de la maldad es un thriller policial en el que seguiremos un caso de corrupción, comercio de personas, drogas y dinero ambientado en la Comunidad Valenciana. No solo intervendrán en el delito los que suelen ser los criminales, sino que en esta ocasión engloba a personalidades importantes del gobierno e incluso a la policía. En ella se van desarrollando dos tramas que aunque relacionadas discurren por diferentes caminos.

La verdad es que creo que por su trama esta novela no era del todo para mí. No estoy diciendo que sea una mala novela si no que a mí el tema del tráfico de personas y la corrupción no llega a llamarme del todo la atención.  Y si bien es cierto que la he leído y no me ha costado esfuerzo también es verdad que no he estado realmente enganchada a su trama. Pero como os digo creo que ha sido cuestión de gustos personales.

Otro hecho que también creo que me ha pasado factura es que me he encontrado demasiadas tramas y personajes diferentes que de repente aparecen y que en alguna ocasión me han despistado con nombres que me costaba recordar y ubicar más tarde.

Con respecto a los personajes me ha parecido que funcionan bien en la historia y que están bien construidos, cada uno en su lugar. Primero comienzan a trabajar por separado hasta llegar a un punto en que tienen que colaborar haciéndonos participes de los pormenores de la colaboración de los diferentes cuerpos de seguridad.

Bermejo es un inspector con una larga trayectoria en su carrera y mucha experiencia al que le ronda por la cabeza la jubilación. Puede ser que por ello percibamos cierto cansancio en el personaje. Roncero es psicólogo y sargento de la Guardia Civil. En el momento en que comienza la novela está muy tocado por el caso anterior y aun recuperándose de ello tendrá que volver al trabajo por necesidad. Un tercer personaje que aún no he nombrado en Miriam Monfort, un periodista, muy bella y muy descarada, que también estuvo implicada en el caso anterior y a través de la cual en esta novela se hace un guiño a la anterior.

Un personaje del que seguiremos sus andanzas hasta el final, aunque sin conocer su verdadera identidad estará del lado oscuro. Me gusta este tipo de detalles porque nos dan una visión más amplia de estos personajes sin llegar al final con un nombre y una razón. No, aquí las vamos conociendo paulatinamente.

Con respecto al estilo narrativo, Armando Rodera utiliza una prosa directa, fluida y ágil, aunque a mí me ha dado la sensación de que los diálogos están un poco impostados. Me ha faltado naturalidad en ellos. Y otro aspecto a comentar es en ella confluyen demasiadas tramas, que es posible que para cualquier otro lector resulten muy interesantes, pero para mí ha sido excesivo. Pero he de reconocer la dificultad de desarrollarlas y llevarlas ambas a buen puerto como hace. Se nota que hay trabajo detrás. Su ritmo me ha parecido un tanto irregular. Hay momentos en que predomina la acción y otros en los que la novela se ralentiza bastante.  

Conclusión

El aroma del miedo no ha sido una lectura para mí. Reconozco el trabajo del autor pero sin embargo a mí ha sido una historia que por gustos personales no he disfrutado del todo.