Páginas

miércoles, 30 de enero de 2019

Preciosa Polly Pemberton - Frances Hodgson Burnett


Título: Preciosa Polly Pemberton
Autora: Frances Hodgson Burnett
Publicación: dÉpoca, 2018
Páginas: 180

La última novedad de la colección “Delicatessen” de dÉpoca, y que hasta ahora permanecía inédita en castellano, es de la famosísima y muy prolífica escritora de historias infantiles Frances Hodgson Burnett. Como es habitual nos viene en una edición preciosa con la que ya solo tener entre las manos nos hace disfrutar. La portada es una maravilla al igual que cada de unas ilustraciones que nos acompañan durante su lectura.

La historia comienza un día de 1877 en Inglaterra. El joven oficial de la Guardia Gaston Franleigh observa a una deliciosa joven desde la ventana de la casa en la que se aloja. La joven, que resulta bonita, encantadora y alegre, riega con delicadeza las plantas de su jardín mientras Gaston se queda prendado de ella. Sin embargo cuando conoce a qué se dedica comienzan los problemas. La preciosa Polly P., que es como todo el mundo llama a la joven, es actriz de teatro y estaría mal visto que un caballero como él la cortejara dada la fama de estas. Así tras una breve amistad y algunas visitas al joven Gaston no le queda más remedio que retirarse muy a su pesar.

Nos encontramos ante una novelita corta de argumento y trama relacionados con un romance. No es una novela romántica como tal sino más bien una comedia de enredos. Los dos protagonistas antes mencionados están interesados uno en el otro y sin embargo ambos saben que según las convenciones de la época no está bien visto que se vean. La autora pone a Polly y a Gaston en diversas circunstancias, en constantes encuentros y desencuentros que hacen de las delicias de cualquier lector y le arrancan no menos que una sonrisa.

Como fondo encontraremos una crítica a esa sociedad inglesa de finales del XIX tan estratificada y diferenciada que era casi imposible pasar de una posición a otra y en la que las apariencias tienen un papel esencial. La hipocresía de unos y otros al final es la marca del dinero que crea prejuicios e injusticias.

Polly es una joven graciosa, encantadora, divertida y bonita. El sueño de cualquier hombre siempre que tuviera una mejor posición social. Ella es muy consciente de la fama que arrastran las de su profesión y que es mejor no mezclarse con los nobles y ricos. Incluso ella misma es quien advierte a Gaston de los rumores que están generando sus encuentros. El joven viene de alta cuna aunque no tiene dinero porque ha discutido y separado del tío del que supuestamente iba a heredar la fortuna. Y sin embargo a pesar de su modesta economía el orgullo, que no es poco el que el joven ostenta, será más importante para él y se alejará de la preciosa Polly P.

La lectura de esta historia resulta deliciosa, amena y entretenida pero se acaba antes de que te des cuenta porque como ya he dicho es una novela que no alcanza las doscientas páginas. Además intercaladas en el texto nos vamos a encontrar las ilustraciones originales con las que se publicó el original. Descubrirlas es un gusto porque están muy cuidadas con respecto a los detalles, son maravillosas y además nos sirven para saber exactamente el aspecto que tenían los personajes en aquella época. Vestidos muy elaborados que ya designan el poder o posición del personaje con los que parece que las mujeres no debían moverse muy a gusto o algunos detalles delimitados por las escenas que nos ofrecen información sobre la época.

En conclusión, lectura deliciosa recomendable sobre todo para aquellos a los que les guste la literatura inglesa o para aquellos que les gusten las comedias de enredos que llevan el amor como protagonista.

lunes, 28 de enero de 2019

El puente de Clay - Markus Zusak


Título: El puente de Clay
Autor: Markus Zusak
Publicación: Lumen, noviembre de 2018
Páginas:670

Hace ya más de diez años que encontré por casualidad me encontré con un libro llamado La ladrona de libros que me gustó mucho. Luego vi que poco a poco se convertía en todo un best seller. Su autor, Markus Zusak, no ha vuelto a publicar nada hasta hace muy poco y regresa al panorama editorial con una novela que tiene muy poco que ver con la anterior. En este caso es una saga familiar pero muy poco convencional.

La novela comienza presentándonos a los cinco hermanos Dunbar: Matthew, Rory, Henry, Clay y Tomy. Todos ellos viven juntos y solos. Su madre murió y poco después su padre les abandonó. Desde entonces se han protegido unos a otros, tienen una casa llena de mascotas poco habituales como un mulo y se buscan la vida como pueden. La gente los considera unos barbaros incivilizados que hablaban mal, que se dedican a jugar, a pelear y a vagar.

A pesar de todo, la vida para ellos siempre continuaba hasta que un día se cuela en su hogar un hombre al que llaman el Asesino. Pero ¿Qué quiere este hombre de ellos? ¿Cuáles son sus intenciones? Lo cierto es nunca, nunca más ninguno de ellos volverá a ser el mismo.

