viernes, 18 de mayo de 2018

Que decidan las cerillas - Carlos Salem / Kike Narcea


Título: Que decidan las cerillas
Autor: Carlos Salem
Adaptación gráfica: Kike Narcea
Publicación: Navona, enero de 2018
Páginas: 216

En una ciudad sin mar de la que parece imposible escapar, desaparece la gente. De noche. Gente de la noche que no le importa a nadie, porque a nadie le importa nada en la ciudad. Un bar. El de Lola, donde a veces suena jazz y a veces disparos. Un flautista que solo consigue tocar sus maravillas sentado en el váter. Un policía que escribe poemas con la misma brutalidad con que apalea detenidos. Una hermana pequeña perversa. Un borracho residente y sin convicción, al que llaman el Poe. Y un erudito en el arte de caer, encadenado a esa barra y a ese bar, tan cansado de equivocarse, que confía sus decisiones a las cerillas. Y las cerillas también se equivocan, pero al menos tiene a quien echar la culpa. Una noche en la que no va a ocurrir nada, y ocurrirá todo.

Mis impresiones

Sé que por aquí se ve poca novela gráfica pero de vez en cuando si llega una a casa interesante me animo y disfruto con la experiencia. Que decidan las cerillas es la adaptación gráfica de la novela El huevo izquierdo del talento de Carlos Salem, novela que no he llegado a conocer hasta ahora y que no he leído pero que me ha despertado curiosidad.  El libro ha sido publicado por Navona, adaptado por Kike Narcea y con un prólogo de Antonio Altarriba y un epílogo de Carlos Zanón.

“¿Para qué sirve una ciudad sin mar?
Para ahogarse en sus propias miserias.
Aquí… solo la mierda flota.”

La historia está protagonizada por un hombre al que llaman Poe (que según nos cuenta el prólogo viene de poeta no de Edgar Allan Poe). Un poeta que hace mucho tiempo que dejó de escribir y que alguna gente aún recuerda. Alcoholizado y destrozado, porque la realidad le oprime, pasa las noches en un tugurio de mala muerte a donde acuden constantemente majaras. Poe está harto de escucharlos pero aun así deja que sean las cerillas las que decidan. Si sale par permitirá a su acompañante que se desahogue. Y así es como esas cerillas arrojadas en la barra de un bar nos van permitiendo conocer diferentes historias protagonizadas por diferentes personajes.

Mi sensación al ir leyendo y observando estas historias es que todos sus personajes son gente frustrada cuya vida es decadente, triste y fracasada. Poe comenzará a escuchar las historias de una mujer que fue una gran actriz del cine porno que ha dejado atrás sus mejores años y a la que su marido engaña de una forma un tanto extraña, la de una prostituta que paradójicamente sigue siendo virgen y un policía que intenta resolver un caso relacionado con ella, la de una artista que perdió sus dedos, la de un mendigo que ese expone cada día a la muerte al tumbarse en la calle y esperar a que pasen los coches o la de Lola y su hermana menor entre otras. Lola es la dueña de ese tugurio donde acuden estos personajes. Para Poe Lola es alguien especial, alguien que puede darle un poco de aliento.

Que decidan las cerillas es una historia marcada por el sexo, la violencia, la ambición, la traición, la pasión, el alcohol, los vicios y la corrupción sobre todo. Como dice el propio protagonista una ciudad que ahoga a sus habitantes. Conocemos sus bajos fondos y esa parte más deprimente que existe en cualquier ciudad del mundo.

El libro está dividido en relatos que en un principio parecen independientes. Pero a medida que vamos leyendo nos vamos dando cuenta que no son historias aisladas las que nos vamos a encontrar sino que existe un nexo de unión entre ellas. La vedad es que cada una de estas historias tiene su punto y me ha resultado un trabajo interesante y original, que ha captado mi atención y que además me ha resultado muy entretenido. Cada historia me invitaba a leer la siguiente.

Las ilustraciones que acompañan al texto, que viene en forma de cajas para expresar el pensamiento de Poe o en bocadillos cuando los personajes dialogan, son tan sombrías como los protagonistas y sus historias. Nos encontramos un lenguaje directo, descarnado y duro. Dibujados en blanco y negro creo que lo más expresivo son sus personajes que con una mirada con claramente identificables, aunque tienen un cierto aspecto que roza la caricatura. Son un poco grotescos y exagerados. Unos ojos prominentes con rasgos muy marcados llaman la atención. Los escenarios tienen menor importancia que los personajes siendo un elemento poco visible porque el negro está muy presente en la obra, un poco en consonancia con lo que se quiere transmitir.

Conclusión

En Que decidan las cerillas nos vamos a situar en un bar de mala muerte donde una serie de personajes representan un panorama desolador. Un libro que me ha gustado mucho a pesar de que no soy una consumidora habitual de cómic pero al que le voy cogiendo el gusto.