Título: El secreto
de Aurora Floyd
Autora: Mary
Elizabeth Braddon
Publicación:
dÉpoca, noviembre de 2013
Páginas: 560
El
secreto de Aurora Floyd, una de las más reconocidas novelas de intriga y
misterio victorianas, cuenta la historia de la bella señorita Floyd, hija única
de una actriz de provincias y el noble y rico banquero Archibald Floyd, que
debido a la inesperada muerte de su esposa al dar a luz, se ve obligado a criar
a su hija en soledad. Desde muy temprana edad, Aurora desarrolla intereses
«poco femeninos» para la época, y a medida que crece se ve envuelta en el
misterio y el escándalo. El pasado de Aurora encierra un secreto que obliga a
su apesadumbrado padre a enviarla de inmediato a una escuela privada de
señoritas en París.
A
su regreso a Inglaterra, dos hombres se enamoran perdidamente de Aurora, el
estirado y recto aristócrata Talbot Bulstrode, y el afable y sencillo John
Mellish. Pero, ¿cuál permanecerá a su lado si se descubre que Aurora tiene un
pasado tan «oscuro»?
Estamos
ante una heroína victoriana atípica, una joven bella y apasionada de carácter
fuerte y rebelde, dispuesta a desafiar el estricto código moral de su época,
constituyendo una afrenta contra el ideal femenino de la perfecta mujer
victoriana
Mi experiencia con la novela
Mary Elisabeth Braddon fue
una figura clave en la literatura victoriana que además pudo contar con el
privilegio de ser la primera mujer en escribir una obra de suspense (Lady
Audley´s secret, 1862). Se hizo muy conocida
tanto por su prolijidad, con más de ochenta obras escritas bajo su autoría, y
por el ingenio y originalidad que presentaban las mismas. Sus novelas
cosecharon muchos éxitos y su secreto fue conocer los gustos del público.
Aunque no siempre tuvo todo a su favor, ya que la creación de sus algunas
figuras femeninas, mujeres transgresoras y con comportamientos poco decorosos
para la época, escandalizó no a pocos y obtuvo duras críticas por parte del
sector más conservador.
La novela que hoy os traigo
hasta mi pequeño rincón es El secreto de
Aurora Floyd, publicada originalmente en 1863 y que la editorial dÉpoca
reedita, como siempre en un ejemplar de lujo. Se trata de una lectura deliciosa
que hoy en día no escandalizará al lector pero que en la época en que fue
publicada seguro que más de uno se echó las manos a la cabeza.
La historia se desarrolla en
la ciudad de Kent, Inglaterra, donde ha crecido Aurora Floyd, una mujer de
arrebatadores ojos negros y una inusual belleza cuyos gustos e intereses son
algo diferentes al resto de las jóvenes de la sociedad. Su padre, Archibald
Floyd, es un rico banquero que se ha visto obligado a criarla en soledad y siempre
se ha mostrado preocupado por estas tendencias “poco femeninas” de su hija. Cuando
se entera de que Aurora se encuentra en una situación comprometida decide
atajar definitivamente el problema internándola en un caro y exclusivo
internado en París.
Dos años más tarde la joven
regresa a la casa familiar pero no parece ser la misma. A parte del evidente
cambio obrado en ella se muestra malhumorada, demacrada, sin apetito y con los
nervios a flor de piel. Algo terrible ha ocurrido durante su ausencia del hogar
familiar y Aurora es consciente de que su secreto nunca ha de ver la luz.
Pero el tiempo va curando
sus miedos y pronto dos jóvenes, Talbot Bulstrode y John Mellish, se interesan
por la joven. Pero ella sólo aceptará a aquel que se resigne a ignorar su
oscuro pasado.
El argumento de esta novela
nos lleva a una historia donde misterio, chantaje, traiciones y crímenes se dan
la mano. Pero no es esto lo único que vamos a encontrar en la novela, porque si
esperamos únicamente y como plato fuerte descubrir el secreto de Aurora
probablemente nos decepcionemos. Es una obra muy ingeniosa que mezcla diversos
géneros de forma muy interesante.
