Título: El
sombrero de Bruno
Autor: Canizales
Publicación:
Beascoa, noviembre de 2016
Páginas: 29
Edad: + 7 años
Ficha en Boolino
Bruno y Pedro son
grandes amigos y comparten muchos momentos juntos: van al cine, juegan al
fútbol, hacen los deberes...
Pero todo cambia
cuando Sergio empieza a burlarse de Bruno por su sombrero. Por miedo a no ser
aceptado por el grupo, Pedro se aleja de Bruno y dejan de ser amigos.
Cuando la madre de
Pedro se entera, le hará comprender que los amigos están para pasar buenos
momentos pero también para ayudarse cuando tienen problemas.
Mis impresiones
El álbum que hoy os traigo a la sección infantil de blog
ha sido el Ganador del Premio Boolino de álbum ilustrado este mismo año. Y la
verdad es que en él he encontrado motivos suficientes que explican el porqué de
este premio. Creo que es una obra que merece la pena tener en los estantes de
los más pequeños y estoy segura que ellos sabrán apreciarlo.
La historia es narrada por Pedro que es el mejor amigo de
Bruno. Los dos niños siempre estaban juntos y a Pedro nunca le había importado
ese sombrero tan raro que Bruno llevaba y le hacía diferente a los demás.
Jugaban al Superespacionautas, al futbol, a buscar tesoros, iban al cine o hacían
los deberes. Cualquier plan era bueno.
Sin embargo cuando un día repentinamente Sergio, otro
chico, empezó a reírse y meterse con Bruno por su sombrero, Pedro decidió que
lo mejor era distanciarse de Bruno. No quería que dijeran que él también era un
rarillo y que se metieran con él. Así
dejó de cogerle el teléfono a Bruno, de pasar tiempo con él e incluso de
hablarle. Pero cuando la madre de Pedro se enteró de lo que había pasado…
El sombrero de
Bruno toca un tema muy de actualidad y que a la vez resulta peligroso: el
ascoso escolar. No es que sea algo nuevo pero sí que se ha convertido quizás en
algo más frecuente. Por lo que lo mejor es hablar con los niños y explicárselo.
Y me ha gustado mucho la perspectiva que el autor ha escogido para tratarla
porque el narrador no es el niño que sufre el bulling sino uno amigo de este
que decide alejarse de él para no sufrir las mismas consecuencias que su amigo.
Los niños que sufren acoso suelen estar solos y nadie quiere relacionarse con
ellos por miedo a las consecuencias.
La historia es un canto a la diversificación, a la
aceptación de los demás como son y por supuesto de la amistad. A los acosadores
no hay que darles tregua y si no encuentran apoyo (que este también puede venir
dado de la pasividad ante su comportamiento) en los demás su juego no tiene
ningún efecto. Hay que concienciar a los niños de que estas situaciones no
deben permitirse, hay que alentarlos a hablar y comunicárselo a padres o
profesores.
Canizales ha reflejado la peculiaridad del personaje a
través de un sombrero pero en esta historia solo es algo metafórico que puede
convertirse en cualquier característica. El texto es ameno y muy claro de
entender aunque está enfocado a niños de a partir de siete años de edad. Las ilustraciones
también son obra del mismo autor en las que hacen un alarde de fantasía y
colorea con tonos vivos y fuertes. Los personajes son encarnados por diferentes
animales, con expresiones muy bien conseguidas, lo que aporta un punto desenfadado e
imaginativo. Bruno por ejemplo es una rana o Pedro una oveja. Y al final
veremos que la unión hace la fuerza. El sombrero de Bruno me ha parecido muy
recomendable.
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