miércoles, 5 de noviembre de 2014

La llamada del Norte - Claire Bouvier



Título: La llamada del Norte
Autora: Clarie Bouvier
Publicación: Ediciones B, julio de 2014
Páginas: 416
 
Canadá, 1875. Jaqueline, una joven de Hamburgo, nunca habría emigrado a Canadá de haber sabido lo que allí le esperaba. Alan, un viejo amigo de su padre, la acoge, pero resulta ser un hombre sin escrúpulos; especula sobre el patrimonio de la joven y quiere obligarla a convertirse en su esposa.

Jaqueline, recluida en su casa, logrará finalmente liberarse del yugo de Alan y escapar. Para ello solo contará con la ayuda de Connor, el propietario de un aserradero, quien le dará refugio no sin antes aventurarse en un paisaje fascinante en una peligrosa balsa que los conducirá a través de los Grandes Lagos hacia las cataratas del Niágara, donde vivirán una experiencia que cambiará sus vidas para siempre.

Mis impresiones

Aunque cueste creerlo han sido solo tres los días en que he leído o más bien tres ratos en los que he devorado esta novela. Junto a un estilo narrativo y una maquetación muy cómodas he encontrado una novela llena de aventuras, tremendamente entretenida y perfecta para relajarse ante una lectura que te permite una total evasión. Su argumento, sus personajes y su desarrollo no tiene mucha complejidad pero lo cierto es que no me costó nada sumergirme en ella.

La llamada del Norte comienza en Hamburgo en el año 1875. Tras la muerte de su padre la joven Jaqueline se queda sola, desamparada y completamente arruinada. Anton Halstenbek, un conocido y prestigioso cartógrafo que recorrió en sus viajes numerosas partes del mundo para dibujar los mapas, lo perdió todo en sus últimos años de vida cuando sumido en una severa depresión debido a la muerte de su esposa cae en una terrible adicción al alcohol y el opio que le hizo dilapidar la fortuna amasada durante años de trabajo.

Ante esta situación y el acoso de los prestamistas y acreedores Jacqueline se ve obligada  a deshacerse de todas sus pertenencias y vender la casa familiar pero no cuenta con ningún otro familiar que la acoja, al menos mientras encuentra un empleo en la ciudad. Por ello decide viajar hasta Canadá donde un amigo de su padre con quien se ha escrito durante meses y ha resultado ser un gran apoyo para ella durante la enfermedad de este le ha ofrecido su casa. Sin embargo, Alan Warwich no es el hombre amable y leal que ella pensaba encontrar y pronto se da cuenta de que su vida corre peligro…

En la sinopsis de la editorial cuentan algo más del argumento pero en este caso yo creo que resulta excesivo y destripa demasiado su trama. La novela tiene un argumento sencillo pero narrado de forma efectiva y que te atrapa a las pocas páginas. Nos encontramos ante una novela de aventuras donde su protagonista tendrá que hacer frente a diversas situaciones para sobrevivir. La muerte de su padre, la ruina, el enfrentamiento con un hombre ambicioso que quiere aprovecharse de ella además de tener que esconderse y luchar para proteger su propia vida. Como telón de fondo encontraremos una historia de amor que se desarrolla de forma tranquila sin recurrir a escenas excesivamente almibaradas ni grandes odiseas románticas.

Para mí el gran atractivo de esta novela es su ambientación. La acción comienza en Hamburgo en donde se desarrolla su primer tercio para continuar con el resto de la novela situándose en escenarios de Canadá a donde la protagonista viaja buscando una segunda oportunidad. Su padre fue un famoso cartógrafo que perfeccionando sus mapas viajó por todo el mundo y quizás de todas esas historias que escuchó desde pequeña el lugar que más impresionó a Jacqueline fueron las tierras canadienses.

Con respecto a este aspecto, me ha gustado especialmente encontrar casi en el último tercio de La llamada del Norte un acercamiento al mundo de la explotación de los bosques canadienses mediante los aserraderos, explicándonos su autora como se trabajaba y la curiosa forma en que se transportaban los pesados tronco a través del Niágara aprovechando la fuerza de su corriente. Por ello era un trabajo peligroso que necesitaba de hombres valientes y diestros. Las escenas que hacen referencia a ello están tan bien ilustradas que no le costará al lector sentir el entorno que rodea a sus protagonistas. Los verdes paisajes canadienses, las turbulentas aguas del río con sus balsas madereras y las bulliciosas cascadas del Niágara.

En consonancia con el resto de la novela la construcción de personajes se torna muy sencilla. Jaqueline como personaje cumple perfectamente su función a pesar de ser un tipo básico. Una mujer culta y valiente pero en cuyo interior podemos encontrar ciertas debilidades y dudas y es que al final también resulta algo ingenua. Quiere ser la dueña de su propia vida pero en el fondo sabe que junto a un hombre su bienestar sería más estable. Su exceso de confianza le hará vivir todo de tipo de situaciones y en el mismo camino irá encontrando tanto personas que la ayudarán como otras que la colocarán en situaciones muy delicadas e incluso comprometiendo su seguridad.

La llamada del Norte está narrada con un estilo funcional, ligero, directo y muy fluido pero también agradable en el que no cuesta nada adentrarse y avanzar. La autora es muy concisa al progresar en la trama obteniendo un buen ritmo que junto a la amplia presencia de diálogos hacen de esta una lectura muy ágil y dinámica. La voz narrativa es una tercera persona omnisciente que si bien por lo general se centra en el personaje protagonista en momentos puntuales puede focalizar su atención en otro personaje para relatar algo sobre el mismo. A lo largo de la extensión de la novela su ritmo, muy vivo, no decae en ningún momento de forma que el lector no encontrará paisajes tediosos o aburridos.

En cuanto a su estructura son cuatro partes en las que se divide en libro que agrupan más o menos las etapas diferenciadas que va cubriendo la historia. Cada una de ellas está dividida a su vez en otro número de capítulos cortos que nos llevan a un final dulce que no sorprende pero nos deja con una buena sensación.

Conclusión

La llamada del Norte es una novela sencilla y agradable, para leer sin más pretensiones que relajarse ante una lectura fluida en la que acompañamos a su protagonista en diversas aventuras y aderezado con un toque romántico.