Título: Las hermanas Makioka
Autor: Junichirô Tanizaki
Publicación:
Siruela, 2016
Páginas: 576
Pocos años antes de comenzar la Segunda Guerra
Mundial, en la tradicional Osaka, cuatro mujeres de clase alta tratan de
preservar una forma de vida ancestral que está a punto de desaparecer. Las hermanas Makioka es el retrato
conmovedor, pero implacable, de una familia y de la sociedad japonesa que
estaban enfrentándose al abismo de la modernidad. Lleno de bellas y delicadas
estampas de las costumbres de la aristocracia japonesa, captura tanto las
convenciones sociales como la íntima angustia de sus protagonistas.
Las hermanas Makioka, obra fundamental de Junichir¯o Tanizaki, es fruto de una redacción lenta y meditada, en la que buscó refugio de la catástrofe de la guerra, recreando un suntuoso y exquisito mundo con la nostalgia de un tiempo y felicidad que se estaban desvaneciendo.
Mis impresiones
Siempre me
han interesado libros que nos enseñan otras culturas y otras formas de vida
estando la japonesa entre las que más me atraen. He leído muchos autores de
esta nacionalidad pero tenía ganas desde hace mucho tiempo de leer algo de Junichirô Tanizaki, uno de los escritores más importantes de la literatura japonesa del
siglo XX.
Las hermanas
Makioka, Tsuruko, Sachiko, Yukiko y Taeko provienen de una gran familia de la
alta sociedad japonesa venida a menos. A falta de riqueza solo le queda
mantener la misma altivez de los tiempos pasados. Las tradiciones siempre se
han seguido a rajatabla entre sus miembros y así esperan seguir haciéndolo. Las
dos hermanas mayores ya han contraído matrimonio con dos hombres de buena
posición que honran a la familia.
Tsuruko,
como hermana mayor, es la señora de la casa principal, vive en Osaka y está
casada con Tatsuo, un empleado de la banca. De ella y su marido, que ha adoptado el apellido
Makioka, dependen todas las decisiones importantes que se tomen en la familia.
Sachiko, la siguiente hermana, vive en Ashiya y las dos hermanas menores viven
con ella a pesar de va en contra de la tradición de que permanezcan en la casa
principal. Pero ninguna de las dos profesa mucho afecto por el marido de la
hermana mayor y se encuentran más a gusto con esta.
Yukiko es la
siguiente hermana en edad y la próxima que debe casarse según la tradición de
que son las hermanas de mayor edad las que deben casarse en primer lugar. Pero
a sus treinta años el matrimonio no le seduce mucho. Anteriormente ha rechazado
a muchos pretendientes y ahora no está muy solicitada. Mientras Taeko, la más joven, espera impacientemente
que su hermana se case para poder ella misma contraer matrimonio con el hombre
al que ama.
Las hermanas Makioka nos relata la vida de estas cuatro mujeres en una
sociedad en la que ellas intentan mantener las tradiciones mientras que una
nueva mentalidad va introduciéndose en la sociedad tras el Periodo Meiji en que
el país comenzó a occidentalizarse. Uno de los temas que predomina en la novela
es el matrimonio. La novela se desarrolla en las primeras décadas del siglo XX,
momento en el cual el matrimonio era crucial para la mujer y si no lo conseguía
solo le quedaba vivir bajo las ordenes de otros hombres de la familia. No se concebía
que esta trabajara o viviera sola. Además su estatus dependía absolutamente del
partido que pudiese conseguir.
El autor
reconstruye perfectamente, a modo de novela costumbrista, como vivían estas
mujeres. Sus obligaciones, los conflictos diarios, la preocupación por no
perder el rango, las ceremonias del té, el gusto por la música o la asistencia
a los miai (ceremonia por la cual se
conocen un hombre y una mujer japonesa con el objetivo de decidir si ambos
aprueban el futuro enlace), la mayoría infructuosos con hombres viudos,
demasiado mayores, con hijos o que no tienen suficiente poder adquisitivo. Pero
también hace un relato bastante definido de la psicología de sus personajes.
El lector es
capaz de percibir esa tensión o ansia por no ser capaz de resolver el futuro de
Yukiko de forma satisfactoria. Primero por ella misma, por el resto de la
familia, por el que dirán y porque impide a su hermana la opción de estar con
el hombre con quien se quiere casar. Debe ser muy duro encontrarse en una
situación así. Pendiendo la vida de una persona de un matrimonio sin poder hacer
nada por ella misma, resultando además un problema para el resto de la familia.
Aunque es
una novela coral podríamos considerar que el personaje de Sachiko es un poco el
que dirige la novela y resalta un poco más.
Yukiko es una joven muy tímida y reservada que espera un pretendiente
que este a su altura. Ha rechazado a muchos hombres y ahora a sus treinta años
su soltería se ha convertido en un problema. Ya no hay tantos hombres
interesados en ella y los pocos que aparecen tienen demasiadas objeciones.
Además su carácter hace que sea difícil que las negociaciones lleguen a buen
puerto.
El cambio de
pensamiento se percibe en esta novela en la Taeko (o Koi-san como la llaman
cariñosamente). La única de las hermanas que con iniciativa propia ha intentado
independizarse un poco de la familia. Ha emprendido un negocio al elaborar
muñecas artesanales que se venden muy bien y además en contra de la familia ha iniciado
una relación con un hombre, muy mal vista a ojos de todos, cansada ya de
esperar a que su hermana se case. Para el resto de la familia será otra
dificultad retenerla y controlarla.
Es a través
de un narrador en tercera persona omnisciente como se nos relata la historia.
Su estilo es minucioso, relajado y muy detallista. Considero que no es una
novela para el lector que necesite acción o le gusten las tramas complejas
porque esta novela es sencilla y te conquista por la sutilidad de sus
personajes, por el contraste entre los conflictos que surgen entre ellas y por la
recreación de sus costumbres de la aristocracia japonesa. De forma muy sutil
también introduce el tema de las guerras con China o la situación a la que se
dirige el continente Europeo.
Conclusión
Las hermanas Makioka es una novela con un argumento aparentemente
sencillo pero que nos lleva a la realidad de las familias japonesas de
principios del siglo XX. Una novela para saborear despacio y apreciar la
multitud de detalles, gestos, escenas y conversaciones que simbolizan un estilo
de vida anclado en las tradiciones. Quizás no sea una novela para cualquier
lector pero a mí sin embargo me ha resultado una delicia.