lunes, 24 de marzo de 2014

Las amigas de ojos oscuros - Judith Lennox



 Título:  Las amigas de ojos oscuros
Autora: Judith Lennox
Publicación: Maeva, febrero de 2014
Páginas: 512

A Liv se le cae el mundo encima cuando su padre las abandona a ella y a su madre, y tienen que empezar una nueva vida en el pueblo de una amiga de juventud de su madre. Muy pronto, la tímida Liv conoce a las que serán sus mejores amigas: la bella Rachel y la rebelde Katherine. Al crecer, las tres chicas evolucionan de manera muy diferente —Katherine persigue sus sueños profesionales en Londres, Rachel se casa muy joven con el amor de su vida, y Liv se va a estudiar a la universidad—, aunque seguirán siendo las mejores amigas. El día antes de dar a luz, Rachel llama a sus amigas para decirles que quiere revelarles un secreto, pero nunca llega a contárselo. Descubrir el secreto de Rachel se convertirá en una prioridad para Liv y Katherine a lo largo de sus vidas.

Mi experiencia con  la novela

Aquellas novelas que se relacionan con las palabras “saga familiar” suponen una especie de imán irresistible para  mí. Por muchas que pasen por mis manos no alcanzan a cansarme. Así que cuando Maeva presentó Las amigas de ojos oscuros como tal (y bajo una atractiva portada) me llamó la atención de forma inmediata. Os adelanto que la novela me ha gustado mucho por diversas razones como son sus personajes, la ambientación en los años setenta y algún que otro detalle más pero no hay que esperar una historia al uso de esas que durante su desarrollo se plantean diversos interrogantes para llegar a un final de intensos descubrimientos que nos dejen con la boca abierta.

La historia arranca en el año 1960 cuando Liv y su madre Thea se mudan al pequeño pueblo de Fernhill en la campiña Inglesa para empezar una nueva vida después de haber sido abandonadas por el padre y marido de cada una de ellas. Allí gracias a una amiga de juventud de su madre, Liv conoce a otras dos niñas de diez años, Rachel y Katherine, que se convertirán de forma inmediata en amigas inseparables e incluso hermanas de sangre.

Juntas irán creciendo, compartiendo sueños e ilusiones pero cuando llega el momento inevitable en que cada una debe elegir su propio camino lo harán intentando mantener en todo momento el vínculo especial que durante años las ha unido. Mientras la bondadosa Rachel se casa muy joven con un hombre algunos años mayor para desgracia de sus padres y Katherine se muda a Londres para trabajar como periodista en una revista independiente, Liv se decide a estudiar en la universidad donde intentará encontrar el amor de su vida.

Poco después Rachel se queda embaraza y el día antes de dar a luz intenta reunir a sus amigas para hacerles una importante revelación. Finalmente la reunión nunca se producirá porque Liv y Katherines tienen otras preocupaciones. Desafortunadamente Rachel muere en el parto llevándose el secreto a la tumba y a partir de ese momento cada una de las amigas intentará seguir su vida, siempre con el remordimiento y el pesar de no haber acudido al encuentro de su amiga en el momento que más las necesitaba.

En cuanto a sus personajes estos destacan por estar muy bien construidos y representar figuras fácilmente identificables, con personalidad propia y diferenciables unas de otras. A pesar de que Rachel desaparece en las cien primeras páginas, en este espacio la autora nos deja ya el personaje muy matizado. Se trata de una joven de buena familia a quien su buena posición y todas las necesidades cubiertas le han formado un carácter muy bondoso y con una gran predisposición para ayudar a los demás. Katherine, en cambio, es mucho más rebelde e independiente. Le apetece ser la dueña de su propia vida y tomar decisiones a su aire y sin presiones de ningún tipo. Es la hija de un médico, con tres hermanos y una madre dedicada en cuerpo ya lama a la familia pero sin ninguna aspiración ni aliente en la vida. La apatía y desgana que Katherine ha percibido desde niña en su madre la ha hecho una joven decidida a no comprometerse jamás con una familia y vivir cada minuto de la suya de forma muy intensa.

Liv en cambio está marcada por la desaparición de su padre y los constantes interrogantes que se cuestiona alrededor de su figura. Quizás es también la razón por la que desea encontrar el hombre de su vida y establecerse formalmente en un hogar cómodo y reconfortante como el que nunca tuvo.

Alrededor de estos personajes van apareciendo otros muchos en la novela que van interactuando de distintas formas. Aunque en menor medida que sus protagonistas también quedan bien definidos y el lector es capaz de identificar fácilmente su papel en la historia.

Uno de los aspectos más conseguidos en esta historia es la excelente ambientación que se refleja a la perfección en el libro. La historia comienza en el año 1960 en un pequeño pueblo rural de Inglaterra y abarca hasta el año 1978. Un periodo de tiempo en que se producen una serie de cambios importantes en la sociedad a distintos niveles de forma que influyen en la vida personal de cada uno de sus personajes. La economía, la política, las costumbres están muy presentes en la novela enmarcando la historia en un contexto muy interesante que pasa por el movimiento hippie, la liberación femenina o el continuo cambio en la moda. Un tema que toca ampliamente es la evolución y desarrollo de la mujer en la sociedad haciendo hincapié en sus logros en materia de libertad e independencia y la incorporación normalizada al mundo laboral como aspectos primordiales. También se percibe la diferencia entre el estilo y concepción de la vida ente lugares tan distintos como la ciudad y los entornos rurales que crean familias de diversas índoles con pensamientos distintos también.

Ya os decía al principio que no era la típica  saga familiar que se sustenta en los misterios que envuelven sus personajes sino que su desarrollo se basa en las diversas relaciones que establecen sus personajes entre sí, las decisiones que toman en sus vidas y como estas van evolucionando así como la superación de las pequeñas desazones diarias o la alegría de los triunfos cotidianos. Esto no quiere decir que no existan ciertos misterios que proporcionen algo intriga en la novela. El secreto que Rachel se lleva a la tumba aunque influye en los personajes de Katherine y Liv, no es plato fuerte de la novela y se mantiene en un discreto segundo plano hasta alcanzar casi el final de la obra cuando recupera protagonismo.

La novela se estructura formalmente en tres partes que sirven como división respecto al intervalo temporal en que se va desarrollando la historia. A su vez cada parte se divide en una serie variable de capítulos hasta un total de diecinueve de extensión más bien extensa. La novela está narrada con un estilo ágil y fluido con alta presencia de diálogos y un narrador en tercera persona omnisciente que se mueve entre sus distintos personajes y mantiene intacto el ritmo de principio a fin.

Conclusión

Si os gustan las historias que rebosan amor, amistad y vida os encantará Las amigas de ojos oscuros. Una novela con personajes sólidos y bien definidos, una trama muy agradable que nos sorprenderá en algunos momentos, que atrapa desde el comienzo y que se disfruta de principio a fin. Muy recomendable para los amantes del género.


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