viernes, 28 de septiembre de 2012

No todos moriréis - Antonio Jareño




Andrés trabaja en una oficina bancaria de Murcia. Cuando descubre junto a su amigo Walter un extraño apuñalamiento que han captado las cámaras de seguridad del banco se pone en guardia inmediatamente. El suceso es lo más extraño que ha visto en su vida y no puede creer lo que sus ojos le están mostrando. Poco después su amigo Walter muere apuñalado y comienza su búsqueda para encontrar la verdad. 

El padre Alonso recibe una maleta con un objeto muy curioso después de dar la extremaunción a un hombre. Se trata de la carta escrita en el siglo XIX que envuelve un libro antiguo. El autor es un párroco que contaba un extraño suceso del que fue testigo en vida y quiso dejar constancia antes de morir. Para reconciliarse con su fe decide investigar cuanto pueden tener de verdad estos hechos.

Magnus Ingaldsen es uno de los doctores más reputados en su especialidad, la cirugía estética. Ha creado un auténtico impero sobre la salud, la cosmética y la estética. Vive obsesionado con encontrar la fórmula mágica que consiga detener el envejecimiento y hacer inmortal a la humanidad.

Pero ¿Qué tienen en común estas personas? ¿Estarán relacionadas sus búsquedas? ¿Llegarán a cruzarse sus caminos?


Mi experiencia con la novela

Hacer un resumen de esta novela resulta complicado porque su contenido abarca tantas tramas paralelas y tanta información que resulta muy difícil condensarlo de forma breve y coherente. El argumento es bastante complejo aunque no por ello resulta una novela difícil de leer sino todo lo contrario porque una vez comienzas su lectura es inevitable querer desentrañar todos los misterios que esconde.

Hay tres subtramas principales muy relacionadas entre sí las que aparecen en esta novela. En primer lugar tenemos una cámara de seguridad que recoge un apuñalamiento asombroso sucedido en las puertas de un banco. Por otro lado tenemos un cura a quien le llega una carta que recoge unos hechos tan increíbles como sorprendentes. Y una tercera trama que nos lleva a conocer al doctor Ingaldsen, un hombre obsesionado con encontrar el elixir de la juventud.

En principio parecen no estar muy relacionadas entre sí pero cuando los personajes comiencen su búsqueda nos daremos cuenta que su objetivo es común y que los tres persiguen un mismo objetivo. Un propósito que está íntimamente relacionado con una leyenda que lleva siglos viajando por el mundo. Se trata del “Judío errante”, un hombre sobre el que se han hecho muchas conjeturas acerca de su identidad, que ha sido visto en diferentes épocas y lugares distintos y que aseguran que resucitado por Jesucristo ha alcanzado la inmortalidad entre los hombres.

Esta es una novela coral que destaca por la aparición de un gran número de personajes que todos y cada uno de ellos tienen una importancia vital en la historia. Cada uno tiene una misión y aporta una parte fundamental en el desarrollo de la historia.

Andrés trabaja en un banco y su vida es muy normal. Esta soltero y aunque vive solo aunque aún depende prácticamente de sus padres a quienes acude habitualmente para satisfacer sus necesidades.

Alonso tiene cuarenta y dos años y es un cura un poco especial. Ha sido destinado a una iglesia de Yecla como coadjutor del párroco. Sus superiores aún no tienen la suficiente confianza en él para proporcionarle un puesto de mayor responsabilidad. Ha sido castigado varias veces por su conducta indisciplinada. Las discusiones con sus superiores, los excesos con el alcohol y algún que otro escarceo amoroso han sido una constante en su vida.

Magnus Ingaldsen es un médico que investiga obsesivamente un remedio contra el envejecimiento. Es el dueño de varias clínica de tratamientos estéticos, una farmacéutica y además pertenece a un grupo de sabios denominado “Rectángulo”, una especie de consejo multidisciplinar que debate sobre diversos temas para mejorar la humanidad.