La caracterización de sus
personajes esta profusa y minuciosamente detallada de forma que el lector no
tendrá ninguna dificultad en comprender tanto sus emociones y pensamientos como
su forma de actuar. Cada uno de ellos ocupa un papel destacado en la novela no
existiendo en ella personajes de relleno. Por muy secundario que sea su papel
en la historia la autora los matiza de diversas formas.
En esta ocasión su protagonista
es totalmente opuesta al ideal femenino de la época. Aurora no es una mujer
delicada ni una criatura frágil de mirada lánguida y gestos discretos sino una
mujer fuerte, inteligente e impetuosa, de carácter generoso pero indómito y
unos gustos “poco femeninos” que desea tomar sus propias decisiones. Hija de
una actriz de baja categoría que murió al dar a luz y un banquero rico que se
vio obligado a educarla en soledad Aurora fue mimada y siempre tuvo lo que
quiso.
En el centro de la historia
también se encuentran los dos protagonistas de la historia con caracteres casi
antagónicos. Por un lado tenemos al joven Talbot Bulstrode, un joven orgulloso,
altivo y de buena familia a quien todo el mundo respeta pero que no se siente
amado por nadie. Todo lo contrario le ocurre a John Mellish, un joven adinerado
a quien todo el mundo quiere pero poca gente respeta. Su carácter bondadoso,
afable y confiado ha facilitado que muchos se aprovechen de su buena voluntad.
Cabría destacar otros muchos
personajes interesantes en la novela pero por no extenderme demasiado me he
centrado en los tres que considero más llamativos y resaltables de cara al
lector de los que puedo hablar sin descubrir nada al futuro lector.
Mary Elizabeth Braddon utiliza
una prosa muy descriptiva, tanto en los personajes como al tratar la
ambientación, de forma pausada prestando especial atención a los detalles y
explicando ampliamente las situaciones en las que se ven envueltos sus
personajes. Incluso nos da la oportunidad de seguir el hilo de sus pensamientos.
Su estilo narrativo me ha parecido fino, elegante y formal, en el tono habitual
de la época. La obra se estructura en dos partes dividas a su vez en treinta y
nueve capítulos.
Un aspecto que me ha llamado
mucho la atención es que su narrador en tercera persona omnisciente focaliza la
acción durante gran parte de la novela más en los personajes que rodean a
Aurora que en su propia protagonista. Por tanto, muchos sucesos que
presenciamos los conocemos a través de las percepciones de otros y no de ella
misma. Además este narrador se permite en ocasiones enviar guiños al lector
para llamar su atención o enfatizar ciertas frases.
Como os decía antes, al leer
esta historia uno no sólo debe buscar simplemente el suspense o misterio que
esconde. Es un magnifico título para acercarse a una época de normas y costumbres
ya muy lejanas a la nuestra donde el papel de la mujer en la sociedad (marcadamente
machista) era muy precario y dependiente del hombre que se encontraba a su alrededor.
Bien fuera el padre, su primer tutor, o el marido con el que lo lógico era
desposarse para toda la vida. Mary Elizabeth Braddon también aprovecha para reivindicar
la figura de la mujer, para ensalzar su independencia y su fuerza sobre la
figura masculina que domina la sociedad.
Durante la novela su autora
sabe mantener le intriga en el lector durante toda la novela, sacando a
colación en diversas situaciones el secreto para no desviar la atención al
lector sobre el mismo pero guardándoselo fielmente hasta bien avanzada la
novela.
Conclusión
El
secreto de Aurora
Floyd es un deliciosa novela de suspense y misterio que atrapa entre sus
páginas. Sus personajes, su ambientación y su desarrollo me han hecho disfrutar
mucho con su lectura y la recomiendo para los amantes de la literatura victoriana.