martes, 11 de marzo de 2014

Dos húsares - Lev Tolstói



Título: Dos húsares
Autor: Lev Tolstói
Publicación: Hermida Editores, enero de 2014
Páginas: 90

Considerada por la crítica como una de las mejores obras de Tolstói, Dos húsares (1856), traducida ahora al castellano por Olga Korobenko, es un “canto” a las licencias indecorosas y descaradas de la aristocracia militar rusa de la primera mitad del siglo XIX, cuya ejemplaridad fue perdiendo fuerza de generación en generación, aproximándose cada vez más hacia un ocaso que vivía de la exaltación de las medallas heredadas y de la gloria de tiempos pretéritos.

El conde Turbín es un oficial de húsares al que le gustan las mujeres, el juego, la bebida y los duelos. Aunque se deje llevar por sus gustos, no es esclavo de sus pasiones sino dueño de ellas. Dotado de un gran sentido del humor, sensibilidad y humanidad, une a su temperamento impetuoso y arrogante la elegancia de un carácter dominante y sobrio.

Un salto temporal de veinte años. El conde ha muerto. Tolstói hace aparecer en escena a su hijo, también oficial de húsares, que no puede vivir sino bajo la sombra de la fuerte e imponente personalidad de su padre, como un Hamlet desheredado. Hábilmente, el escritor ruso logra construir, a través de un juego de espejos entre la personalidad del padre y la del hijo, una historia de dos vidas cruzadas por el destino de las afinidades consanguíneas y por el deseo racional de destruirlas. Toda una obra de arte.

Mi experiencia con la novela

Hay obras que alcanzan tal trascendencia en el mundo literario que llegan a ensombrecer por completo el resto del trabajo de un determinado autor, llegando en muchos casos a existir buenas novelas que pasan totalmente desapercibidas por el público. La dimensión que han alcanzado algunas de las novelas de Tolstói como Anna Karenina o Guerra y paz, por citar las dos más significativas, es tal que esta obra que hoy os traigo aun siendo considerada por la crítica profesional como una de las mejoras obras de su producción es muy poco conocida.

La novela es uno de los primeros trabajos del autor y fue publicada originalmente en 1856. Tal  vez para que no se pierda en el olvido la editorial independiente Hermida la ha acoplado a su colección amarilla con la que pretende recuperar clásicos de la narrativa. La traducción corre a cargo de Olga Korobenko.

Dos húsares transcurre en dos épocas distintas. A principios del siglo XIX, conocemos al conde Turbín, un oficial de los húsares. Apuesto, alegre, aficionado al juego y seductor pero también un hombre amable y de gran corazón. Durante un viaje, y según cuenta él mismo, es atracado y le roban todo el dinero de forma al llegar a la ciudad de K. se encuentra sin posibilidades de pagar el hotel donde ha de descansar una noche por lo que se ve obligado a solicitar ayuda económica. Allí se relacionará de distintas maneras con la gente de lugar.

Veinte años después el conde Fiódor Turbín ha perdido la vida en un duelo de honor con un extranjero. Su hijo de veintitrés años, también convertido en oficial de los húsares, llega a la misma ciudad de K. cuando su regimiento de camino al frente se detiene en el lugar para pasar una noche. Allí se encontrará con algunos viejos conocidos de su padre en los que dejó un recuerdo imborrable.  

La novela se hace eco de dos situaciones  similares que se producen con veinte años de diferencia. A  pesar de que sus personajes físicamente son idénticos, no en vano son padre e hijo, en su interior guardan suficientes diferencias como para que las historias concluyan de formas bien distintas. Como el mismo  Tolstói nos hace notar al principio de la novela los tiempos cambian y evoca en una especie de prologo un tiempo pasado en que faltaban muchas cosas por descubrir.

Es esta una novela de personajes en la que todo gira en torno a su psicología. El conde Turbín es un hombre abierto, alegre que sabe ganarse la simpatía de todos los que le rodean con su desparpajo y buen humor. A pesar de ello el conde tiene muchos vicios. Le apasionan las mujeres, el juego y la bebida y siempre está dispuesto a defender su honor mediante un duelo entre caballeros, aspectos que lo han convertido extrañamente en una persona que levanta admiración en su entorno. En cambio, el hijo es una persona mucho mas juiciosa, inteligente y prudente, aunque si bien su amor al decoro le impiden cometer ciertos actos e incluso desprecia todo lo que la figura de su padre representa.  Pero existe además una diferencia sustancial entre ambos mientras uno de ellos se deja llevar por la pasión (capaz de mentir, conquistar el favor de una dama pero también de impartir justicia y derrotar al tramposo) el otro actúa por pura mezquindad.

La obra nos da unas breves pinceladas sobre la vida militar y burguesa en la época. Sus distracciones y sus intereses pero también el respeto hacia las apariencias. En ella se nos habla del libertinaje, del engaño, los vicios, el honor y las formas.

Cuando nos acercamos a un clásico escrito con tanta distancia a menudo podemos observar cómo ha evolucionado la sociedad, como cambian los valores y lo esencial se ha transformado. Pero hay algo que permanece inmutable a lo largo del tiempo y no son más que los cambios en sí mismos. Dos húsares nos habla de ese cambio generacional que se produce de forma constante y la diferencia en la mentalidad que normalmente existe entre padres e hijos.

La novela de muy corta extensión, se desarrolla en un par de días, los necesarios para que estos dos personajes dejen sus huellas por donde pasan. Estructurada en dieciséis capítulos cortos y narrada por una voz omnisciente en tercera persona tiene un estilo claro y conciso pero con cierto regusto a antiguo donde queda claro en qué época fue escrito pero a la vez fácilmente compresible por el lector. Aunque los diálogos no son despreciables predomina la narración con descripciones muy precisas sobre personajes y escenarios que nos ayudan a visualizar la acción.

Conclusión

Personalmente no puedo afirmar si Dos húsares es una de las mejores obras de Tolstói pues mi experiencia con el autor se limita a Anna Karenina, una obra que por supuesto recomiendo. Lo que yo os puedo contar es que me ha resultado una buena novela, que se lee de forma gustosa, con personajes muy significativos y escenas muy representativas.