Título: El club del té
Autora: Vanessa Greene
Publicación: Suma de letras, junio de 2013
Páginas: 366
Con el aroma de
una taza de té, la vida sabe mejor.
Tres mujeres muy diferentes se conocen y se quedan
prendadas del mismo juego de té vintage
en un mercadillo de Sussex. Deciden compartirlo... y terminan trabando
una amistad que cambiará sus vidas.
Jenny se muere de ganas de casarse con Dan. Pero,
tras años de silencio, recibe noticias de la mujer que puede dar al
traste con sus sueños.
Maggie ha superado una ruptura matrimonial y está
preparando el mayor evento de su carrera... hasta que se ve obligada a
enfrentarse al pasado de nuevo.
Alison parece tenerlo todo: casada con el amor de su
infancia y con dos hijas preciosas. Pero a medida que se acumulan las
tensiones, su matrimonio se ve empujado al límite.
Mi experiencia con la novela
El club de té es la primera obra de la autora británica Vanessa Greene y una de las
últimas novedades, que recién llegada a España, se nos presenta con una
sugerente y atractiva portada que destaca por su sencillez y buen gusto y que
me llamó la atención nada más verla.
La historia que
nos narra El club del té no puede presumir
de mucha acción, más bien se trata de un libro emotivo y delicioso que nos habla
de las relaciones humanas a través de tres personajes unidos por una bonita
afición. Inglaterra es un país con un fuerte apego al té y representa una de
las bebidas más consumidas por sus habitantes de forma que incluso han
desarrollado alrededor de este hábito una especie de cultura y unos rituales
muy concretos. No podía ser de otra manera que esta novela se desarrollara
dentro del país en el que pensamos en primer lugar al hablar del té.
Jenny, Maggie y
Alison son tres mujeres muy distintas que acuden cada una de forma
independiente a un mercadillo de antigüedades en Charlestown situado en
Inglaterra. En el maletero de un coche descubren un maravillo juego de té vintage con una
tetera, cuatro tazas y la jarra de leche con un diseño de bonitos nomeolvides y
un ribete dorado.
Las tres
mujeres se enamoran inmediatamente del juego de té y cada una de ellas le dará
un uso diferente así, en vez de pelear por él, deciden compartirlo. A través de
este objeto forjarán una bonita y entrañable amistad que une sus vidas.
Esta es una
novela coral donde son tres las mujeres que protagonizan la historia. Las tres
viven en la ciudad de Sussex pero son muy diferentes entre sí. Jenny Davis es
una joven con veintiséis años que trabaja como gerente en un revista regional y
cuya pasión secreta es la de dibujar. Esta prometida con Dan y prepara su
próxima boda muy ilusionada aunque el presupuesto sea muy ajustado y no pueda
organizar la celebración con la que sueña. Su vida no presenta grandes
sobresaltos, disfruta de su familia y sus amigos. Aunque su corazón guarda un
gran pesar. La ausencia de su madre, que les abandonó cuando ella tenía seis
años le resulta muy dolorosa. No ha estado en los momentos más importantes de
su vida y tampoco lo hará en su boda.
Maggie
Hawthorne es organizadora de bodas experta en arreglos florales que dirige su
propia empresa llamada Bluebelle du Jour. Tiene treinta y seis años y está
divorciada desde hace cinco. Su ex marido, Dylan, un hombre del que estaba
profundamente enamorada la abandonó después de pocos años de matrimonio porque necesitaba
libertad y nuevas experiencias. Después del traumático proceso Maggie se vio
obligada, por cuestiones económicas, a afrontar una nueva vida, tras abandonar
su querido Londres. Ahora ha recibido un fantástico encargo para adornar una de
las bodas más transcendentales y lujosas de la flor y nata de la sociedad, un
trabajo que le puede dejar pingues beneficios y una publicidad impagable,
siempre que sepa comprender los extravagantes caprichos de la novia.
En cambio
Alison Lovell está casada con Pete desde hace veinticinco años y tiene dos
hijas adolescentes de doce y quince años, Holly y Sophia. En casa las cosas no
van demasiado bien, por un lado sus hijas últimamente le traen más de un
quebradero de cabeza y su matrimonio tampoco pasa por su mejor momento de forma
que incluso se ha planteado si no debería separarse. A sus cuarenta y dos años
es ella quien debe sostener la economía familiar pues su marido se ha quedado
en el paro y el dinero se esfuma. Se encarga de vender a otros establecimientos
portavelas, cojines y otros adornos de distinta índole que ella misma fábrica
en casa aunque sueña con tener su propia tienda.
Como veis el
argumento de la historia es sumamente sencillo pero lo mejor que encierra esta
novela es la relación que se establece entre ellas y que va solidificándose a
lo largo del verano. Tres mujeres que no son perfectas y que conllevan como
pueden sus respectivos problemas. Cada una de ellas se encuentra en una edad y
una situación familiar y laboral distinta pero a pesar de ello se comprenden a
la perfección y son capaces de ayudarse unas a otras. Son mujeres muy reales con
sus miedos, sus inseguridades y sus deseos que muchas veces no pueden
cumplirse.
En la novela se
apuesta por el realismo, que a veces puede resultar tan duro como la ficción. En
ella se tocan numerosos temas, que aunque no estén tratados con mucha
profundidad, los comprendemos perfectamente. Todos ellos tienen su origen en las
relaciones familiares, de amistad y de pareja. Rupturas sentimentales, amores inolvidables, problemas
con los hijos, relaciones que se enfrían, una economía decadente o la
incapacidad para comunicarse en ciertos momentos.
A parte de
estos me parece interesante un aspecto que plantea la novela. Y es que
proyectamos una imagen que en muchas ocasiones no se corresponde con lo que se
esconde en nuestro interior. Existen personas que van pisando fuerte por la
vida, que parecen ser muy seguras pero esconden como pueden todo aquello que
les hace sufrir.
La novela se
estructura en tres partes que se dividen a su vez en capítulos no muy extensos. Cada uno de ellos está
dedicado a una de las protagonistas a través de un narrador en tercera persona
que nos hace participes de toda la historia, desde el momento en que las mujeres
se conocen hasta su desenlace.
La edición que
presenta Suma de letras me ha parecido muy cuidada. Ya no sólo por la bonita
portada que entra sin duda por los ojos sino por ciertos detalles que agradan
al lector. En la cabecera de cada capítulo junto a la numeración hay un dibujo
de una taza de té. Son detalles minúsculos que, sin embargo, a mí me encantan.
Narrada con
esmero, con delicadeza y a través de un estilo envolvente es una novela que se
torna deliciosa entre las manos. No puede presumir de un ritmo trepidante ni
que contenga muchísima acción pero nos invita a realizar una lectura pausada,
disfrutando de cada momento protagonizado por las mujeres. Además la amplia
presencia de diálogos le imprime cierta agilidad en la lectura.
Conclusión
El club del Té me parece una novela amable que te hace sentirte bien, que invita a una
lectura tranquila, relajada y sin prisas. Un homenaje a la amistad y el amor.