Título: La semilla perfecta
Autor: Iñigo Montoya
Ilustradora: Marina Eiro
Publicación: Pastel de luna, 2016
Edad: +4 años
Páginas: 36
Tamaño: 24,7 x 24,7 cm
Ficha en Boolino
Los
niños del bosque se sienten tristes. El árbol donde viven, y que tanto les ha
dado, está moribundo. Y no quedan otros como él.
Por
suerte, los niños guardan sus semillas: pequeños pedacitos de su ser,
aguardando germinar. Ahora solo tienen que hacerlas llegar hasta un buen lugar,
en tierra fértil…
Descubre
las formas de dispersión de las semillas en este cuento lleno de naturaleza y
fantasía.
Mis
impresiones
Gracias a Boolino os traigo la reseña de
uno de los títulos del catálogo de Pastel de Luna, un sello editorial que se
dedica al álbum ilustrado infantil haciendo hincapié en historias procedentes
de la cultura asiática que nos ofrezcan su visión y su conexión con la
naturaleza. Su nombre hace referencia a un pastelito dulce que se regalan las
familias chinas en la Fiesta del Medio del Otoño en honor a la luna.
“La naturaleza, es como el
niño bien criado; siempre crece mejor en terreno abonado”
Esta es la primera frase que nos vamos a
encontrar y cuyo mensaje me parece muy acertado. La historia nos cuenta como en
un extremo del bosque había un terreo seco en el que solo existían polvo y
guijarros. Allí vivía un árbol viejo, arrugado y enfermo que estaba a punto de
morir porque no tenía con qué alimentarse.
Los niños del bosque estaban muy tristes.
El árbol representaba su hogar y le llamaban el abuelo. Llevaba escritas en su
corteza muchas de las historias que habían vivido los pequeños. Además
presentían que era el último en su especie y como cada uno de los ocho niños
había guardado una semilla del árbol decidieron encontrar la forma de llevarla
a un lugar especial donde pudiera crecer y dar una nueva vida. Así cada uno de
ellos comenzará a imaginar qué va a hacer con su semilla…
La
semilla perfecta nos ayuda a explicar a los niños
unos de los ciclos básicos de reproducción de la naturaleza que es la forma en
que las semillas se dispersan para perpetuar las especies. A través de las
ideas de los personajes de este cuento descubrirán que estas viajan a través
del aire, el agua o mediante el transporte de los animales así como la
capacidad de autodispersión que presentan algunas plantas. No obstante en las
primeras y últimas páginas del libro nos ofrece una información un poco más
técnica que tanto a ellos como a nosotros nos pueden ayudar.
Iñigo Montoya es el creador el texto y
lo ha concebido con magia y muchísima imaginación. Es importante que los niños conozcan desde el
principio cómo funciona la naturaleza y que aprendan no solo a conocerla sino
también a respetarla. Y libros como estos nos ayudan a satisfacer su curiosidad
natural. En la clase de mi hija en el colegio tienen un huerto y están
aprendiendo las nociones básicas sobre el cultivo de los vegetales pero ella se
plantea y me pregunta otras muchas cuestiones y dudas que le surgen sobre los árboles
o plantas.
Las ilustraciones son obra de Marina
Eiro y son espectaculares. Esta es una historia muy visual que en la que
destacan los tonos térreos de la naturaleza que simbolizan la época otoñal, el
momento en que los arboles pierden las hojas. Están dibujados mediante la
técnica de la acuarela por lo que las imágenes se difuminan levemente. También
me parecen muy interesante como ha creado a sus personajes. Los niños del
bosque nos transmiten ese contacto y amor por la naturaleza.
En conclusión, La semilla perfecta es un álbum ilustrado lleno de delicadeza, sutilidad y buen gusto que
acercará a los más pequeños a la naturaleza y les explicara uno de los procesos
naturales mediante el cual las plantas se propagan. Un libro que además de
entretener instruye.
Si te ha gustado puedes comprarlo en: Boolino