Título: La maestra republicana
Autora: Elena Moya
Publicación: Suma de letras, septiembre de 2013
Páginas: 554
La lucha
esperanzadora de una mujer infatigable por cambiar el rumbo de una sociedad
truncada
Ella
no permitirá que negocien con su pasado
Décadas más tarde, en el momento culminante de la burbuja inmobiliaria, el nuevo alcalde de Morella planea la venta de la antigua escuela por una cantidad astronómica de dinero, para lo cual contempla varias ofertas que la convertirían en un casino, en pisos o en un centro satélite del elitista colegio de Eton, gracias al interés personal por Morella de uno de sus profesores. Con lo que no contará el alcalde es con la oposición y el tesón de la octogenaria maestra republicana, que hará todo lo posible por evitar que su escuela se convierta en moneda de cambio entre políticos corruptos.
La maestra republicana es el vibrante relato de una mujer que lucha por conservar la dignidad de su propio pasado y que nos adentra en el impenetrable mundo de Eton College y en la casi desconocida Residencia de Señoritas, la versión femenina de la Residencia de Estudiantes. Su historia y la de los personajes con los que se relaciona también es una metáfora de nuestro tiempo, de la corrupción política y la desesperanza social en la que vivimos, y de cómo un espíritu luchador puede ponerlos en jaque a la vez que recupera unos valores de honestidad y justicia casi olvidados.
Mi experiencia con la novela
Seguramente el nombre de Elena Moya os sonará más por su primera novela titulada Los olivos de Belchite, la cual tengo en casa pero no ha surgido la ocasión de leer y que en su momento cosechó muy buenas críticas.
La maestra republicana me llamó inmediatamente la atención cuando la vi entre las novedades de Suma de letras porque me transmitió que iba más allá de una simple historia y podría encontrar algo más en su lectura. Al final ha sido así y esta novela pasa por diferentes épocas y culturas reflexionando sobre presente y pasado y la evolución de los valores en la sociedad. Una novela que si lee con atención y una lo desea se le puede sacar mucho partido.
Morella, Castellón |
Una de las mejores ofertas proviene de una persona muy interesada en este proyecto. Él es Charles Winglesworth director del departamento de lenguas extranjeras del elitista colegio de Eton en Inglaterra, que se ha fijado en el lugar y cree que sería un sitio clave para establecer un anejo al centro de origen donde los estudiantes pudiesen aprender el idioma español.
Pero para Valli Querol, una anciana de 89 años, todo esto no tiene ningún sentido. La escuela guarda para ella un gran valor sentimental y está dispuesta a luchar con uñas y dientes para defender lo que cree correcto y sobre todo perpetuar su ideología republicana.
En cuanto a los personajes, encontramos excelentes descripciones para definirlos. Tanto de su interior como de su aspecto exterior. Quizás no me he visto identificada con ninguno de ellos porque representan figuras muy distintas a lo que soy yo pero esto no me ha impendido comprender sus motivaciones y su forma de actuar.
Valli, una de las protagonistas de la historia, se nos presenta como una anciana que ha tenido una vida muy interesante. Fue una chica que nació en Morella hija de unos masoveros valencianos muy humildes y que gracias a su inteligencia estudió en la Residencia de Señoritas en Madrid donde conoció a figuras emblemáticas de la cultura española. Posteriormente tendría la oportunidad de enseñar durante la segunda republica pero con la guerra civil se vio obligada a exiliarse y no pudo volver a su lugar natal hasta que la democracia se instauró en nuestro país. Pero a su regreso las personas ya no eran las mismas que ella esperaba encontrar y la sociedad iba en dirección opuesta.
Otro de los personajes con peso en la historia es Charles. Un alma solitaria, divorciado, graduado en Oxford y que se queda perdidamente enamorado de Morella al conocer sus encantos. En el antiguo colegio pretende establecer un colegio privado, sólo accesible a unos pocos que tengan el dinero suficiente para ello. Una idea que contrasta con los principios de igualdad de Valli, que cree que la cultura debe estar a disposición de todo el mundo.
Vicent Fernández es el alcalde de Morella. Un hombre sin escrúpulos, rudo y con poca educación que pretende revitalizar la ciudad y dejar su propio sello a costa de pactos y alianzas fraudulentas. Pero tras todo esto se esconde una venganza en mente.
No es una novela que tenga demasiada acción ni en la que ocurran hechos que nos sorprendan pero es tremendamente rica en cuanto a la defensa de ideales y culturas. La prosa de Elena Moya es sencilla y directa aunque pausada con amplia atención a los detalles y generosa en descripciones. La novela está narrada a través de una voz en tercera persona que va focalizando la acción en los distintos personajes.
En esta novela concurren escenarios muy dispares y cuya relación es difícil de establecer. Entre otros destacaría tres que me han llamado la atención por encima de los demás. Por un lado tenemos la ciudad de Morella en Castellón, un lugar catalogado entre los más bellos de España. Una ciudad pequeña, casi medieval y con un patrimonio cultural de inestimable valor.
Eton College |
La novela también nos introduce un poco en el mundo del Eton College (cercano a Windsor) uno de los más prestigiosos, caros y elitistas del Reino Unido que durante más de seis siglos ha formado a escritores, primeros ministros y artistas de diversos países. Un centro masculino orientado a formar banqueros y políticos pero sólo si pueden permitirse pagar la “módica” cantidad que el colegio pide. Una enseñanza privatizada accesible sólo a unos pocos.
La situación temporal en que se transcurre la historia tiene una importancia fundamental. Todo comienza en el año 2008 momento en que España vive su punto álgido en cuanto a la economía. Ese momento en que el dinero salía a espuertas sin que nadie mirase el origen o destino, sin que políticos tuvieran que dar apenas explicaciones porque siempre se podía rellenar un hueco de otra forma, el momento en que los precios inmobiliarios resultaban realmente absurdos. La fiebre del ladrillo sacó a muchos jóvenes estudiantes de las aulas para ir a la construcción donde obtenían dinero rápido. Casas y coches desproporcionados para los ingresos, un nivel de vida por encima de las posibilidades y un consumismo exacerbado. Mientras nos aseguraban que España iba bien todo esto estaba a punto de estallar.
Pero esta novela me parece sobre todo una declaración de principios. Desde el rechazo a la corrupción política hasta la importancia de ser fiel a los ideales propios pasando por una sociedad estancada y desilusionada. La cultura es el pilar básico para alcanzar una sociedad equilibrada de forma que primen la transparencia y la igualdad sobre los intereses económicos y políticos. Su protagonista quiere mantener a toda costa sus ideales luchando contra una sociedad que prácticamente se ha venido abajo.
Conclusión
Quizás La maestra republicana no es una novela con un argumento trepidante o personajes que te encojen el corazón pero si os gustan las novelas que van más allá de plantear un simple argumento hacen un recorrido por la historia y proporcionen temas para reflexionar sin duda esta puede ser una buena elección. Esta es la historia de una mujer luchadora, incansable que siempre pensó que el mundo podría ser mejor.