Otros personajes con mucho peso en la historia son Goran, un ex militar croata y jefe de seguridad de ingaldsen, Andrew Jackson, el dueño de Global Sleuth, una empresa que trabaja obteniendo información, Joseph Arlington, cuya mujer está a punto de morir por una grave enfermedad o Laura Marco una médica que estudia en la universidad de Berlín.

Son personajes que destacan por estar perfectamente dibujados a pesar de ser complejos y presentar múltiples facetas. A la vez son muy reales porque no lo tienen todo controlado y también tienen sus dudas, sus miedos, sus debilidades y sus recelos. Incluso incluye de manera muy hábil algunos pensamientos de los personajes. Después de pasar por todos los acontecimientos que suceden en la novela marcarán su vida y los personajes muestran una evolución muy clara. Sus búsquedas no quedan en vano porque cuando encuentren la verdad nunca volverán a ser los mismos.

Los escenarios en los que transcurre la historia son numerosos y dispersos por todo el planeta. Desde pequeñas poblaciones como Yecla situada en España hasta grandes ciudades como Nueva York, Roma o Berlín pero pasando también por sitios como Granada, Reikiavik, Houston o Texas.

Toda la acción transcurre en tan solo 38 días. Un espacio de tiempo en el que suceden muchísimas cosas y el ritmo de la novela es trepidante. En ningún momento llega a decaer manteniendo el interés de forma constante. En la novela vamos a encontrar espionaje, guerra entre las farmacéuticas, médicos que juegan a ser dios, intereses personales, política. Todo narrado con muchísima acción y con varios giros interesantes en la trama.

La historia está contada íntegramente a través de un narrador omnisciente de forma que podemos conocer en cualquier momento todos y cada uno de los movimientos de sus personajes. Es estilo de Antonio Jareño es ágil, rápido, contextualizando situaciones muy bien pero sin perder un ápice de velocidad. Aquí no hay hechos gratuitos ni fragmentos innecesarios. Todo suceso nos lleva a unas consecuencias.

Destacaría que el autor es muy habilidoso a la hora de manejar tantos personajes a la vez, tantos lugares de referencias y tanta acción de forma coherente y sin llegar confundirnos. Sabe introducir personajes reales y mezclar realidad y ficción.

La temática es la inmortalidad o la eterna juventud vista desde dos perspectivas tan distintas como la ciencia y religión que normalmente son incompatibles. Jareño nos invita a reflexionar sobre nuestra posición, a repasar nuestra fe o reiterarnos en nuestras opiniones.

En relación a ello, son frecuentes las alusiones a Alexis Carrel, un médico galardonado con el Nobel de Medicina en 1912 gracias a sus avances en materia de sutura cardiovascular, una contribución muy importante a la cirugía moderna y que permite alargar y mejorar la calidad de vida.

Por otro lado introduce algunos de los milagros más conocidos en la historia. Los que la iglesia acepta y defiende como reales. Y que sirven a los personajes para cuestionar sus creencias.

Un tema interesante que nos se nos plantea es que si se descubriese un remedio contra el envejecimiento y por ende hubiese la posibilidad de no morir si habría que considerar que todos los individuos merecerían la oportunidad de ser inmortales o debería seleccionarse los mejores individuos mejorando con ellos la raza humana. Descartar los individuos menos afortunados y crear una nueva raza invencible. Una cuestión que ha existido ya que ha causado muchos problemas a lo largo de la historia.

Conclusión

“No todos moriréis” me parece una historia muy entretenida para los amantes del thriller pero también para aquellos que ocasionalmente disfrutan con este género. Antonio Jareño ha escrito una novela en la que lanza el gancho con maestría. En ella encontraremos misterio y muchísima acción además de narrarnos unos hechos que despiertan nuestra curiosidad y nos atrapan hasta la última página de la novela, que nos hacen indagar e intentar sacar nuestras propias conclusiones respecto a unos temas que siguen de actualidad.

Os dejo un extracto de la novela que sintetiza perfectamente todos los elementos de interés:


 “Una antigua carta, un vídeo, unos mártires, un asesinato, una empresa que vende juventud, un extraño prisionero que muere varias veces y que quizá sea el mismo que aparece y desaparece en las fotografías. Un sacerdote, un empleado de banca y un medico”