Como os decía al principio El puente de Clay es una especie de saga familiar pero no tiene nada que ver con la novela arquetipo que nos suele llegar encasillada en este género. Es por un conjunto de varias cosas que me ha parecido una lectura fresca, original y novedosa dentro del género. Y ya me di cuenta desde su comienzo que para mí fue desconcertante. Por mucho que daba vuelta a las páginas no era capaz de centrarme y no entendía muy bien lo que estaba leyendo. Una sensación que hasta avanzar un poco más no se desvaneció. Y justo en ese momento en que se produce un click es cuando tu mente comienza a anudarlo todo y se disfruta realmente de la novela. Al final ha terminado gustándome mucho. De hecho mientras más avanzaba más lo hacía.

Poco a poco el autor nos va introduciendo en un mundo de secretos por descubrir, de emociones, de pérdidas y engaños. Hace que reflexionemos, que nos replanteemos ciertas cosas relativas a la naturaleza humana. Nos habla de vidas difíciles, de huidas, encuentros y nuevas oportunidades. De amor a la música y al arte. De abandono, tristeza y desamparo. Una novela con gran cantidad de sentimientos humanos.

Sobre los personajes cada uno de ellos cumple muy bien su función. Los cinco chicos Dunbar ocupan cada uno su lugar en la novela y son fácilmente identificables por el lector. Tomy, el coleccionista de mascotas, Henry, el descentrado, Rory, el buscavidas, y Mathew, el responsable, y Clay, quien guarda a sus espaldas un enorme secreto. A parte de ellos hay otros personajes comparsa que crean otras subtramas paralelas a la principal (que por cierto no os he hablado mucho de ella y creo que es mejor así). Quizás los personajes no tienen un enorme desarrollo psicológico ni el autor profundiza demasiado en ellos. Son personajes que hablan por sus acciones y no por su interior. De hecho los cinco hermanos son de pocas palabras quizás porque tienen miedo a expresar lo que sienten.  Aun así, son capaces de generar sentimientos y conectar de diferentes formas con el lector.

La forma en que la novela está escrita también es una buena razón para leerla. El narrador es Matthew, el hermano mayor, que escribe la historia en una vieja máquina de escribir (me en la novela). La forma en nos habla de la historia pasada de sus padres, la de sus hermanos, familia, amigos o gente que estuvo cerca de ellos en un pasado más cercano. Su estilo es muy lírico, rico en metáforas, con una fuerte carga simbólica (que ya apreciamos en su título) y referencias a ciertos títulos de la literatura clásica, la música y el arte. Su arquitectura muy compleja que va saltando en el tiempo, que cambia arbitrariamente de personajes y como os decía antes, que al principio es motivo de despiste del lector pero que al final de la novela se aprecia como un gran esfuerzo.

En conclusión, El puente de Clay es una novela narrada de forma impecable, con una trama que va envolviéndote poco a poco, unos personajes con los que empatizar y unos momentos inolvidables para cualquier lector. Si buscáis algo fresco y diferente os lo recomiendo.

viernes, 25 de enero de 2019

Frankenconejo - Jill Esbaum / Alice Breretan


Título: Frankenconejo
Autora: Jill Esbaum
Ilustradora: Alice Breretan
Publicación: Picarona, diciembre de 2018
Páginas: 40
Edad: + 3 años

Algo que a muchos de nosotros nos ha pasado de pequeños es que un hermano mayor, un primo de más edad o alguien muy cercano se aprovechaba de esa diferencia de edad que existía para aterrorizarte con monstruos o historias terroríficas. En mi caso, esa persona era bastante imaginativa y más de en una ocasión lo pasé realmente mal.

Eso mismo es lo que ocurre al pequeño Spencer, un conejito al que sus dos hermanos mayores, Leonard y Bertram, asustan con historias de monstruos. Y en concreto con una al que se conoce como Frankenconejo, el peor de todos.

Spencer sabe de sobra que los monstruos no existen pero a pesar de todo no puede evitar que las historias y sus detalles escabrosos (como unos colmillos horribles, unas zarpas grandiosas y unos ojos rojos chispeantes) le pongan los bigotes de punta. De día o al lado de papá y mamá es fácil ser valiente y aguantar el tipo. Pero ¿Qué ocurrirá cuando se quede solo? Todo se precipita con un terrible descubriendo dentro de un armario…

Todos los niños tienen sus miedos particulares. Bien producto de su mente, por las historias que escuchan el colegio, la televisión o en la calle llega un momento en que su imaginación se dispara y convierten cualquier sombra o ruido nocturno en criaturas monstruosas que van a atacar.

Este álbum ilustrado me parece un buen punto de partida para ilustrar y hablar lo que representan los miedos irracionales en los niños. En especial en la medida en que los demás afectan a nuestra mente introduciendo ideas tóxicas que nos hacen sentir mal.

Por otro lado también aprenderán que las malas acciones tienen su consecuencia y que lo que hacemos puede revertir hacia nosotros mismos en mayor medida. Todo el mundo debería tratar a los demás como a uno mismo le gusta que le traten.

La historia está narrada en primera persona por su protagonista haciendo gala de un gran sentido del humor, con mucho dinamismo y cercanía. Es como si Spencer te estuviera contando la historia a tú en particular.

Las ilustraciones son en su mayoría oscuras y sombreadas para darnos esa sensación de inquietud que pretende transmitir la historia con el monstruo Franconejo pero a la vez resultan divertidas y desenfadas. Resalto las expresiones de cada uno de los personajes que aparecen en ella porque dicen mucho.