Me quedo aquí es la segunda novela, y Premio Strega 2019
del profesor y escritor italiano Marco Balzano. Publicada por Duomo la novela
ha salido a la venta la semana pasada. Y es la novela de la que hoy os voy a
hablar.
Una mujer comienza a contarle una historia a su hija. Es
su propia historia. La de su nacimiento y la de su desaparición. Los recuerdos
de Trina, la narradora, se remontan al año 1923 cuando el Tirol del Sur estaba
dominado por el régimen fascista. La mano de Mussolini se había cernido con
dureza y la población vivía con grandes exigencias, entre ellas que hablaran el
italiano renunciando a su propia lengua.
Trina ha terminado sus estudios y está deseando ejercer
como maestra, pero como domina el idioma nadie la quiere contratar. Al final termina
dando clases de forma clandestina con ayuda del cura del pueblo y se casa con
Erich. De la relación nace una niña que desaparece una noche con unos
familiares. Nadie sabe si se ha ido de forma voluntaria o ha sido forzada a marcharse…
Me quedo aquí tiene un contenido que me ha resultado
interesante. Ya sabéis que el periodo de la II Guerra Mundial siempre me parece
atractivo y no me canso de leer como se vivió en diferentes países y distintas
personas. Si que es verdad que hasta ahí no es demasiado innovadora o diferente
a lo leído hasta ahora.
Sin embargo me ha gustado más la historia que entreteje
el autor más allá del conflicto bélico y que parece ser que ha sido el punto de
partida de la misma. Al final es la historia que realmente quiere contar: la
muerte de un pequeño pueblo llamado Curón. La novela nos hará testigos de sus
últimos treinta años de vida. Primero castigado duramente por cuestiones políticas.
Y es que en las primeras décadas del siglo veinte fue separado de Austria y
anexionado a Italia con todo lo que ello conlleva. Tras la llegada de Hitler
comenzaron allí los primeros atentados terroristas. Y en segundo lugar el
embalse que sepultó todos los edificios bajo el agua. Solamente quedó a la
vista su campanario.
A parte de este aspecto tan histórico que tiene la novela
y que desde mi perspectiva es su punto fuerte, también tenemos una parte de
ficción, la que viven sus personajes. Se trata de una novela corta en la que no
hay mucho desarrollo de sus personajes. Para mi han resultado algo ajenos y no
he empatizado mucho con ellos. La protagonista es Trina una mujer que me ha transmitido
cierta indiferencia. No he llegado a cogerle del todo el punto. Es una joven que
desea ser maestra pero el régimen le impide dedicarse a ello. Es cierto que se arriesga a hacerlo en
la clandestinidad pero no le he visto ningún objetivo concreto con ello. No he
comprendido su motivación. Si era por afán personal, por rebeldía, por dinero o
por generosidad con los demás. Tampoco
he sentido realmente la tensión del peligro que se supone que vive. El peor
momento llegará para ella con la desaparición de su hija y tampoco ha logrado
conmoverme esta ausencia.
Y el resto de los personajes vivirán un poco las
consecuencias de las circunstancias. Los rigores y horrores de la guerra, las
mujeres solas cuidando sus casas y sus hijos, los hombres en el frente o
escondidos para no luchar a las que se suma el hecho de perder su hogar. Sus
casas van a ser inundadas. Un proyecto ordenado por el régimen de Mussolini
pero que hasta el último momento no llegan a creer que vaya a suceder.
Todo esto está narrado con una prosa elegante y firme. Algo
cadenciosa pero en absoluto lenta o aburrida. Yo creo que Balzano ha
desarrollado muy bien la historia a pesar de que no he visto sus personajes tan
bien modelados.
En definitiva, recomiendo Me quedo aquí para aquellos amantes de la historia, para quienes
les guste conocer sucesos y hechos producidos en diversas partes del mundo.
Para mí no será el libro del año pero si una lectura bastante realista,
interesante y a la par entretenida.