Título: Mujeres
excelentes
Autora: Barbara Pym
Publicación: Gatopardo
ediciones, junio de 2016
Páginas: 320
Mujeres excelentes está
considerada una de las mejores novelas de Barbara Pym. Mildred Lathbury,
la narradora, es una mujer soltera que vive en Londres y ocupa su
tiempo en diversas tareas en la parroquia, en tomar el té con las amigas,
en obras de caridad y en satisfacer las necesidades de los demás. Es
inteligente y observadora, pero también tímida e insegura, en parte
debido a su soltería, pues muchos querrían verla casada ya a sus
treinta y pocos años. Además de sus buenos amigos, el vicario Julian
Malory y su hermana Winifred,
Mildred intimará con sus vecinos, los Napier, recién instalados en el
piso de abajo de su casa. Conocerá también a Allegra, una viuda que
se aloja en la parroquia, y a un sinfín de personajes más. Mildred se verá
implicada en diversos asuntos de índole sentimental.
Con una extraordinaria y sutilísima ironía, Barbara Pym traza en Mujeres excelentes un espléndido
retrato sobre la cotidiana realidad de unos personajes, cuyas vidas
se debaten entre sus sentimientos y sus convencionalismos.
En 1977, en un artículo-encuesta en el suplemento cultural del Times, el crítico lord David Cecil y el poeta Philip Larkin afirmaron que la obra de Barbara Pym era una de las más importantes e influyentes de la literatura inglesa de la segunda mitad del siglo xx.
Mis impresiones
Uno de los libros que me han acompañado
durante las vacaciones ha sido Mujeres
excelentes de Barbara Pym. Tenía muchas ganas de leer a esta autora inglesa
por el gran número de recomendaciones y opiniones positivas que he recibido de
ella. No obstante está considerada una de las escritoras inglesas más importantes
de la segunda mitad del siglo XX, la época en que desarrolló plenamente su
carrera literaria.
“- ¡Ah, las
mujeres! ¡Ahí están ellas siempre que pasa algo!
La voz era del
señor Mallet, uno de los mayordomos de nuestra iglesia, y su tono picaresco me
produjo un sobresalto de culpabilidad, casi como si no tuviera derecho a que me
vieran fuera de la puerta de mi casa. “
Mildred Lathbury es una mujer de treinta años
que trabaja como asistente de ancianos y vive sola en un pequeño apartamento de
una zona humilde de Londres desde que su padre murió dejándola sola. A su edad
ya se le puede considerar una “solterona” y
aunque ella se siente bien tal y como está tampoco descarta que un día
llegue a casarse. El tiempo que pasa fuera de su horario laboral lo dedica,
entre otras cosas, a colaborar de forma desinteresada en labores de la beneficencia
que realiza la parroquia a la que acude con asiduidad. El padre Julian Malory y
su hermana Winifred se pueden considerar sus amigos y las personas que mejor la
conocen.
Un día sin embargo se instalan en el edificio
donde ella vive unos nuevos vecinos. Son los Napier, una pareja algo atípica
con quien Mildred establecerá una relación de amistad. Casi al mismo tiempo
llega la señora Allegra Gray, una viuda aún joven que encontrará su hogar en la
casa parroquial. Estas presencias trastocarán la tranquila y organizada vida de
la protagonista.
Mujeres excelentes es una obra que
no dudaría recomendar a cualquier persona que se sienta atraía por la
literatura inglesa. La historia está llena ideas interesantes, de frases
inteligentes además de una crítica muy sutil a la sociedad del momento en que
se desarrolla. Me ha encantado como la autora toca ciertos temas, con sentido
del humor y ofreciendo una imagen fresca y atractiva a pesar de que la novela
fue escrita en 1952. Las relaciones matrimoniales, el compromiso entre dos
personas como evento social, la soltería o como nos influyen los demás son
algunos de estos temas. En ella además de encontrarnos la historia de Mildred y
sus cotidianidades vamos a descubrir un aspecto costumbrista que nos detallará como
se desarrollaba la vida en el Londres de posguerra.
“- Pero mi
querida Mildred, tú no debes casarte – me dijo, indignado-. La vida ya es
bastante complicada sin esas ocurrencias alarmantes. Siempre te he considerado
muy equilibrada y sensata, una mujer excelente. Espero que no estarás pensando
en casarte, ¿verdad?”
(Página 89)
Podemos considerar que Mujeres excelentes es una novela de personajes y estos, en mi
opinión, son muy buenos porque resultan atractivos y carismáticos de diferentes
formas. Ya la propia protagonista es una “mujer excelente” que cuando no se
encuentra trabajando lo dedica a hacer obras de caridad, a tomar el té con
otras mujeres o sacrificar su tiempo para ayudar a los demás (Mildred siempre
está a punto para preparar una taza de té en momentos clave). Una mujer que los
demás podrían considerar que no tiene vida propia, que le sobra el tiempo simplemente
por el hecho de no estar casada o tener una familia a la que atender. Aunque algunos se empeñan en querer casarla,
debido a que ya tiene la edad en que se considera que una mujer debe estar
casada, ella se considera afortunada de disfrutar de la vida que lleva. Es
cierto que a veces se deja llevar por ideas románticas y se imagina como una
esposa pero lo cierto es que no es una necesidad para ella.
Los Napier, Helena y Rocky, sin embargo son
dos personas que revolucionarán el mundo de Mildred ya que no representan
ninguno de los cánones habituales de la sociedad. Ella es una mujer culta que
dedicada en cuerpo y alma a sus estudios e investigaciones sobre la
antropología, su gran pasión. En detrimento se encuentran las cuestiones
típicas del hogar que por cierto no se le dan nada bien. Rocky (que está en la
Marina y acaba de llegar de Italia) es un hombre atractivo al que le encanta
adular e intimar con el sexo femenino. Como personajes importantes también
tendremos a los Malory. Julian el párroco de la iglesia y su hermana Winifred
que también están solteros y muy unidos a nuestra protagonista. O la señora
Gray, una viuda alegre con las ideas muy claras. También existen otros
personajes con poco peso en la historia pero cuyas voces en la novela si lo
tienen. Así sus comentarios ejercen sobre personajes y situaciones cierta
presión social.
La novela está narrada en primera persona por
Mildred, su protagonista y lo cierto es que a lo largo de la novela es
inevitable cogerle cariño. Es una mujer curiosa, decidida y con un carácter
altruista, siempre dispuesta a ayudar a los demás. Algo que le meterá en alguna
que otra situación que la desbordará y comprometerá seriamente sus buenas
intenciones con los demás.
Mujeres excelentes está muy bien
narrada y es un gusto leer a Barbara Pym. La aportación de ideas geniales, el
sarcasmo, el fino sentido del humor hacen de esta novela una excelente opción
de lectura. Además de esa frescura que comentaba antes también es un novela que
se lee con agilidad a pesar de lo muy
cuidadas que están sus formas. Y aunque no es una novela que nos lleve por
grandes sucesos en su trama te atrapa en su historia y no puedes parar de leer.
Conclusión
Creo que a estas alturas ya os habréis dado
cuenta que me ha encantado leer Mujeres
excelentes y en el futuro espero reencontrarme con la autora. Una novela
que se lee de forma tremendamente gustosa y que te hace disfrutar de unos
cuantos ratitos agradables.
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